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Una Bitácora Cubana (XIV)

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Esta es una bitácora muy especial. Sale un presidente norteamericano y llega otro; el primero, deja una nueva huella en las tumultuosas relaciones entre Cuba y su país, y el segundo se estrena con un discurso “proteccionista” y un gabinete donde solo hay tres mujeres, un afroamericano y, por primera vez en más de 30 años, ningún latino.

 

1-La decisión de Obama de derogar súbitamente (esto es un dato esencial) la norma “pies secos, pies mojados” ha generado múltiples reacciones, a favor y en contra. Hay, por ejemplo, frente a posturas opositoras que son comprensibles y razonables, aquellos que siempre se opondrán, como un tic nervioso, no por una justa evaluación de la decisión, sino porque la misma es tomada por un presidente del partido contrario; forman parte de las legiones de políticos convencionales que ven la política más como confrontación que como diálogo –afectando con ello el carácter democrático de la misma-.

Diversas notas han resaltado el tema. En América 2.1 hemos publicado varias. Pasemos a recordar algunas de ellas.

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En “Reporte Católico Laico” se destaca que “Los obispos cubanos piden a Obama que revoque su decisión en aras de la justicia y la misericordia”. La Conferencia Episcopal de Cuba se une así a sus hermanos, los obispos de Estados Unidos, al mostrar su preocupación por el “presente inesperado y el futuro incierto” de sus compatriotas.

Este “drama humano” afecta, según los obispos, a “muchas personas y familias”, que se hipotecaron e “hicieron grandes sacrificios” para poder emigrar a Estados Unidos. Eso sacrificios, ahora, no les sirven de nada, porque las “normas migratorias que los amparaban” de pronto han quedado derogadas. En pleno camino, les han cambiado las reglas de juego.

Ante esta dramática y crítica situación en la que se encuentran muchos cubanos, los prelados de la isla piden a las autoridades USA que “busquen caminos de solución (del problema) conforme a la justicia y teniendo en cuenta la misericordia”. Como suele ser habitual en sus comunicados, los obispos terminan pidiendo la protección de la Virgen del Cobre, patrona de la isla.

 

-Desde diversas partes de Centroamérica, los medios noticiosos reseñan la desazón y desesperación de miles de compatriotas que vieron convertidos, en cuestión de horas, sus sueños en pesadillas.

Para el gobierno de Obama, se hizo hincapié en el aumento constante, año tras año, de la migración cubana, sobre todo por razones económicas. Según el Pew Research Center, que cita datos oficiales estadounidenses, el número de migrantes cubanos que llegaron a Estados Unidos en los 10 primeros meses del año pasado fue de 46.635, reporta AP.

 

En El Nuevo Herald, Nora Gámez Torres informa sobre la postura oficial gubernamental en nota titulada EEUU aclara dudas sobre impacto de nueva política migratoria hacia los cubanos”.

La misma ha dejado en un “limbo” (más bien un infierno) a miles de cubanos “con solicitudes pendientes o que estaban en tránsito”. A continuación, algunas de las explicaciones dadas a nivel oficial a ese medio:

¿El nuevo acuerdo afecta a mas de 2000 médicos que ya habían solicitado el parole a través del CMPP?

“Esto no afecta a los individuos que han recibido previamente el parole [admisión condicional] y están actualmente en el país. Para aquellos que ya han solicitado y están a la espera de una respuesta, el Departamento de Seguridad Nacional dejará de dar preferencia especial a las solicitudes de parole formuladas por nacionales cubanos, incluidos los profesionales médicos cubanos. En su lugar, esas solicitudes serán consideradas como solicitudes presentadas por nacionales de cualquier otro país”, respondió una vocera de DHS.

Para el abogado de inmigración de Miami, Wilfredo Allen, “aplicar una política de forma retroactiva”— como en este caso, a quienes ya habían solicitado la admisión condicional — “va en contra de todos los valores de la Constitución” de Estados Unidos” y de los principios generales del derecho Universal/Natural añadimos nosotros.

Activistas y familiares han denunciado que hay personas que fueron devueltas a Cuba desde el aeropuerto internacional de Miami, aún cuando tenían visas para entrar a Estados Unidos. ¿Hay cambios en las políticas de visas para los nacionales cubanos?

La vocera de DHS repitió que los nacionales cubanos con visas serán tratados del mismo modo que otros extranjeros.

En esos casos, el funcionario de inmigración puede determinar la entrada o no al país, en dependencia, entre otras cosas, de una valoración de si el extranjero querría permanecer en EEUU más allá de lo autorizado. Los cubanos mantienen el derecho a solicitar asilo político.

Si un cubano entra a Estados Unidos legalmente y se queda más tiempo del autorizado en su visa, ¿podría ser deportado o devuelto a Cuba?

El diario oficial cubano Granma fue el primero en publicar que “…en caso de que personas que entren legalmente a los Estados Unidos con visas de turismo u otras, pero permanezcan por más tiempo del autorizado o traten de permanecer irregularmente en ese país, serán regresadas a Cuba en virtud de los nuevos acuerdos”.

La Casa Blanca confirmó esta información. “Los cubanos que vengan a Estados Unidos después del anuncio del jueves están sujetos a las mismas políticas de inmigración que cualquiera de cualquier otro país. Las personas con papeles o visas válidas son elegibles para permanecer; las que llegaron después del anuncio del jueves y se queden más tiempo que sus visados turísticos serán tratados como los demás y serán removidos”.

Sin embargo, el Departamento de Seguridad Interna indicó que si un extranjero se queda más tiempo del autorizado es “elegible” para ser expulsado. Ello no quiere decir, explica Allen, que agentes del DHS activamente se dediquen a identificar y a expulsar a cubanos que se hayan quedado más allá de la fecha de expiración de sus visas.

“En EEUU hay millones de personas ilegales que entraron con visas y todos ellos pueden potencialmente legalizarse aunque todos pueden ser expulsados, ¿pero crees que van a deportar a millones de personas?”, cuestionó el abogado.

¿Puede un cubano que haya entrado a Estados Unidos con visa y se queda más tiempo del autorizado ajustar su estatus bajo la Ley de Ajuste Cubano?

“Si usted se queda más tiempo del autorizado por su visa, es elegible para ser removido. Sin embargo, si usted está aquí por un año con una visa válida, hasta que la Ley de Ajuste Cubano sea derogada, los cubanos podrán continuar buscando ajustar su estatus si han sido admitidos [con una visa] o admitidos bajo palabra (parole) en los Estados Unidos en cualquier momento, han estado presentes durante al menos un año, y son admisibles como inmigrantes”, indicó la vocera.

La Ley de Ajuste Cubano no requiere que el nacional cubano se encuentre legalmente en el país durante todo el año sino que haya entrado legalmente, con visa o admitido condicionalmente (paroled).

 

Para Jon Lee Anderson, en nota publicada en The New Yorker, y titulada, “La última gran movida de Obama en Cuba”, la medida busca, en primer lugar, afianzar la mayor cantidad posible de sus políticas, o al menos entorpecer su revocación por Donald Trump”.

El final de la política de entrada libre a Estados Unidos para los cubanos, llamada “pies mojados, pies secos”, tiene el propósito de servir como un respaldo para la histórica reconciliación de Obama con Cuba —que Trump ha amenazado con deshacer— y como un freno al gran flujo de cubanos que entran a los Estados Unidos desde que se anunció el restablecimiento de relaciones diplomáticas en diciembre de 2014.”

Desde el momento en que el líder cubano Raúl Castro y Obama anunciaron el acercamiento entre los dos países, la mayoría de los cubanos dedujeron que si se alcanzaba la normalización de las relaciones diplomáticas, el favoritismo cubano de “pies mojados, pies secos” también se acabaría, y tenían razón.

Haciendo hincapié en la explicación dada por el gobierno de Obama, “el asesor de políticas exteriores de Obama y supervisor de Cuba, Ben Rhodes, defendió la movida, diciendo que la mayoría de los cubanos que estaban llegando no eran refugiados políticos como en los años anteriores, sino inmigrantes económicos, y que Estados Unidos reconoce que el futuro progreso de Cuba depende de su capacidad de retener a “una población joven y dinámica”.

Destaca también Anderson que “Más de medio millón de cubanos, llamados cuentapropistas, se ganan la vida de manera independiente del estado con pequeñas empresas, que van desde posadas y cafés llevados por familias hasta taxis privados. En la apertura a la isla de Obama, también se ha hecho énfasis a éste creciente sector de la economía. Al legalizar y promover las inversiones americanas, eliminar las restricciones a las remesas financieras y facilitar el turismo americano, ha habido un enorme aumento del flujo de dinero y personas entre los Estados Unidos y Cuba. La vida para muchos cubanos, aunque aún está sujeta a muchas restricciones, es mejor de lo que solía ser. Mientras que alguna vez los cubanos en Miami y la Habana se miraban a través de un golfo intransitable, ahora las dos comunidades se mezclan cada vez más, con inversiones de cubanos americanos en pequeñas empresas de la isla. El año pasado, un estimado de doscientos ochenta y cuatro mil americanos viajaron a la isla —setenta y cuatro por ciento más que en 2015—“.

 

-Frente a esta situación, El New York Times publicó un editorial justificando la medida (“Ending a Misguided Cuban Migration Policy”) por diversas razones, tales como:

-“It encouraged Cubans to embark on perilous, and often deadly, journeys on rafts across the Florida straits and across borders in South and Central America.

-It exacerbated Cuba’s brain drain, particularly after 2006 when Washington created a pathway for medical professionals abroad to defect by applying for visas at American embassies.

-And it unjustifiably gave Cubans preferential treatment while Haitians and Central Americans who were fleeing far more desperate circumstances were deported.”

Esta también la afirmación –mencionada en dicho editorial- según la cual esta suspensión conducirá a muchos, especialmente jóvenes, a protestar y exigir cambios sustantivos en la Isla ante la evidente salida próxima de Raúl Castro, luego de la muerte de su hermano; de hecho, se cita a Eliécer Ávila, del Grupo disidente “Somos +” es optimista de que aumentará el número de opositores; “el problema fundamental no son las leyes de otros países, sino la realidad que vivimos”. Una gran verdad.

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Pero también desde la Isla, Reinaldo Escobar, en 14ymedio, nos dice lo siguiente, en una nota titulada “Cuando se pierde una esperanza” y que, por su importancia, reproducimos completa:

“El fin de la política de pies secos pies/ mojados acarrea entre sus múltiples consecuencias la pérdida de la esperanza para un gran número de cubanos. Pocas veces en nuestra historia nacional una decisión tomada fuera de las fronteras de la Isla ha tocado la vida de tantos nacionales de una manera medular y definitiva.

Entre los afectados se encuentran los migrantes que ya se hallaban en camino hacia Estados Unidos, también aquellos que vendieron sus propiedades para sufragar los gastos del viaje, los que aguardaban agazapados una oportunidad para desertar de una misión oficial o simplemente quienes soñaban con escapar de la Isla. En total suman decenas de miles de personas.

Sin embargo, hay un número mucho mayor. Incalculable. El que conforman todos aquellos que veían en la posibilidad de emigrar una motivación para comportarse con docilidad ante las dificultades. Son quienes confiaban en que, llegado ese momento en que no soportarían más la dura cotidianidad de la Isla, les quedaba una salida: la balsa, las selvas de Centroamérica, la frontera mexicana, el Estrecho de Bering…

Como la última porción de agua que se lleva en la cantimplora al cruzar el desierto, el salvavidas que la azafata muestra para casos de emergencia o la bocanada de oxígeno con la que el buzo debe tratar de alcanzar la superficie, la política de pies secos/ pies mojados representaba para muchos en esta Isla la esperanza. La ilusión de que llegados al límite siempre tendrían una tabla de salvación a la que aferrarse.

“Si la cosa se pone fea arranco y me voy”, era un pensamiento recurrente que lo mismo aparecía en jóvenes que en mayores, en pobres o nuevos ricos, en disidentes u oficialistas. Les aliviaba saber que la caja cerrada en que se ha convertido Cuba tenía una puerta de salida. Quizás nunca la usarían, pero era un bálsamo saber que allí estaba.

A partir de ahora no hay salvavidas bajo el asiento, agua en la cantimplora para atravesar el desierto ni queda oxígeno con que volver a la superficie. La única esperanza radica en que recuperemos el valor de enfrentar nuestra realidad y asumamos las consecuencias.”

Finalmente, opositores activos dentro y fuera de cuba consideramos que el futuro de Cuba debe verse en Cuba y no en el exterior. Como dijera el Apóstol José Martí “nuestro vino es agrio pero es nuestro vino”. La política de fomentar la salida masiva de cubanos fue creada por los EEUU durante la guerra fría a principio de los 60’s pensando que la salida de lo mejor del país debilitaría al gobierno y que haría más fácil su derrocamiento. Esta premisa no funcionó y en lugar de debilitar al gobierno se convirtió en una válvula de escape que facilito la consolidación del gobierno y que años después se convirtió en la principal entrada económica a través de las remesas. Líderes opositores como José Daniel Ferrer, Manuel Cuesta Morua, Berta Soler, Antonio Rodiles, Eliecer Ávila, Guillermo Fariñas, etc. etc., dentro de Cuba y en el exterior, parte de una gran mayoría de líderes opositores entre los que me incluyo, creemos que la política debe ser cerrar la válvula de escape, sin negarle el derecho a los que estaban ya en tránsito bajo la protección de “pies secos/pies mojados” de entrar a este país. Una simple orden ejecutiva del nuevo presidente haría justicia a los miles de cubanos en un limbo migratorio. Esperamos que los cubanos que apoyaron al nuevo presidente tengan suficiente influencia para lograr esta simple orden ejecutiva. En este empeño tendrán todo el apoyo de America 2.1.

 

2- Mientras tanto, para el New York Times, sería una tontería que la nueva administración Trump eliminara las decisiones del anterior gobierno, que han generado progresos en la relación.

El problema es que el otro actor fundamental, el gobierno cubano, no ha dado muestra alguna de entender que así como Obama se comprometió en muchas aperturas y avances, la dictadura debería poner de lo suyo, sobre todo cuando el propio gobierno está alertando ante una situación económica que se torna cada día más crítica. Por el contrario, el gobierno ha sustituido al fallecido ministro del interior Carlos Fernández Godín, por el vicealmirante Julio César Gandarilla, que se estrenó de forma muy negativa, aumentando la represión hacia la disidencia. En nota de Mario J. Pentón, en El Nuevo Herald, pudimos leer que: “Con el fallecido la represión era bastante grande, aunque hay que decir que en Cuba un ministro no puede hacer nada sin que Raúl Castro se lo autorice. La política “de caos” que llevaba Gondín va continuar con Gandarilla. Tendremos más represión a medida que el descontento se incremente”, dice desde Santiago de Cuba José Daniel Ferrer, líder de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu).”

Lo que hay que pensar hoy es en cómo ayudar a los miles de ciudadanos que están en alguna parte del mundo, sorprendidos por la medida, y crecientemente angustiados.

Sobre qué hará la nueva administración, es muy temprano para poder hacer conjeturas. De hecho, los cargos fundamentales en materia de relaciones exteriores que pueden afectar a América Latina, para el pasado viernes 23 estaban vacantes; veamos:

 

* Subsecretario de Estado (Assistant Secretary of State) para el Hemisferio Occidental:vacante

     * Subsecretario de Estado (Assistant Secretary of State) para Asuntos Antinarcóticos Internacionales: vacante

     * Subsecretario de Estado (Deputy Secretary of State): no hay ni siquiera nominado

     * Director para el Hemisferio Occidental en el Consejo de Seguridad Nacional: vacante

     * Subsecretario adjunto (Deputy Assistant Secretary) de Defensa el Hemisferio Occidental: vacante.

     * Subsecretario adjunto (Deputy Assistant Secretary) de Defensa para Antinarcóticos:vacante.

     * Gerente de Usaid: vacante

     * Zar Antidrogas: vacante

     * El Comando Sur: no cambia

Su discurso del pasado viernes 20 no dijo nada nuevo, nada que no hubiera sido dicho en la campaña. ¿Cuál será la actitud frente a la dictadura cubana? Más pronto que tarde lo sabremos. Mientras tanto, el mundo ha sido testigo de una serie de jornadas de protesta –en el país y en el exterior- no vistas jamás en el día 1 de una nueva administración; las mismas han logrado poner al nuevo presidente a la defensiva, y su reacción ha sido destemplada y grosera. Y es que en su discurso inaugural, en lugar de buscar restañar heridas de la campaña, y procurar la unidad nacional, volvió a la narrativa divisionista que lo ha caracterizado. Mala señal, que se une a una información de última hora, muy lamentable:

«El enlace que permitía el acceso a la página web de la Casa Blanca en español ha sido eliminado por completo igual que otras secciones que estuvieron en funcionamiento durante los mandatos de Barack Obama. Temas prioritarios para el predecesor de Trump como el cambio climático, los derechos civiles o la educación han desaparecido de la web actual.»  En un desprecio absoluto a la cultura latinoamericana y a la inteligencia, se elimina el español como lengua expresiva de la nueva administración.

Marcelino Miyares, Miami. 23 de enero de 2017.

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