Logros, fallas y perspectivas de la lucha por la democracia en Nicaragua: la visión socialcristiana
El 19 de abril de 2018 grupos de estudiantes y jóvenes se lanzaron a las calles para protestar por los atropellos sufridos por ancianos de Managua y León, que reclamaban por reformas a la seguridad social que les afectaban sus condiciones de vida, protestas que no fueron convocadas por ningún grupo político o de otro tipo, tomando la forma de grupos estudiantiles auto-convocados. Sumado a ello, las protestas campesinas desde 2013 contra el canal interoceánico, y las protestas estudiantiles por la negligencia gubernamental frente a graves incendios de reservas biológicas, provocaron el rechazo del pueblo en general, ya cansado y hastiado de 11 años de corrupción, arbitrariedad y abandono por parte del régimen Ortega-Murillo de las necesidades de un pueblo sumido en la pobreza.
Como reacción inmediata a la protesta generalizada que dio inicio a una revolución pacífica y democrática encabezada por los estudiantes, el gobierno desató como nunca antes en nuestra historia republicana una represión sangrienta en contra de los jóvenes y pueblo en general que protestaban cívicamente con barricadas, marchas multitudinarias, usando piedras, tiradoras y tubos caseros de morteros; la represión del gobierno se inició mediante el uso de turbas, miembros de la juventud sandinista, policías, paramilitares, francotiradores y posteriormente usando desalmados mercenarios cubanos.
Esos ataques del gobierno han causado más de 580 muertos, miles de heridos y centenares de detenidos, así como muchos desaparecidos y miles de exiliados. El país se ha venido paralizando debido a la represión generalizada, afectando el ambiente para el desenvolvimiento de la economía, que va en picada y llena de incertidumbre, las actividades empresariales, el empleo y el turismo, así como la gobernabilidad del régimen que, a estas alturas, es incapaz de dirigir el país tanto política como institucionalmente, fallando en garantizar el ambiente necesario para el normal desarrollo del proceso productivo, las libertades públicas y los servicios públicos a los ciudadanos.
Esta lucha generó una reacción de denuncia tanto al interior del país como en el exterior, que ha llevado al régimen de Daniel Ortega a ser catalogado por los organismos internacionales, no solo de derechos humanos, sino también políticos, al igual que gobiernos democráticos, como violador masivo de los derechos humanos de los nicaragüenses, y autor de crímenes de lesa humanidad.
A un año de iniciados estos acontecimientos, es importante analizar la situación nacional e internacional en relación a esta etapa de lucha por la democracia en Nicaragua, y plantearse cuáles han sido los logros y las fallas de esta lucha, y cuáles son las perspectivas.
LOGROS:
1.- Se ha mostrado al mundo la verdadera naturaleza del régimen Ortega-Murillo, que a la fecha se había presentado como socialista, solidario y cristiano, usando para ello el manejo de un bajo perfil mediante un pacto con la gran empresa privada, grupos de fracciones políticas y el control progresivo de los diferentes poderes institucionales del Estado. La represión sangrienta desatada, que era inimaginable para el país, mostró las flagrantes violaciones de los derechos humanos del régimen sobre indefensos nicaragüenses, con numerosos crímenes de lesa humanidad.
2.- Se ha llevado al gobierno a un profundo nivel de ingobernabilidad al desarrollarse un amplio rechazo al régimen y al pretendido liderazgo de la pareja gobernante, siendo obvia la decidida actitud de rechazo de los grandes sectores de la población nicaragüense y de la comunidad internacional que exigen el adelanto de las elecciones, pues ya es inaceptable seguir bajo el dominio del actual régimen. Desde esta perspectiva, es en base al acortamiento del periodo del actual régimen y al adelanto de las elecciones lo que permitirá la llegada de un nuevo gobierno legítimamente democrático.
3.- Se ha conformado un amplio movimiento cívico que ha logrado convertirse en una verdadera arma, un medio de lucha con la mayor capacidad alcanzada por un movimiento ciudadano en la historia de Nicaragua, y que puede ser la demostración de que es posible derrocar a una dictadura mediante la acción de las fuerzas pacíficas del país. Partes de este logro, son:
- a) La formación y funcionamiento de la Alianza Cívica, que superando fallas, debilidades y contratiempos, ha logrado mantenerse de manera independiente, y ha obligado al gobierno a sentarse a la mesa del diálogo.
- b) La formación de la Unidad Nacional Azul y Blanco, UNAB, que trata de funcionar como núcleo de organización y orientación de la lucha cívica.
- c) La aparición y desarrollo del movimiento auto-convocado integrado por distintos grupos, que han venido alcanzando algunos niveles de coordinación a nivel nacional
- d) El papel activo y combativo de los organismos nacionales de defensa de los derechos humanos, que ha sido tan eficiente que ha provocado las represalias del régimen obligando a varios de sus dirigentes a salir al exilio. El trabajo de estos organismos de derechos humanos nacionales ha sido la base para que organismos internacionales, como la CIDH con sus organismos MESENI y GIEI, Americas Watch, la ONU y otros, hayan logrado un nivel de información y denuncia internacional extraordinario. También han contribuido considerablemente las informaciones de la ciudadanía nicaragüense mediante el uso de fotos, vídeos, el internet y las redes sociales.
- e) Las dimensiones alcanzadas por el movimiento de salida al exilio debido a la represión, produciendo más de 80.000 refugiados, radicados mayormente en Costa Rica, que son fuerza viva en esta lucha por la democracia.
- f) El papel de la empresa privada y su organismo principal el COSEP, que se ha venido retirando de la influencia del régimen y se ha mantenido como parte de la Alianza Cívica, reconociendo además el sacrificio y el aporte de la lucha de los auto-convocados.
- g) El ya mencionado papel de los organismos internacionales de derechos humanos: CIDH, Amnistía Internacional, Human Rights Watch, el organismo del Alto Comisionado de derechos humanos de la ONU, etc.
- h) El papel del organismo continental, la Organización de Estados Americanos (OEA), que ha pasado de una actitud ambivalente inicial a una posición de claro compromiso con la lucha por la democracia en Nicaragua, estando a punto de aplicar la Carta Democrática al régimen Ortega-Murillo; se ha logrado generar toda una actitud de rechazo contra del régimen, y por primera vez se ha logrado quitarle apoyo externo y aislarlo.
- i) Igualmente hay que señalar el papel de los organismos del continente europeo: La Unión Europea, UE, el Parlamento Europeo, y gobiernos europeos en su nivel particular.
- j) El papel de los países de la región: el Grupo de Lima, los presidentes de Centroamérica, la política firme de los Estados Unidos, del Canadá y las democracias sudamericanas, y aun la actitud de reserva respecto al régimen orteguista por parte del nuevo gobierno mexicano.
- k) Y finalmente hay que señalar el formidable apoyo de la diáspora histórica nicaragüense, que hasta antes de abril del 2018, apenas lograba ser movilizada en protestas en contra del régimen orteguista; a partir de esa fecha, se dio un salto cualitativo extraordinario en toda la diáspora a nivel mundial, encabezada por grandes sectores de estudiantes y jóvenes auto-convocados que han realizado y lo siguen haciendo, un movimiento de apoyo a la lucha por la democracia en Nicaragua.
FALLAS:
También es importante mencionar algunas fallas, vacíos o falencias involuntarias que se han dado en esta lucha, como:
1) Excesiva espontaneidad en momentos dados del movimiento cívico de protesta que dificulta en parte la coordinación, la creación de un liderazgo efectivo, y produce un cierto riesgo de anarquía.
2) Ciertas equivocaciones en la estrategia y tácticas de las protestas, que se han venido corrigiendo, buscando siempre el resguardo de la seguridad y la vida de los ciudadanos.
3) Fallas determinantes o no, para el funcionamiento óptimo de la Alianza Cívica, y también de la UNAB.
4) Lentitud en la actuación de la OEA, la UE y otros organismos internacionales, en parte por sus procesos administrativos y en parte por el carácter diplomático de sus gestiones.
5) Lentitud en la actuación de los países estratégicos como Estados Unidos, y la aprobación y aplicación de leyes punitivas a los corruptos y violadores de derechos humanos, Nica Act, Ley Magnitsky, etc.
6) Fallas involuntarias que inciden en la insuficiencia de la lucha cívica para acelerar la derrota del régimen, especialmente por falta de una mejor planificación y organización. Se plantea constantemente la necesidad de una huelga general nacional, que sería un arma contundente en contra del régimen, pero no se toma en cuenta el gran trabajo para organizarla. Es notoria la falta de planificación y dirección existente en la lucha cívica que debido a la represión del régimen, ha bajado en su intensidad en los últimos meses.
PERSPECTIVAS:
Las perspectivas de la lucha en Nicaragua están entrelazadas con: a) la problemática venezolana, b) el perfil del régimen orteguista que continúa siendo de sangriento represor, c) el aumento de la presión internacional y sus sanciones, d) los resultados del diálogo nacional, y e) una verdadera planificación de la lucha que tome en cuenta todas las fuerzas y factores señalados anteriormente.
- a) La solución del caso venezolano y la incapacidad del régimen madurista de continuar apoyando al orteguismo, es un factor independiente de nosotros, que lo único que podemos hacer es aumentar nuestro apoyo a la lucha de los hermanos venezolanos. Venezuela cuenta con una oposición que controla el poder legislativo, una poderosa y legítima base para su lucha.
- b) El régimen orteguista continúa siendo un régimen sangriento y represivo a como lo ha demostrado con la represión realizada en las marchas de conmemoración del primer año de lucha, y que lo continúa presentando en el ámbito internacional como un régimen que no tiene ni presente ni futuro para los nicaragüenses. En este sentido no hay vuelta de hoja, y la única pregunta es: ¿cuándo?. Los organismos nacionales e internacionales deben seguir insistiendo en el adelanto de las elecciones acompañada por un resurgir de las movilizaciones cívicas para obligar al gobierno a abrirse en favor de la democracia para el país.
- c) La presión y sanciones de la comunidad internacional deben aumentar para obligar al régimen Ortega-Murillo a una apertura democrática que traiga la paz y la estabilidad a Nicaragua.
- d) El diálogo nacional debe desembocar a la brevedad posible en resultados positivos para la democratización de Nicaragua, la Alianza Cívica debe seguir actuando con alto sentido de presión y responsabilidad para lograr acuerdos sustanciales, y darle un plazo al gobierno antes de dar por agotado este instrumento de búsqueda de una solución política y pacífica de la crisis. En el contexto del diálogo es vital lograr el anuncio de elecciones libres adelantadas, previo reformas profundas y cambio de autoridades electorales, fijando una fecha concreta para dicho proceso que podría ser entre octubre de 2019 y marzo de 2020 a más tardar.
- e) Todo lo anterior depende de lograr una verdadera planificación con metas a corto, mediano y largo plazo. Papel importante debe ser el generar un grupo dirigencial pluralista y democrático que obtenga confiabilidad y responda positivamente a la pregunta, ¿y después de Ortega, qué?. El pueblo de Nicaragua ansía una democracia representativa y participativa, pero aún no se perfila con claridad el proyecto democrático concreto. En este sentido juega un papel importante el desarrollo de un centro democrático muy ponderado y que muestre capacidad de análisis, de conducción y de impulso programático para la democracia, que ya los socialcristianos veníamos mencionando.
Los socialcristianos como parte y expresión de los nicaragüenses democráticos, continuaremos luchando cívicamente al lado del pueblo de Nicaragua, y sus aspiraciones de paz, libertad, justicia y democracia para nuestra sufrida Patria.
Managua, Nicaragua 23 de abril de 2019.
COMISIÓN COORDINADORA DE VOLUNTAD HUMANISTA SOCIAL CRISTIANA, VHSC.
José Dávila, Rafael Thumas, Esmeralda Sánchez, Edgard Macías, Carlos Jarquín, Sergio Oconnor, Francisco Campos, Francisco Oporta, Norman López Bermúdez, Humberto Rocha, Danny Duarte.