Bachelet viajará a Venezuela en la fecha favorita de Nicolás Maduro
Las organizaciones civiles venezolanas recomendaron al equipo de avanzada que envió la Oficina de la Alta Comisionada para los DD.HH. a su país, que la visita de la ex Presidenta ocurriera después de que presentara en Ginebra el informe ordenado por el Consejo de Derechos Humanos. El texto debe ser expuesto durante el 41° período de sesiones del organismo, que empieza el 24 de junio. Sin embargo, el gobierno de Maduro insistió en que fuera antes, como en efecto va a ocurrir: la ONU confirmó que el viaje será del 19 al 21 de junio.
Que la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, visitaría Venezuela, ya era un hecho. Lo que aún faltaba por confirmar era la fecha de ese viaje. Ayer la ONU informó que Bachelet estará en ese país del 19 al 21 de junio, tras una invitación del gobierno de Nicolás Maduro.
Son tres días que, para las organizaciones defensoras de Derechos Humanos, son insuficientes y, además, la fecha del viaje se adapta a los requerimientos hechos por el régimen.
«Después de la visita de la misión técnica que estuvo en Venezuela en marzo, se esperaba que ellos recomendaran que sí se hiciera la visita de la Alta Comisionada. Lo que no estaba muy seguro era la fecha, aunque el gobierno de Venezuela insistió en que fuera antes de la presentación del Informe, como en efecto será”, explica la investigadora del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello, Ligia Bolívar. Esto, en relación al texto que la Mandataria tiene que dar a conocer en Ginebra, después del 24 de junio.
Bachelet confirmó su ida al país petrolero a principios de abril, aunque sin precisar día. En una conferencia de prensa realizada durante su visita oficial a México dijo que estaban revisando cuál era la mejor fecha para ir, que sería en un plazo «relativamente corto» y agregó: «Yo creo que hay personas que creen que la oficina de Derechos Humanos es de asistencia humanitaria. Nosotros no somos quienes podemos proveer alimentos, medicamentos. Digo esto porque a veces uno lee algunas declaraciones y pareciera que nosotros vamos a resolver eso. Tampoco somos la oficina que va a resolver la crisis política».
La propuesta inicial que se le hizo a la comisión que vino a Venezuela era que la señora Bachelet viniera después de que ellos presentaran el informe preliminar sobre su viaje. No sé por qué razón esto no será así. Quisiera pensar que el informe es tan rudo y fuerte que ella prefirió venir antes porque después no la iban a dejar entrar”, subraya el coordinador general de la ONG Una Ventana a la Libertad, Carlos Nieto Palma.
La Oficina que dirige Bachelet tiene un carácter eminentemente técnico. Sobre las razones de las organizaciones civiles para solicitar que la visita ocurriera después del 41° período de sesiones del Consejo de Derechos Humanos, a realizarse del 24 junio al 12 julio de 2019, el coordinador general de la ONG Una Ventana a la Libertad, Carlos Nieto Palma, explica: «La sugerencia de que viniera después de presentar el informe es porque nos daba la oportunidad de ver realmente lo que iba a decir y si estaba acorde con la gravedad de la situación que se vive en Venezuela». En consecuencia, con base en el informe, las distintas organizaciones esperaban tener luces del tono que tendría este viaje.
“Insisto, la propuesta inicial que se le hizo a la comisión que vino a Venezuela era que la señora Bachelet viniera después de que ellos presentaran el informe preliminar sobre su viaje. No sé por qué razón esto no será así. Quisiera pensar que el informe es tan rudo y fuerte que ella prefirió venir antes porque después no la iban a dejar entrar”, aventura Nieto Palma, quien, sin embargo, no deja de advertir la cercanía que la ex Mandataria tuvo con Hugo Chávez y Nicolás Maduro. “Ese es un punto el que no podemos desprendernos, ni olvidarnos”, dijo.
El permiso de Nicolás Maduro
Antes de que Michelle Bachelet asumiera como Alta Comisionada para los DD.HH. al menos 11 relatores solicitaron constatar la situación de los derechos humanos en Venezuela y no se les permitió el ingreso. De hecho, cuando el cargo de Alto Comisionado lo ocupaba Zeid Ra’ad al Hussein, los informes que elaboró sobre Venezuela tuvo que hacerlos a distancia.
En el caso de la ex Presidenta existe una resolución del Consejo de Derechos Humanos de la ONU del 26 de septiembre de 2018, cuando por primera vez se pronunciaron sobre Venezuela, que solicita a la Alta Comisionada que prepare un informe exhaustivo por escrito sobre la situación de los derechos humanos en ese país.
“Cuando quiera ir a Venezuela, siempre es bienvenida”, afirmó Nicolás Maduro a los medios presentes en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), realizada en septiembre de 2018.
Lo que no estaba muy seguro era la fecha, aunque el gobierno de Venezuela insistió en que fuera antes de la presentación del Informe, como en efecto va a ser”, explica la investigadora del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello, Ligia Bolívar.
Además, distintos voceros de la oposición, como Lilian Tintori -activista y esposa del líder político Leopoldo López- solicitaron reiteradamente la presencia de la Alta Comisionada. Finalmente, se acordó tras la invitación del Gobierno de Maduro, oficializada en noviembre de 2018, que primero iría un equipo de avanzada para diagnosticar si estaban dadas las condiciones para que fuese la propia Bachelet. El grupo estuvo en el país petrolero durante diez días y, además de Caracas, fueron a otras ciudades como Barquisimeto (estado Lara), Valencia (estado Carabobo) y Puerto Ordaz (estado Bolívar). Durante de esa visita, Bachelet endureció el tono sobre la situación en Venezuela y denunció “numerosas violaciones y abusos de derechos humanos perpetrados por las fuerzas de seguridad y los colectivos armados pro gubernamentales”, en el informe oral emitido en el 40º período de sesiones del Consejo.
La última presencia comparable a la de Bachelet de un organismo internacional en Venezuela fue en el año 2002, cuando César Gaviria estuvo en esa nación siendo Secretario General de la Organización de Estados Americanos, opinó en su Twitter Rafael Uzcátegui, coordinador general de la ONG Provea.
“Me parece que es una visita muy corta, por lo tanto, muy probablemente va a ser solamente centrada en Caracas, lo cual me parece lamentable. No es lo mismo la situación de DD.HH. en Caracas, que en el resto del país, donde hay un cuadro mucho más dramático en lo que tiene que ver con servicios públicos, con represión por parte de determinados órganos de seguridad del Estado, la misma situación penitenciaria en retenes policiales. Entonces, bienvenida la visita, pero creo que es lamentable que se centre en Caracas y que sea por tan poco tiempo”, observa Bolívar del Centro de DD.HH. de la UCAB.
En la nota de prensa difundida por la ONU, se especifica que Bachelet se reunirá con el «Presidente Nicolás Maduro Moros», con ministros, así como con el presidente del Tribunal Supremo de Justicia, con el Fiscal General de la República y con el Defensor del Pueblo. También dialogará con Juan Guaidó, de quien se refieren como Presidente de la Asamblea Nacional -la ONU no lo ha reconocido como Presidente encargado- y con otros diputados, así como con el Presidente de la Asamblea Constituyente, con representantes de la sociedad civil, delegados de los sindicatos, líderes religiosos y autoridades universitarias.
Hasta el momento de elaborar este reportaje, aún no se había definido la agenda de reuniones con las ONG.
“He escuchado opiniones según las cuales no debería reunirse con la Asamblea Nacional Constituyente porque eso sería legitimar un órgano ilegal e inconstitucional, pero si a eso vamos tampoco debería reunirse con Maduro, el Tribunal Supremo o la Defensoría del Pueblo porque todos ellos tienen una base inconstitucional en este momento. Es importante tomar en cuenta que en el pasado altos funcionarios de órganos de DD.HH. de Naciones Unidas y del Sistema Interamericano han realizado visitas a países bajo dictaduras, eso no significa que están legitimando un gobierno inconstitucional, dictatorial, tiránico, simplemente están cumpliendo con su trabajo de vigilar sobre el terreno la situación de los derechos humanos”, señaló Bolívar.
Ayer, el régimen de Maduro informó que durante la visita, la Alta Comisionada «podrá constatar los amplios e históricos esfuerzos» del gobierno «para promover y garantizar los derechos humanos del pueblo venezolano, así como las repercusiones negativas» de las medidas económicas y diplomática de la comunidad internacional». Agregan que Bachelet podrá ver los «logros de la Revolución Bolivariana».
“Esperamos que no se vaya con las manos vacías y que el gobierno le dé alguna respuesta a las graves violaciones de DD.HH.”
Ali Daniels, director de Acceso a la Justicia, subraya: “Hay que recalcar que el mandato de la Alta Comisionada es un mandato de protección de DD.HH. no es mandato de reconocer o dar legitimidad a gobiernos. Lo digo porque seguramente ese será el sesgo que el Gobierno va a querer darle a la visita, pretender que esa visita sea un reconocimiento al gobierno de Maduro y un desconocimiento de otro gobierno como el de Guaidó. Nosotros confiamos en su carácter técnico”.
Confían, afirma Palma, en que no se convierta en un “show político de la dictadura para limpiarse el rostro”. Durante la visita del equipo de avanzada, eran recurrentes las denuncias de que el gobierno pintó los hospitales que visitarían para “maquillar” la crisis y los surtió con algunas medicinas e insumos. No dudan que en esta oportunidad ocurra lo mismo.
Tres días para ver la profundidad de la crisis en un país como Venezuela es insuficiente, pero dado que ha habido un trabajo previo, ella lo que tiene que hacer es confirmar lo que su equipo haya descubierto y, además, tiene que exigir al gobierno acciones concretas», dice Ali Daniels, director de la ONG Acceso a la Justicia.
“Confiamos en el equipo técnico que la acompaña, que ha hecho un excelente papel, y son quienes han levantado la información que le ha permitido a ella conocer la realidad venezolana y denunciar las gravísimas violaciones de derechos humanos que el gobierno de Maduro está cometiendo. Esta visita va a servir para afianzar ese conocimiento y exigir al gobierno de Maduro que tome las rectificaciones correspondientes”, subraya Daniels, para quien también tres días son insuficientes, pero confía en que lo que Bachelet hará será un cierre del trabajo iniciado por su equipo.
“Tres días para ver la profundidad de la crisis en un país como Venezuela es insuficiente, pero dado que ha habido un trabajo previo, ella lo que tiene que hacer es confirmar lo que su equipo haya descubierto y, además, tiene que exigir al gobierno acciones concretas. Esperamos que no se vaya con las manos vacías y que el gobierno le dé alguna respuesta a las graves violaciones de DD.HH. que ha estado cometiendo y que está en la obligación de evitar que continúen. La misión fundamental de ella es obtener del gobierno respuestas”, dice.