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Cole Porter (1891-1964): Un peruano gringo

¿Cuántos Perú hay en los Estados Unidos? ¿Pregunta extraña, o capciosa? No, porque nuestro invitado de hoy, Cole Porter, nació en Peru, Indiana, un 9 de junio de 1891 (en total, son trece ciudades gringas que se llaman Peru, muy bien repartidas: además de la citada en Indiana, hay en Nueva York, Nebraska, Illinois, Carolina del Norte, Kansas, Massachussetts, West Virginia, Pennsylvania, Vermont, Maine, Ohio y Iowa). La que tiene a Porter como hijo predilecto es la más populosa de todas; hoy tiene más de cien mil habitantes.

Nos quedaríamos muuuy cortos si añadiéramos simplemente que fue un gran compositor. Cole Porter fue Cole Porter, un compositor tan original que sus canciones conforman un género en sí mismo. En ellas, son reconocibles tanto la música como las letras; esta últimas eran ingeniosas, chispeantes, ocurrentes, y expresaban frecuentemente similitudes, contrastes, y opuestos, con combinaciones fonéticas originalísimas («You do that voo doo that you do so well» -en «You Do Something To Me»-). Y su música, vivaz y animada les quedaba como anillo al dedo. Por ejemplo, «Let’s do it, let’s fall in love» (Hagámoslo, enamorémonos) nos recuerda los hábitos amatorios de los pájaros, las flores, los crustáceos, peces, insectos y varios tipos de seres humanos… Veamos la versión con Alanis Morissette, del filme «De-Lovely» (2004), biografía de Porter con Kevin Kline en el papel del cantautor.

 

 

 

Mientras, «You’re the top» -nos recuerda un crítico del New York Times- es un ejercicio en la creación de superlativos que incluía frases como «el ligero deslizar de los pies de Fred Astaire», «El Coliseo», «el salario de Greta Garbo», «el queso Camembert», «Mona Lisa», «La Torre de Pisa'» y «el Museo del Louvre». Veamos una simpática versión del filme «Evil Under the Sun» (Guy Hamilton, 1981), adaptación de la novela de Agatha Christie, con Peter Ustinov como Hercule Poirot. La interpretan dos «Dames» del teatro y cine británicos: Dame Maggie Smith, y la recientemente fallecida, Dame Diana Rigg (en la escena aparecen también James Mason y Roddy McDowall):

 

 

 

Es un hecho que sus canciones, la «brillante opulencia» de tantas melodías que escribiera para Broadway y Hollywood, eran un reflejo de su estilo de vida. Se cuenta que en una ocasión, en Francia, contrató al Ballet de Montecarlo completo para entretener a sus invitados. Él le dio un significado propio a las palabras excentricidad y glamour; pero era tal la calidad de su obra, que todo se le aceptaba, incluso su matrimonio con la millonaria norteamericana, diez años mayor que él, Linda Lee (Porter nunca ocultó su homosexualidad). Y a pesar de todas las fiestas y desvelos, a la hora de laborar, la seriedad en su trabajo y su creatividad ocupaban lugar preferente.

Un grupo actual, «Avalon Jazz Band«, interpreta una canción que expresa el gran amor de Porter por París. Esta versión tiene más de siete millones de visitas en YouTube:

 

 

 

La lista de éxitos inolvidables es larga, algunos ejemplos: «Anything Goes«, «Begin The Beguine«, «Night and Day«, «I Love Paris», «My Heart Belongs to Daddy», «Easy To Love», «It’s All Right With Me», «I’ve Got You Under My Skin«, «Just One Of Those Things», «Let’s Do It (Let’s Fall In Love)», «Cheek to Cheek», «Love For Sale», «You Do Something To Me», «I Get a Kick Out of You», “In the Still of the Night”, «What Is This Thing Called Love», «Friendship«, «You’re the top«, «True Love«, o «You’d Be So Nice To Come Home To».

Son canciones inmensamente populares incluso hoy, sin diferencias de edad, nacionalidad o sexo. Oigamos a Frank Sinatra con «I’ve got you under my skin» (Cole Porter la escribió para la película «Born To Dance» – Nacido para bailar-, protagonizada por Eleanor Powell, Frances Langford y James Stewart). Como reconoce Sinatra, el arreglo orquestal es de Nelson Riddle:

 

 

 

Tuvo el privilegio de gozar, en vida, de la admiración de sus pares (algunos, como George Gershwin, Richard Rodgers o Irving Berlin, tan geniales como él); para Richard Rodgers «pocos se dan cuenta cuán arquitectónicamente excelente es su música. Hay una fundación, una estructura y una sección ornamental. Luego le añades emoción, y el resultado es Cole Porter«. 

 

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Nacido en familia con mucho dinero, se le pronosticaba una carrera como abogado (incluso llegó a estudiar en Harvard, pero el propio decano de derecho le aconsejó que se cambiara a la facultad de música). La realidad es que a los 6 años ya tocaba el violín, y el piano a los 8. Y la música y el éxito lo esperaban.

Luego de décadas de una vida llena de comodidades y éxito, en 1937 la tragedia se hizo presente: sufrió una grave caída montando a caballo, con rotura de ambas piernas y otras secuelas muy dolorosas. Buscando alivio, a lo largo de 20 años fue sometido a 30 operaciones, pero no evitó que su pierna derecha fuera amputada en 1958. A partir de ese momento se convirtió en un recluso en silla de ruedas.

En 1946 Warner Bros. llevó al cine su biografía, con Cary Grant como Porter y Alexis Smith como Linda Lee, bajo la dirección de Michael Curtiz.¿Título del filme? «Night and Day».

 

 

 

Innumerables fueron sus éxitos en Broadway (entre paréntesis, las canciones más populares de cada show), como “Fifty Million Frenchmen” en 1929 (“You Do Something To Me”) ; “Wake Up and Dream,” también en 1929 (“What Is This Thing Called Love”); “The New Yorkers” en 1930 (“Love for Sale”); “Gay Divorcee” en 1932, con Fred Astaire (“Night and Day”); “Anything Goes” con Ethel Merman, Victor Moore y William Gaxton en 1934 (“You’re the Top,” “I Get a Kick Out of You”); “Jubilee” en 1935 (“Begin the Beguine,” “Just One of Those Things”) ; “Red, Hot and Blue” con Ethel Merman, Jimmy Durante y Bob Hope en 1936 (“It’s De­lovely,”), «Leave it to Me!», 1938 («My Heart Belongs to Daddy»).

Esta es una de mis versiones favoritas de «Begin the Beguine», con Fred Astaire y Eleanor Powell ofreciendo una de las mejores piezas de tap en la historia del cine (del filme «Broadway Melody», 1940):

 

 

 

 

Luego de la Segunda Guerra Mundial tuvo un par de fracasos, pero en 1948 dio en el clavo con el mayor éxito comercial y artístico de todos: «Kiss Me Kate«, una adaptación musical de «La fierecilla domada», de William Shakespeare, que ganaría el premio Tony. Algunas de sus mejores melodías surgieron aquí, como «From This Moment On», “Too Darn Hot,” “Always True to You in My Fashion” y “So in Love». La crítica fue unánime: Porter y Shakespeare eran una pareja ideal.  La película (George Sidney, 1953, protagonizada por Kathryn Grayson, Howard Keel y Ann Miller) fue también un gran triunfo. Oigamos «So In Love», con Grayson y Keel.

 

 

Entre las melodías que compuso para cine destacan:“I’ve Got You Under My Skin” y “Easy to Love” para “Born to Dance” en 1936; “Rosalie”, “In the Still of the Night” para “Rosalie” en 1937; “I Concentrate on You” para “Broadway Melody” en 1940, y “You’d Be So Nice to Come Home To” para “Something to Shout About” en 1943.

Mención aparte merece el filme «High Society» (Alta Sociedad, Charles Walters, 1956), remake musical de la comedia «Philadelphia Story» (George Cukor, 1940, con Katharine Hepburn y James Stewart), y que reunió nada menos que a Frank Sinatra, Bing Crosby y Louis Armstrong para darle una despedida triunfal del cine a la chica protagonista, Grace Kelly. La interpretación de Kelly y Crosby de «True Love» (lo hemos señalado en notas anteriores), de Cole Porter, fue todo un triunfo, ganando varios discos de oro, y  nominación al Oscar como mejor canción.

Crosby y Kelly tenían una química que venía de haber sido marido y mujer en el drama «The Country Girl» (George Seaton, 1954), ganador del Oscar a Mejor Guion, y que le brindara asimismo a Kelly el Oscar a Mejor Actriz.

Para ver hacer clic en «Watch on YouTube»:

 

 

 

La esposa de Porter falleció en 1954. Durante el resto de su vida vivió en una suite de nueve habitaciones en las Waldorf Towers. Los fines de semana lo llevaban a una granja con 350 acres en los Berkshires, y los veranos los pasaba en California.

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Al oír su obra, la innumerable calidad y extensión de la misma, da la impresión de que un compositor de música popular de hoy, cualquiera, individual -o en grupo- necesitaría vivir cien intensos años de trabajo para como mucho acercarse algo al grado de creatividad y de producción de grandes éxitos que el peruano de Indiana logró.

¿Alguien habrá hecho el esfuerzo de contar en cuántos filmes aparecen canciones de Porter? Uno de los más recordables ha sido el homenaje de Steven Spielberg, al iniciar la segunda película de la saga Indiana Jones («Indiana Jones y el Templo de la Perdición», 1984), con «Anything Goes«, interpretada por Kate Capshaw –actual esposa de Spielberg-; el director aprovecha para recordar a los musicales de los treinta.

 

 

Asimismo, «My Heart Belongs to Daddy», con Marilyn Monroe, no tiene par (de la comedia romántica «Let’s Make Love», 1960, dirigida por George Cukor, y junto a la rubia, Yves Montand y Tony Randall).

 

 

Porter falleció en Santa Monica, California, de una falla renal, el 15 de octubre de 1964.

Solo nos queda, finalmente, mostrar versiones de otras de sus canciones:

Fred Astaire cantando (y bailando con Ginger Rogers en «Top Hat») «Cheek to Cheek»:

 

 

Doris Day, cantando «You Do Something To Me»:

 

 

Ella Fitzgerald y «Love for Sale»:

 

 

Ethel Merman, en el filme «Anything Goes» (1936), interpreta «I Get a Kick Out of You», en el papel que ya había hecho en Broadway. Ella se la canta a su amor, Bing Crosby, quien obviamente está más interesado en Ida Lupino…

 

 

 

Uno de mis discos favoritos de Charlie Parker es dedicado a las canciones de Cole Porter. Oigamos a «Bird» en «Easy To Love»:

 

 

 

 

 

2 comentarios

  1. El mejor trabajo de orquestación que ha podido esperarse de maese Villasmil. Un regalo para sentirse bien y afortunado de compartir sala con Porter y el autor.
    Gracias mil, Mylord.

    1. Un millón de gracias, cher Iván…Vos sabeis que estas cosas las hago pensando en hermanos como vos…

      Con el más fuerte de los abrazos!!!

      M

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