Kaja Kallas, de centro derecha, encabezará el nuevo gobierno de Estonia en coalición con el centro izquierda
Será la primera mujer al frente del gobierno: europeísta, volcada en la modernización tecnológica y reformista de derecha moderada
La hasta ahora líder de la oposición al frente del liberal Partido Reformista, Kaja Kallas, encabezará el nuevo gobierno estonio en coalición con el Partido de Centro Izquierda, según ambas formaciones han confirmado en un comunicado. Los dos partidos más grandes de Estonia formarán una gran coalición encabezada por esta mujer de 43 años, europeísta, volcada en la modernización tecnológica y reformista de derecha moderada.
El gobierno de la anterior coalición tripartita, en la que participaba el Partido del Centro pero no el Partido Reforma, dimitió el 13 de enero por acusaciones de corrupción. La presidenta Kersti Kaljulaid encargó a Kallas la formación de un gobierno, ya que su partido, defensor de los intereses de las empresas, había recibido la mayor cantidad de votos en las elecciones parlamentarias de marzo de 2019. Kallas, abogada y exdiputada del Parlamento Europeo, garantiza así la investidura en el Parlamento estonio, el Riigikogu. «Estamos en medio de una crisis del coronavirus y necesitamos actuar con rapidez con el fin de salvaguardar la vida y la salud de los estonios y mantener funcionando al mismo tiempo nuestra economía», ha dicho en declaraciones a la televisión estonia, «nuestro país no se puede permitir un bloqueo político ahora mismo».
El pasado mes de noviembre, el entonces ministro del Interior, Mart Helme, del EKRE, se vio obligado a dimitir después de difundir teorías conspirativas relativas a la derrota electoral del jefe de la Casa Blanca, Donald Trump, y calificar al mandatario estadounidense electo, Joe Biden, de «corrupto». Kerst Kracht, asesora del ministro de Finanzas Martin Helme, también del EKRE, fue detenida en relación con el escándalo de Porto Franco, un caso de corrupción relacionado con el proyecto portuario residencial y comercial de lujo en la capital Estonia, Tallin. El fundador del partido de Centro, el veterano político estonio Edgar Savisaar, fue acusado en 2015 cuando era alcalde de Tallin de haber aceptado sobornos pero el proceso judicial en su contra finalmente se suspendió por razones médicas.
La Fiscalía acusa a cinco miembros del Partido de Centro, entre ellas el secretario general de la formación, Mijail Korb, de presuntos vínculos con un caso de corrupción en relación con el desarrollo de un proyecto inmobiliario en parte financiado por una entidad de crédito estatal. Los sospechosos están siendo investigados por tráfico de influencias a cambio de contribuciones a su partido por parte de Teder. Aunque no estaba personalmente implicado en estos casos de corrupción, el primer ministro Jüri Ratas presentó su dimisión el pasado 13 de enero, asumiendo la responsabilidad política de delitos perpetrados durante su mandato. «En la política se deben tomar decisiones muy difíciles para solucionar situaciones muy difíciles», argumentó Ratas para justificar el paso, consensuado previamente con el resto de la dirección de su partido. «Como presidente del Partido del Centro, puedo afirmar con absoluta sinceridad que nunca he hecho o aprobado ninguna acción que haya socavado la justicia o el sentido de la justicia. Pero obviamente, como presidente del partido también tengo que cargar con la responsabilidad en este caso para que se resuelva de una forma clara y justa», afirmó.
Grave crisis sanitaria
Su dimisión supuso la caída del tripartito en el Gobierno, en el poder desde abril de 2019, y el inicio de negociaciones para conformar una nueva coalición. El país báltico, miembro de la UE y la OTAN, supera ahora esta crisis de gobierno, en medio de una grave crisis sanitaria y con 582 casos de coronavirus por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días, lo que está causando a su vez y sus severas consecuencias económicas.
Se espera que la presidenta Kersti Kaljulaid nombre el gabinete de Kallas en los próximos días. La presidenta ha declarado que «la situación del coronavirus en Estonia y la agitación económica causada por la pandemia deben ser una prioridad inmediata para el nuevo gobierno». Kallas se convierte así en la primera mujer jefa de gobierno en la historia de la pequeña nación báltica. Estonia cuenta con 1.3 millones de habitantes desde que recuperó su independencia en medio de la caída de la Unión Soviética, en 1991. Es hija de Siim Kallas, uno de los creadores del Partido de la Reforma, ex primer ministro y ex comisionado de la Unión Europea. Ella tomó las riendas del Partido de la Reforma en 2018 como su primera mujer presidenta. Su primer gabinete incluirá mujeres en otros puestos clave también, ya que Keit Pentus-Rosimannus asume el cargo de ministra de Finanzas y la diplomática Eva-Maria Liimets será muy posiblemente en ministra de Relaciones Exteriores. Esta formación del gobierno marca el segundo intento de este tipo para Kallas en menos de dos años, tras las infructuosas negociaciones que emprendió después de las elecciones de 2019. Eso allanó el camino para que el Partido del Centro y su líder, Juri Ratas, formaran una coalición tripartita sin el Partido Reforma.