Abascal se une a Orban, Le Pen y Salvini para reclamar una «reforma profunda» de la UE
Partidos de derecha radical de una decena de países reivindican las «inviolables competencias» de los Estados miembro y aspiran a formar una nueva alianza de ‘patriotas’ en el Parlamento Europeo
Partidos de derecha radical de más de una decena de países de la Unión Europea se han unido para reivindicar las «inviolables competencias» de los Estados miembro frente a la «oligarquía» que, en su opinión, quieren imponer quienes no se esfuerzan por defender en el seno del bloque cuestiones como la familia o la «herencia judeocristiana».
Partidos como el francés Agrupacion Nacional, de Marine Le Pen, la Liga italiana, de Matteo Salvini, el húngaro Fidesz, de Viktor Orban, o el español Vox, de Santiago Abascal, han suscrito un mensaje en defensa de las «tradiciones», en el que se retrotraen a la Segunda Guerra Mundial y a la Unión Soviética para advertir del riesgo de volver al pasado y reclamar una «reforma profunda» en el seno de la Unión.
«En lugar de proteger Europa y su herencia, en lugar de permitir el libre desarrollo de las naciones europeas, (la UE) se ha convertido en una fuente de problemas, ansiedad e incertidumbre», lamentan los firmantes, entre los que también figuran el polaco Partido Ley y Justicia (PiS) de Polonia o Hermanos de Italia, encabezado por Giorgia Meloni.
Todos ellos consideran que la UE está al servicio de «fuerzas radicales» que aspiran a crear un «superestado» donde no tienen cabida las «tradiciones» ni los «principios morales», en pleno debate por iniciativas como la de Orban en Hungría, donde se ha promulgado ya una ley que limita la difusión de contenido LGTBI entre menores de edad.
Respeto a la herencia judeocristiana
Piden por ejemplo un respeto a «la herencia judeocristiana» y apuntalar la familia «como unidad básica». «En un momento en que Europa se enfrenta a una grave crisis demográfica (…), las políticas en favor de la familia deberían ser la respuesta y no la inmigración masiva», argumentan estos partidos.
También llaman a respetar las «inviolables competencias» de los Estados miembro, alertando de que cualquier intento de imponer el criterio de la UE por encima del nacional contribuye al «caos». Esta supuesta imposición, añaden, «destruye la base para el funcionamiento de la comunidad europea como comunidad de naciones libres».
Entre los mensajes se ha colado uno en favor del «consenso» como instrumento clave de trabajo para la adopción de políticas, asumiendo que en los últimos meses se han planteado alternativas que, en su opinión, restarían «influencia» a determinados gobiernos y «transformarían la Unión en una especie de oligarquía».
Una nueva alianza
El mensaje llega con el trasfondo de la polémica abierta con países como Hungría y Polonia, cuyos partidos gobernantes suscriben esta carta abierta. Ambos han sido señalados desde Bruselas por supuestas violaciones del Estado de Derecho y han marcado distancias reivindicando su derecho a adoptar las leyes que ellos consideren oportunas.
Además, coincide con los contactos para redibujar el escenario de alianzas dentro del Parlamento Europeo, acelerado tras la desvinculación de Orban del Partido Popular Europeo (PPE). El dirigente húngaro cree que la principal familia conservadora se ha alejado de valores tradicionales y se ha aliado con posiciones de izquierda, por lo que ha iniciado contactos con otros líderes como Salvini o el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki.
La carta la firman partidos que forman parte en la actualidad del Partido de los Conservadores y Reformistas Europeos -Vox, PiS o Hermanos de Italia, por ejemplo- e Identidad y Democracia -al que pertenecen la Liga o Agrupación Nacional-. Importantes formaciones ultraderechistas, como Alternativa para Alemania, no figuran en esta alianza a varias bandas.
Salvini ha enfatizado en Twitter esta coincidencia de ideas entre distintos grupos, en la que ve «otro paso para construir una alianza sólida, ampliada y alternativa a la izquierda iliberal de los impuestos, de la inmigración salvaje», a la espera de ver cómo puede reconfigurarse.
También ha incidido en este mismo enfoque Le Pen. «La unión de los patriotas europeos ha comenzado: con los partidos patriotas más influyentes del continente, ponemos la primera piedra de una gran alianza en el Parlamento Europeo», ha subrayado.