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Jaime Jankelevich: Las (in)capacidades de Boric

Las condiciones personales para ejercer el cargo son de una exigencia superior a las de un individuo cualquiera, por lo que creo que el país cometería un grave error si eligiera a Gabriel Boric Presidente.

La Presidencia de la República es el cargo de mayor responsabilidad que una persona puede llegar a asumir, pues las miles de decisiones que debe tomar en cuatro años influyen directamente en la vida de 19MM de chilenos. Es por lo que se requiere que el Presidente tenga las habilidades, el carácter, la experiencia y los conocimientos para ejercer el mandato. Pero además, dada la soledad del mando, que tenga la capacidad de administrar el poder con prudencia, sabiduría, sentido común, y decisión.

¿Reunirá Gabriel Boric esas condiciones?

En cuanto habilidades, tiene una sobresaliente, cual es el cambiar de opinión cuando lo expresado atenta contra su candidatura, intentando borrar lo dicho. No creo necesario recordar sus famosas volteretas en el aire, intentando convertir al revolucionario de octubre en un moderado arrepentido, por ejemplo, de la inestabilidad prometida por el secretario general de RD Sebastián Depolo. Pero lo que sí es necesario recordar es que tanto Boric, como su escudero Jaime Bassa, el FA y el PC están manejando la CC. Ahí se están cocinando las verdaderas intenciones de la izquierda radical, cual es refundar Chile, cambiar la institucionalidad, dejar de ser un Estado unitario, y tener una Constitución en sintonía con un gobierno identitario, que quiere terminar con el modelo que tanto nos hizo progresar. Por algo cuando el líder opositor venezolano Leopoldo López fue a la CC, lo esperaba un aviso que decía: “La agenda de la convención no es la agenda de la derecha. ¡Fuera López, aguante Maduro!”

Pero el discurso del candidato desconoce todo esto y pretende aparecer como si fuera de centro, moderado, lo que no es creíble. Y aquí lo combino con el tema de su carácter, porque al menos para sostener sus convicciones no es en algo que destaque, habiendo cambiado tantas veces de parecer sobre tantos temas, que es difícil afirmar que tiene esta aptitud para ejercer la Presidencia. Por ejemplo, él aseguró que los trabajadores seguirán siendo dueños de sus fondos de pensiones depositados en las AFP, cuando quiere terminar con éstas; pero además, el Senador Latorre, miembro de su comando, lo desmintió, refiriéndose a la propuesta de pensiones de su remozado programa, que plantea acabar con la herencia de los fondos previsionales, porque según dijo, “en seguridad social no existe propiedad privada como la entendemos hoy en el sistema de AFP”.

En cuanto a conocimientos y experiencia es donde mayor debilidad presenta. Él mismo reconoció hace pocos meses que no tenía ni los conocimientos ni la experiencia necesaria para gobernar. De hecho, no tiene ninguna en el mundo real, porque después de egresar de Derecho, sin recibirse, pasó directamente al Congreso. En economía, no tiene noción de las cifras, se enreda con los miles y millones, con los montos de inversión, y es sin duda su gran falencia.

Y en cuanto a prudencia, baste recordar que legitimó la desobediencia civil, la evasión en el metro y la violencia del 18-O, justificándola como medio para lograr objetivos políticos, como la nueva Constitución. Estuvo de acuerdo con el proyecto de indulto y también estuvo a favor de destituir al Presidente Piñera a los pocos días del 18-O junto al PC. Eso demuestra imprudencia y denota poca sabiduría, falta de coraje y decisión para rechazar la violencia cuando correspondía hacerlo y no, como lo hizo, incentivarla. Es que su coraje es el del adolescente atrevido, no el que brinda la madurez.

En resumen, me asiste el convencimiento que el candidato Boric no reúne las exigentes condiciones que debe demostrar quien pretenda gobernar el país, por lo que estimo sería un grave error elegirlo Presidente.

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