Mal empieza en Cuba la temporada alta: apenas 246.000 turistas en enero

El año 2023, que las autoridades han previsto como el definitivo en la recuperación del turismo tras la pandemia para Cuba, empieza mal. En el primer mes del año, la Isla recibió 246.000 visitantes, según publica este domingo Cubadebate, que califica la noticia en su titular de «discreta recuperación». El texto, que apenas dedica un párrafo al balance de enero, destaca el crecimiento con respecto a 2022, cuando llegaron solo 86.424.

Pero el dato es pésimo si se compara con los tiempos anteriores a la pandemia, a los que Cuba aspira a regresar. En enero de 2020, justo antes de que la pandemia se extendiera por el mundo y comenzaran las medidas de cierre de fronteras, la Isla recibió a 393.762 viajeros internacionales. El dato ya había descendido con respecto a los mejores años del sector para Cuba. En 2019, ese mismo mes, llegaron a Cuba 489.618 turistas. Además, según los datos disponibles desde 2015, nunca se había bajado de los 350.000.

El autor de la breve nota, tomada de El Economista de Cuba, es José Luis Perelló, profesor de la Universidad de La Habana y experto en turismo que, pese a su férrea defensa de las políticas del régimen en el sector y firme convencido de la estrategia de aumentar la inversión en hoteles de lujo incluso con la escasa ocupación que experimentan los establecimientos en los últimos años, no ha escondido recientemente su escepticismo con la meta del régimen para este 2023.

El Gobierno anunció a finales del pasado año que, en este, espera alcanzar los 3,5 millones de turistas. La cifra es muy baja en comparación con los casi 5 millones a los que llegó a aspirar antes del covid-19, pero aún así vuelve a ser dudoso que se consiga.

Perelló advirtió a la agencia EFE en una entrevista dedicada al análisis del sector turístico en el Caribe que su predicción es mucho más conservadora y la situó en 2,3 millones. El experto atribuye, eso sí, la responsabilidad a las sanciones de EE UU, especialmente a las trabas impuestas a los cruceros que paran en La Habana.

Para 2022, Cuba había previsto una meta de 2,5 millones de turistas que desde el inicio se consideró ambiciosa, aunque en 2019 se habían logrado 4,2 millones. Sistemáticamente los datos fueron demostrando lo imposible que sería llegar a una cifra similar, pues ya solo enero, un mes de temporada alta y tradicionalmente muy bueno para el sector, llegaron poco más de 85.000. Febrero, cuando comenzó la invasión rusa a Ucrania, confirmó que la situación iba a empeorar, ya que las sanciones internacionales en seguida dejaron ver sus efectos, paralizando los vuelos desde Moscú.

Sin embargo, las autoridades no accedieron a rebajar sus previsiones hasta finales de octubre, cuando las situaron en 1,7 millones. Con las cifras de diciembre ya conocidas, la Isla se quedó a casi 86.000 viajeros de cumplir con ella, y recibió a 1.614.087 visitantes extranjeros.

La primera persona del Gobierno que alertó de la imposibilidad de alcanzar la meta fijada en 2021 fue Manuel Marrero en mayo. El primer ministro, que fue titular de Turismo durante 15 años, corrigió a su sucesor y advirtió en ese momento de que hasta 2023 no se «completaría» la recuperación de esa industria.

Pero todo parece indicar que este año tampoco será el adecuado y la población empieza a poner en duda que el sector considerado como clave para levantar el resto de la economía, sobre todo por su rápida liquidez y captación de divisas, y al que se destinan la mayoría de recursos que a la población se le escatiman –empezando por la propia alimentación– vuelva a ser lo que fue.

Cancún, República Dominicana y Puerto Rico, lucen cifras históricas, y Colombia también está a punto de alcanzar los datos previos al covid-19

El turismo, que sufrió un impacto brutal durante la pandemia a nivel mundial, se ha recuperado en la inmensa mayoría de países en los que es un sector clave y ya exhibe incluso cifras superiores a las de antes de 2020 en algunos destinos. Entre ellos, el marco regional. Cancún, República Dominicana y Puerto Rico, lucen cifras históricas, y Colombia también está a punto de alcanzar los datos previos al covid-19.

Tres días antes de finalizar 2022, llegó a Cancún la pasajera 30 millones, la cifra más alta de la historia para esa zona del Caribe. Pero también luce números de infarto República Dominicana, que alcanzó los 8,4 millones de viajeros, un crecimiento del 10% por vía aérea y un 20% por la marítima si se compara con 2019.

Puerto Rico, que en 2021 tuvo el mejor año de turismo en su historia, superó en 2022 su propio récord también, mientras Colombia está al 98,6% de los datos de 2019.