El régimen cubano negocia la compra de misiles a Bielorrusia
Cuba estaría particularmente interesada en los suministros de armamento, incluidas lanzaderas de misiles Polonez, sistemas de misiles tácticos desarrollados entre China y Bielorrusia que tienen un alcance de hasta 300 kilómetros
Representantes de las Fuerzas Armadas de Bielorrusia y del Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (MINFAR) de Cuba acordaron un proyecto de cooperación militar y un plan de eventos bilaterales para 2024, reportaron las agencias EFE y Belta a partir de declaraciones de las autoridades bielorrusas.
Según la información, Cuba estaría particularmente interesada en los suministros de armamento, incluidas lanzaderas de misiles Polonez, sistemas de misiles tácticos desarrollados entre China y Bielorrusia que tienen un alcance de hasta 300 kilómetros.
Los acuerdos y negociaciones se establecieron durante la visita de una delegación bielorrusa a Cuba, encabezada por el jefe del Departamento de Cooperación Militar Internacional y ministro adjunto de Defensa de Bielorrusia, coronel Valery Revenko. Fue recibida en La Habana por el jefe del Estado Mayor del Ejército, el general de división Roberto Legrá Sotolongo.
La agencia oficial bielorrusa Belta señaló igualmente que los militares bielorrusos «visitaron una división de tanques y una brigada de defensa aérea de la Región Militar Occidental».
Consolidación de la alianza militar
La pasada semana estuvo igualmente de visita en Cuba el ministro el Interior de la Federación de Rusia, Vladímir Kolokóltsev. Durante su estancia en la isla, Kolokóltsev se reunió con el General de Ejército Raúl Castro, con el mandatario Miguel Díaz-Canel, y con su homólogo Lázaro Álvarez Casas.
Sobre este encuentro, el presidente Miguel Díaz-Canel comentó en su cuenta de X: «Su visita continúa el camino de fortalecimiento, consolidación y ampliación de relaciones en todos los ámbitos entre nuestros países».
Cuba ha sido uno de los principales aliados internacionales del Kremlin desde el inicio su invasión a Ucrania. Esto se ha evidenciado tanto en pronunciamientos oficiales como en votaciones en Naciones Unidas. De igual forma, varias delegaciones oficiales cubanas han visitado Moscú y Minsk, y viceversa.
En noviembre del pasado año, Díaz-Canel se reunió con Vladímir Putin en Moscú. Poco después, en mayo de este año, le siguió el Ministro del Interior cubano, tras lo cual trascendió que militares cubanos recibirían entrenamiento en Bielorrusia. Un mes mas tarde, estaría de visita en Rusia y Bielorrusia el Ministro de las FAR, Álvaro López Miera.
Tras estos intercambios estallaría un escándalo internacional por el reclutamiento de jóvenes cubanos para integrar las tropas rusas que invadían Ucrania. El régimen cubano lo reconoció pero negó cualquier vinculación. Las denuncias de algunos de esos jóvenes, algunos engañados y otros forzados, también se sustentaron con fotos, videos y declaraciones de otros cubanos que confirmaban su presencia en las zonas de conflicto como parte del ejército ruso.
La visita y los acuerdos con los militares bielorrusos pudiera evidenciar el cierre de una etapa de negociaciones.
Escalada de tensiones
El medio oficial ruso Sputnik calificó los lanzacohetes Polonez como el arma «más prominente de Europa». Por su parte, el portal Military Watch reseñó que «no tiene rivales cercanos entre los sistemas desplegados por los estados miembros de la OTAN o por Rusia».
De esta manera, el régimen cubano obtendría un arma potencialmente ofensiva pese a no encontrarse en medio de ningún conflicto armado.
De arribar a la isla el armamento, ello pudiera generar una crisis diplomática entre Cuba y Estados Unidos, «y/o una escalada belicista entre este último y Rusia», alerta el periodista Alfredo Herrera Sánchez.
«Eso ya sucedió durante la Crisis de los Misiles de octubre de 1962. El Kremlin ha reflotado en los últimos años la posibilidad de reeditar el conflicto geopolítico que convirtió a Cuba en una base de operaciones nucleares al servicio de la Unión Soviética», añadió.