María Corina Machado reiteró que Nicolás Maduro no tiene otra opción, solo le queda negociar una transición democrática
Machado pidió acción a la justicia internacional. Hicimos nuestra parte, lo arriesgamos todo a un costo personal enorme.
Mediante una entrevista por videollamada a un medio de comunicación de Brasil, la líder opositora, María Corina Machado, afirmó que la postura adoptada por Brasil ante la impugnada reelección del dictador Nicolás Maduro ha fracasado.
Ante la interrogante sobre la salida de María Corina Machado del país, confirmó que ha decidido quedarse en Venezuela, en mi caso, Maduro me acusó de terrorismo y dice que estoy prófugo de la justicia. Dicen que saboteé el sistema electoral. Todo lo que pasa en Venezuela termina culpándome a mí. Estoy, como muchos venezolanos, resguardado. Decidí quedarme en Venezuela brindando apoyo y siguiendo desde aquí la lucha de los venezolanos, pero no quiero facilitarle al régimen su neutralización.
Ante otro cuestionamiento sobre las negociaciones de Brasil y Colombia con Venezuela, Machado opinó, para que el régimen tenga incentivos para negociar necesita sentir que su permanencia en el poder es cada día más complicada. Hoy Maduro siente que puede silenciar a todos los periodistas, acabar con la disidencia y secuestrar niños. Hay 68 niños y adolescentes en prisión. La comunidad internacional necesita adoptar una postura mucho más firme y dura contra Nicolás Maduro.
En cuanto a la postura de Lula, sobre su abstención en una votación en la ONU para renovar la misión de investigación en Venezuela, la líder opositora manifestó que “luego de las elecciones tanto Lula como Gustavo Petro, presidente de Colombia, decidieron mantener una posición más prudente, sin embargo han pasado tres meses para que el régimen de Maduro aprovechara ese período para reprimir con más fuerza que nunca. Ni siquiera contestó la llamada telefónica [de Lula] y trata de burlarse de él.”
Y añadió, miren esta maniobra con los Brics, esta cosa patética. Brasil lo hizo muy bien [al detener a Caracas]. Pero para mí la votación en el Consejo de Derechos Humanos es incomprensible, porque al final, si hay algo que sé que Brasil valora es todo el sistema de derechos humanos.
Una cosa es mantener un diálogo con Maduro, pero otra ser indiferente al dolor de una sociedad. Ha llegado el momento de adoptar una postura mucho más dura hacia Maduro, reitera la líder opositora.
Ni siquiera he podido obtener salvoconductos para mis compañeros que ya llevan siete meses en la embajada argentina bajo protección de Brasil. Es una burla a Nicolás Maduro, denunció Machado.
¿Qué mantiene a Maduro en el poder?, preguntó el medio Folha.
Maduro sigue siendo el máximo líder militar. El sistema instalado en Venezuela es absolutamente militar, con dos brazos represivos: el armado, que utilizan algunos sectores militares, policiales y paramilitares, los llamados colectivos, y un brazo represivo judicial, con estos tribunales de terrorismo. El tercer pilar es el dinero que llega a través de actividades ilícitas, como el tráfico de drogas, el contrabando de oro y otros minerales, la trata de personas y la prostitución, explicó Machado.
Seguido, cuestionaron si existía la posibilidad de una ruptura militar y la líder opositora explicó que son temas muy delicados, prefiero hablar de hechos. Número uno: los militares colaboraron para que la ley se cumpliera el día de las elecciones y nosotros, en la oposición, tuviéramos acceso a nuestras actas. Número dos, veamos lo que está pasando en los propios grupos que componen el régimen: se están acusando unos a otros, y creo que son señales de que el enfrentamiento interno es enorme, entre otras cosas porque muchos ya saben que un proceso de transición es irreversible. Nadie puede decir cuánto falta, pero este régimen nunca ha sido tan débil como lo es hoy.
Para finalizar la entrevista, el medio cuestionó a Machado en cuanto a la juramentación de Edmundo González como presidente de Venezuela si es posible tener un gobierno paralelo y sentenció, no acepto que me digan que tenemos que contemplar la posibilidad de que se sacrifique la soberanía popular. Si todos los venezolanos aquí y en el extranjero, los países, los presidentes, los Parlamentos, los ciudadanos del mundo, hacemos lo que se supone que debemos hacer, entonces Maduro no tendrá otra opción que sentarse a negociar. Tenemos que pasar de declaraciones conjuntas a acciones conjuntas. La historia nos juzgará.