República Dominicana no invitará a Cuba, Venezuela y Nicaragua a la Cumbre de las Américas
Los tres regímenes autoritarios del hemisferio vuelven a quedar fuera de la reunión política de los países de las Américas.

La Cancillería de la República Dominicana anunció el martes 30 de septiembre su decisión de no invitar a los regímenes de Cuba, Nicaragua y Venezuela a la X Cumbre de las Américas, que se celebrará el 4 y 5 de diciembre próximos en Punta Cana, en el este del país caribeño.
En un comunicado, la Cancillería precisa que al asumir la presidencia pro tempore en 2023, el Gobierno dominicano anunció que dicha cumbre sería inclusiva, «propósito que procuramos honrar».
Sin embargo, «frente al contexto actual de polarización política, hemos decidido priorizar el éxito del encuentro, extendiendo la invitación al mayor número posible de países».
En ese sentido, «la no invitación a Cuba, Nicaragua y Venezuela —países que, por diversas razones, han decidido no formar parte de la OEA y que tampoco participaron en la pasada edición de la Cumbre de las Américas— constituye la decisión que, dadas las circunstancias hemisféricas, favorece la mayor convocatoria y asegura el desarrollo del foro», afirma la Cancillería.
El texto señala que la reunión fue lanzada por Estados Unidos en 1994 y «pasó a ser coordinada estrechamente por la Organización de los Estados Americanos (OEA), a través de su Secretaría de Cumbres. Este marco establece limitaciones específicas en cuanto a la participación».
La Cancillería recuerda que «en otras ocasiones, cuando República Dominicana fue país anfitrión de la Cumbre Iberoamericana en Santo Domingo, en 2023, o de la Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en Bávaro, en 2017, dichos países fueron invitados y participaron plenamente».
«Todo lo anterior responde a un criterio estrictamente multilateral. Al mismo tiempo, la relación bilateral de República Dominicana con cada uno de estos estados mantiene características propias», acota.
La nota señala que con Cuba «las relaciones son históricas, sólidas y excelentes. Los intercambios bilaterales en diversas áreas nunca se han interrumpido y han resultado mutuamente beneficiosos. Las diferencias políticas se han gestionado siempre con respeto recíproco».
En cuanto a Nicaragua, «las relaciones son cordiales. Compartimos espacios en foros como el SICA, la CELAC, la ONU y la SEGIB, además de mantener un comercio bilateral equilibrado».
Finalmente, en torno a Venezuela, señala la Cancillería que este es un «país con el que nos unen profundos lazos históricos. No obstante, el Gobierno dominicano no ha reconocido la legitimidad de las dos últimas elecciones presidenciales celebradas allí, mientras que las autoridades venezolanas han suspendido las relaciones diplomáticas».
«En conclusión, República Dominicana ha adoptado la decisión que considera más favorable para garantizar la mayor participación posible en la Décima Cumbre de las Américas. El Gobierno estima preferible crear las condiciones que aseguren el más amplio diálogo político, con el más alto nivel de representatividad hemisférica», finaliza.
El ministro de Relaciones Exteriores dominicano, Roberto Álvarez, destacó la importancia de la Cumbre de las Américas como un espacio clave para movilizar capital humano y financiero en beneficio de los países de la región.
«Creemos que la Cumbre de diciembre en Punta Cana es una valiosa oportunidad para cultivar puntos en común en torno a una agenda práctica y constructiva que movilice capital humano y financiero para el beneficio mutuo de nuestros países y pueblos», dijo Álvarez en una conferencia en el marco de la edición número 33 de la Semana Dominicana en Estados Unidos, según el reporte del medio dominicano Diario Libre.
El canciller advirtió que la polarización en el hemisferio ha limitado la adopción de políticas regionales que permitan impulsar el crecimiento económico sostenible y el progreso social. En ese sentido, confió en que el encuentro de diciembre contribuya a revertir esa situación.
La X Cumbre de las Américas se celebrará en Punta Cana bajo el lema «Construyendo un hemisferio seguro y de prosperidad compartida».
En 2022, al finalizar la IX Cumbre de las Américas en Los Ángeles, EEUU, a la que tampoco fueron invitados los tres regímenes autoritarios, Juan González, principal asesor para América Latina de la Administración de Joe Biden, defendió la decisión.
«En 2001 los países miembros de la OEA llegaron a un acuerdo de que solo los países que eran partidarios de la Carta Democrática iban a ser invitados. Lo más importante es que, ¿cómo podemos nosotros invitar a un país cuando están poniendo en la cárcel a personas solo por cantar y pedir comida?»
«No se puede reconciliar ese tipo de cosas con una invitación. No quiere decir que no vamos a hablar con Cuba, porque nosotros hemos cambiado la política nuestra, estamos dispuestos a tener conversaciones con Cuba, apoyamos un diálogo en Venezuela, hemos intentado hablar con Nicaragua, pero eso es muy diferente que invitarlos aquí. El presidente Biden habla con Putin, ha hablado con Putin de la invasión de Ucrania, pero no lo va a invitar a Washington», comparó.