Ciencia y TecnologíaEconomía

Ramón Peña / En pocas palabras: Innovación y crecimiento económico

🏆 Ganadores del Premio Nobel de Economía 2025 Joel Mokyr, Philippe Aghion  y Peter Howitt fueron reconocidos por explicar cómo la innovación impulsa  el crecimiento económico, destacando el principio de la destrucción

Las investigaciones de los ganadores del Nobel de Economía 2025, abordan el modo en el que la interrelación entre conocimiento y producción es motor del progreso económico. Jules Mokyr pone en evidencia cómo la fusión entre ciencia e ingeniería dinamiza la innovación y eleva la competitividad industrial.

Pero esa incorporación del conocimiento científico-tecnológico al progreso industrial exige apropiadas condiciones políticas por parte del Estado. Mokyr, historiador, lo ilustra, entre otras referencias, subrayando cómo la tolerancia y apoyo del poder político europeo fertilizó los avances de la revolución industrial, en contraste con el tradicionalismo chino que temía que la innovación alterase el orden establecido.

Inevitablemente, como sentenció Paul Samuelson, premio Nobel 1970, en economía nada es gratuito. Aquí entra en juego el concepto de “destructive creation”, original de Joseph Schumpeter, invocado por Philippe Aghion y Peter Howit, modelistas teóricos, también galardonados con el Nobel 2025, según el cual, los avances en competitividad de unas empresas suponen la desaparición de otras, así como la sustitución de los procesos tecnológicos existentes.

Dentro de esa dinámica, el flujo de innovaciones tecnológicas, de nuevos productos, de nuevos modelos de negocio, genera un crecimiento constante en la productividad, en la calidad de vida y es motor de una expansión económica sustentable.

En contraste con las tesis de estos académicos, en Venezuela, la investigación y desarrollo, la transferencia de tecnología, la innovación y la competitividad, son conceptos olvidados sobre los cuales hoy, no se piensa y ni siquiera se habla. Carente de políticas públicas e inversión en estos aspectos fundamentales, nuestro plantel productivo, tanto el público como el privado, es obsolescente, aletargado y de precaria calidad competitiva. Constituye un aspecto fundamental de nuestro atraso económico acumulado sin tregua desde hace más de un cuarto de siglo…

 

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