Unidad objeta ante el CNE uso de dactiloscopía para verificar huellas de firmas entregadas
Eso no está establecido en el reglamento de referendos electorales, aseguró Vicente Bello, representante de la coalición opositora ante el CNE
Prensa Unidad Venezuela (Caracas, 20 de mayo de 2016).- La Unidad Democrática objetó por escrito ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) la decisión tomada por la Junta Nacional Electoral de someter a la consideración de expertos en dactiloscopía las huellas de las personas que firmaron a favor del referendo revocatorio presidencial, y que fueron entregadas el pasado 2 de mayo, informó Vicente Bello, representante de la coalición opositora ante el ente electoral.
El experto en el tema electoral indicó que el pasado miércoles la Unidad introdujo ante el CNE una carta en la cual objeta lo anunciado por la presidenta del CNE, Tibisay Lucena, en la rueda de prensa ofrecida ayer. “Ya nosotros lo estábamos previendo. Ya lo objetamos por escrito y estamos a la espera de la respuesta del CNE”, que se espera para la próxima semana, aseguró.
Bello indicó que lo de la dactiloscopia es “un nuevo invento” del CNE para retrasar la realización del referendo para revocar el mandato al presidente Nicolás Maduro. “Lo único que está establecido en el reglamento electoral es que una vez consignadas las firmas, las que presentamos el 2 de mayo, el CNE debe contarlas, lo que ya se hizo, y luego transcribir en una base de datos los nombres y los números de cédula de las personas que firmaron y verificar si están o no inscritas en el registro electoral. Eso es lo que legalmente está establecido”.
Es opinión de Bello, resulta innecesario que unos dactiloscopistas “que además no sabemos de dónde vienen, ni qué militancia ni qué confiabilidad profesional tienen, comiencen a observar visualmente unas planillas si luego los ciudadanos van a ratificar su manifestación de voluntad, que es lo importante, y lo harán ante el CNE”.
En ese sentido explicó que en la siguiente fase del proceso los firmantes ratificaran su manifestación de voluntad para que se convoque el referendo, y que esto lo harán “ante un funcionario del CNE mediante la colocación de su huella en las máquinas captahuellas, las cuales están conectadas a la base de datos del CNE. Por ello sostenemos que es innecesario”.
Las personas que acudieron al llamado de la Unidad entre el 27 y 30 de abril pasado a firmar las planillas estamparon sus huellas en algunos casos con pasta y en otros con almohadillas. Con estas últimas la huella puede variar, dependiendo del nivel de presión y de la cantidad de tinta: puede producirse un manchón o, por el contrario, puede que no se distinga de manera muy clara.
“Ellos no pueden hacer ningún reparo en este sentido porque no está establecido en el reglamento, es totalmente ilegal”, aseguró.
“Sin embargo, y esto lo decimos de manera enfática, aun cuando no llamen el 2 de junio a la ratificación de las manifestaciones de voluntad, como lo anunciaron ayer, el CNE tendrá que hacerlo en julio. Podrá retrasarlo una o dos semanas, pero tendrá que hacerlo e inmediatamente después tendrá que convocar al 20 por ciento de los ciudadanos para ratificar su manifestación de voluntad”, señaló.
“Así lo hagan a finales de junio o lo lleven hasta julio, lo vamos a hacer. Si se realiza en julio, en los 90 días siguientes el CNE debe convocar el referendo. Aun con todas estas extensiones, aun con todos estos inventos, en octubre a más tardar vamos a tener referendo. Y cuando se declare la vacante absoluta de la presidencia de la Republica, porque estamos seguros de que se van a obtener todos los votos necesarios para revocar su mandato, se llamará a elecciones presidenciales”, concluyó.
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