Actas pendientes y revisión especial: cómo enfrentará Honduras el cierre de su elección presidencial más reñida en años
Con el escrutinio preliminar finalizado, la definición del ganador depende ahora de la revisión de actas rezagadas y la corrección de eventuales inconsistencias detectadas por auditores y delegados de partido
Tras el cierre oficial de la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), Honduras ingresó en la etapa más determinante de su proceso electoral. El Consejo Nacional Electoral (CNE) informó que el sistema de divulgación temprana quedó suspendido con el 57% de actas procesadas y un escenario prácticamente empatado entre los dos principales aspirantes a la presidencia.
La diferencia registrada es de apenas 515 votos entre Nasry Asfura, del Partido Nacional, y Salvador Nasralla, candidato del Partido Liberal, una cifra insuficiente para proyectar una tendencia sólida.
La consejera presidenta del organismo, Ana Paola Hall, subrayó que el cierre del TREP marca el inicio de una fase más exhaustiva del conteo.
“Debemos guardar calma, tener paciencia y esperar que como CNE terminemos de contabilizar actas por contingencia 1 y 2”, explicó en un mensaje en la red social X.
Hall enfatizó que el ambiente pacífico visto el día de la votación “debe mantenerse hasta la declaratoria de resultados”, recordando que la legislación otorga al organismo un plazo de hasta 30 días para publicar el resultado definitivo.
El escrutinio general continúa ahora con las actas que no pudieron transmitirse de forma normal. El reglamento electoral establece dos rutas especiales para estos casos. Las actas de contingencia uno corresponden a documentos que se procesaron en los centros de votación, pero no lograron ser enviadas. Esas actas deben ser sincronizadas nuevamente en la bodega tecnológica del organismo. Las actas de contingencia dos incluyen las que no fueron escaneadas ni cargadas por fallas en el equipo o en el proceso; estas se digitalizan en el centro logístico de Tegucigalpa bajo un esquema de auditoría reforzada.
El organismo también realizará un escrutinio especial, destinado a revisar actas con inconsistencias o diferencias significativas. Parte del proceso incluye una verificación visual de cada documento para asegurar que los datos coinciden con lo ingresado al sistema. Solo después de estas revisiones se procederá a consolidar el conteo general, requisito previo para la declaratoria final.
En este contexto, ninguno de los candidatos se ha atribuido la victoria. Nasralla explicó en redes sociales que, según sus estimaciones internas, podría resultar favorecido una vez se contabilicen las actas pendientes del departamento de Cortés, el más poblado del país.
“No nos estamos declarando ganadores, solo estamos proyectando los resultados que van a ingresar al CNE en las próximas horas”, aclaró, tras difundir una estimación propia basada en tendencias departamentales.
Asfura también reaccionó al cierre del conteo preliminar. El aspirante nacionalista pidió serenidad e insistió en que su partido cuenta con datos que muestran una ventaja.
“No vengo a hacer ninguna proclamación, solo vengo a decir que tengamos paciencia. El CNE terminará de hacer lo suyo y nos vamos a dar cuenta de la realidad”, declaró a periodistas. Añadió que en varios departamentos su movimiento registra “diferencias bastante a favor”.
El proceso ocurre en medio de un panorama político reconfigurado. La disputa enfrenta a dos figuras conservadoras, lo que marca un contraste con el Gobierno saliente. Asfura busca reposicionar al Partido Nacional tras el desgaste generado por los escándalos que rodearon a administraciones anteriores, incluido el caso del ex presidente Juan Orlando Hernández. Nasralla intenta recomponer su liderazgo tras su ruptura con el Gobierno de Xiomara Castro y su alianza con el Partido Liberal.
La campaña también tuvo un componente internacional. Días antes de la elección, el presidente estadounidense Donald Trump expresó su apoyo a Asfura, un gesto que generó debate interno.
Observadores locales interpretaron que ese respaldo movilizó a sectores que habían mostrado apatía. Leonardo Pineda, investigador social, consideró que el mensaje de Trump influyó en la participación.
“Puede haber cambiado las tendencias. Mucha gente decidió votar tras el mensaje”, dijo.
Mientras tanto, el país aguarda la etapa final del escrutinio sin manifestaciones masivas ni incidentes registrados hasta ahora. El desenlace dependerá del recuento de las actas bajo contingencia y del escrutinio especial. Solo entonces se conocerá el nombre del próximo presidente de Honduras.
(Con información de AFP y EFE)