Otros temas
Ana Cristina Vélez: Cómo hacer una torta sin cometer errores
- Antes de empezar, lea la receta desde el principio hasta el final. Cuando no se lee la receta se suponen pasos que algunas veces la receta omite. Además, es importante saber que se tienen a mano moldes, pocillos y cucharas medidoras, rejilla, papeles parafinados, un horno que llegue a la temperatura requerida o cualquier cosa que la receta pida y, por supuesto, que se cuenta con todos los ingredientes.
- Frente a sus ojos, ponga los elementos de la receta: cucharas, cocas, moldes, huevos, harina, mantequilla, azúcar, polvo de hornear, etcétera. Revise que la temperatura de cada ingrediente esté de acuerdo con las temperaturas que la receta sugiere. Muchas recetas piden que la mantequilla esté blanda, pero no derretida, y que los huevos estén a temperatura ambiente (los huevos a temperatura ambiente mantienen constante la temperatura de la masa, y la mantequilla blanda tiene el aire que necesitan los pasteles esponjosos).
- Prepare el molde en el que va a hornear la torta. Revise si tiene el tamaño sugerido, corte el papel parafinado, si la receta lo pide o si su molde no tiene teflón; enmantequíllelo o acéitelo y enharínelo y resérvelo. Es de utilidad tener una toalla limpia para secarse las manos, pues algunos pasos las ensucian.
- Revise el horno antes de prenderlo, retire todo lo que haya dentro, ponga la parrilla en el medio o en el que sigue hacia abajo, para que la torta, al subir, no se queme por encima con la resistencia. Precaliéntelo a la temperatura correcta. No es recomendable esperar ni diez minutos una vez la masa está lista, pues podría no reaccionar como se espera; tampoco es recomendable que la masa esté adentro mientras la temperatura sube, por el mismo motivo.
- Ahora sí, empiece a hacer la torta siguiendo las instrucciones al pie de la letra. Las tortas esponjosas llevan las claras batidas aparte, por ejemplo, así que los detalles del orden para proceder son importantes. Vierta la masa en el molde o en los moldes ya preparados.
- Mezcle los ingredientes bien, pero no bata la masa más de la cuenta. Ni mucho que queme al santo ni tan poquito que no lo alumbre.
- Que dizque “no abra la puerta del horno” hasta que termine la cocción. Sí, es cierto, no lo haga hasta casi completar el tiempo requerido. Hágalo solamente en caso de que el olor de la torta le indique que se está quemando.
- Cuando el tiempo se ha cumplido, abra el horno e introduzca un cuchillo delgado en el centro de la torta y hasta el fondo. Si la torta está cruda, el cuchillo saldrá untado con masa cruda.
- Deje enfriar la torta antes de sacarla del molde. La mayoría de las veces el molde caliente se debe poner sobre una parrilla o rejilla, para que aire frío llegue por debajo y enfríe la torta uniformemente. Hay tortas que se desmoldan calientes; si hay que hacerlo, la receta lo advierte. Hay casos como el de la torta de Ángel, que se enfrían boca abajo.
- Cuando esté fría la torta, pase suavemente un cuchillo delgado por los bordes del molde o sacúdalo hacia arriba y hacia los lados para ver que si la torta se ha desprendido del molde. Luego, desmóldela.
- Termine el pastel con la decoración que la receta indica.