Arcadi Espada: «Pedro Sánchez es la versión europea de Donald Trump»

Arcadi Espada, Rosa Cullell, Álvaro Nieto y Benito Arruñada. | TO

Unos días después de que el Gobierno anunciara su plan de acción por la democracia para combatir «los bulos», un grupo de periodistas y columnistas se ha reunido este miércoles en Barcelona para conversar sobre las consecuencias que puede tener para la libertad de prensa. En un evento promovido por THE OBJECTIVE, se ha planteado si el nuevo plan puede tener recorrido, cómo se va a concretar o hasta qué punto es un problema que el Gobierno sea el principal anunciante de España.

El director de THE OBJECTIVE, Álvaro Nieto, ha asegurado en el acto que el Gobierno no puede «cerrar ningún medio», pero ha hecho un llamamiento a no confiarse, porque ha advertido que su intención es «castigar a la prensa incómoda desprestigiándola y, con ello, ahuyentando a los anunciantes privados que la sostienen».

En la primera jornada del ciclo Libertad de prensa: ¿en peligro de extinción? han participado también el periodista de El Mundo Arcadi Espada, la periodista Rosa Cullell y el economista Benito Arruñada, y ha sido moderado por Laura Fàbregas. Se trata del primero de una serie de coloquios que se celebrarán por toda España durante los próximos tres meses.

El director de THE OBJECTIVE ha recordado que, desde la restauración de la democracia, siempre ha habido tensiones entre el poder político y el cuarto poder, pero que lo insólito de ahora es que algunos periodistas y medios se apunten a esta suerte de lucha entre medios de comunicación, como a su juicio sucedió cuando centenares de periodistas firmaron un manifiesto de apoyo a Sánchez en el que hablaban contra la «derecha mediática».

«Ni izquierdas ni derechas, periodismo»

El debate se ha iniciado con una primera intervención de Cullell, quien ha calificado el plan del Ejecutivo como «una cortina de humo» y «una tapadera para despistar». Para la veterana periodista, «la mejor ley de prensa es la que no existe» y no ve posible que Sánchez pueda ir tan lejos como pretende, ya que la libertad de prensa está consagrada en la Constitución.

También ha defendido la labor realizada por THE OBJECTIVE en las informaciones relativas al exministro de Transportes José Luís Ábalos: «No es de derechas ni de izquierdas, es periodismo». Cullell ha subrayado que se pone mucho interés en saber quiénes son los accionistas privados «cuando todos sabemos quiénes son», y muy poco, en cambio, en conocer el gasto público que se va a financiar a los medios.

«Sánchez es Donald Trump»

En su turno, Arcadi Espada ha aseverado que «Sánchez no tiene ninguna posibilidad de intervenir de una manera eficaz contra la prensa». Para el periodista catalán, la pugna de Sánchez con los medios de comunicación forma parte de la misma estrategia «cínica» que ha tenido anteriormente con otros sectores.  «Pedro Sánchez es la versión europea de Donald Trump», ha dicho, en el «manejo de la verdad, del Deep State… Esto va tocando a quien le toca. Hace unos años fue contra los empresarios, unos empresarios que trabajaban para el mal», ha abundado.

El autor de Contra Catalunya, en la actualidad uno de los columnistas más leídos de España, también ha reflexionado sobre el «discurso hegemónico» que hay en los medios de comunicación»: «Incluso los diarios como el mío, que aparentemente participan de una labor de oposición, culturalmente no se apartan de la cultura dominante de izquierdas, del mainstream socialdemócrata».

Publicidad institucional

Espada, no obstante, ha defendido que el poder público «se ocupe de la verdad», al ser un «bien público que debe ser protegido y puesto a salvo de los mentirosos». En este punto, el economista Benito Arruñada ha discrepado: «El libre mercado falla, y cuando se regula siempre acaba en desastre».

El catedrático en Economía ha introducido en este debate una nueva perspectiva sobre la publicidad institucional: «Las preguntas que realmente nos tenemos que empezar a hacer no es cómo se distribuye la publicidad institucional, sino que los anuncios que se ponen son estatistas y ponen mensajes partidistas». Como ejemplo, ha citado algunos de los anuncios que se pusieron durante la Covid-19, que en lugar de que de sensibilizar sobre las muertes o dar información útil, parecían dirigidos a subvencionar a los medios: «Se pusieron anuncios como ‘este virus lo paramos unidos’, ‘salimos unidos’, ‘España puede’. En Italia por ejemplo ponían anuncios que la gente moría. Nuestro Gobierno lo usaba para anestesiarnos». 

Entre quienes se han acercado a escuchar a los cuatro ponentes estaban columnistas como Anna Grau o Sonia Sierra, pero también profesores universitarios y rostros conocidos del constitucionalismo catalán, como Ferran Toutain, Juan Arza o Isabel Fernández Alonso. Y también los periodistas Xavier Rius y Josep María Fàbregas.