Arístides Beaujon
Nació el 4 de junio de 1925, en Santa Ana de Coro, estado Falcón. Hijo de José Dolores Beaujon y Clara Aurora Graterol. Sus hermanos fueron Elvia Rosa, Carmen Lourdes, Rafael Vicente (abogado), Néstor (aviador), Ricardo (trabajador petrolero), Óscar (médico). Arístides era el menor.
Quedó huérfano y lo criaron sus hermanas Elvia Rosa y Carmen Lourdes.
Fundó Copei en Falcón el 13 de mayo de 1946, acto que fue presidido por Lorenzo Fernández y José Ángel Ramírez. El secretario general del partido electo en ese acto fue Mario Rivero.
En Falcón, Beaujon fue líder fundamental del socialcristianismo. Desde su fundación fue a tiempo completo un militante demócrata cristiano. Muy joven, había estado cerca de la izquierda.
En el periodo 1946-1948 fue diputado regional por el partido Copei, junto a César Isaac Curiel Penso.
En el lapso 1951-1952 fue secretario general de Copei en el estado Zulia.
En 1955 se graduó de abogado en la Universidad Central de Venezuela (UCV), ejerció como asesor jurídico de los sindicatos en Falcón y Zulia, hasta enero de 1958, cuando la llegada de la democracia lo lleva a dedicarse de lleno al apostolado de la política, y especial y fielmente, a Copei.
Ejerció durante 40 años la actividad legislativa en el Congreso de la República, como diputado y senador, desde 1959 hasta 1998.
A esta institución fundamental de la democracia llegó primero como diputado y luego fue electo siete veces consecutivas senador, siempre por el estado Falcón. “De ahí el reconocimiento al pueblo falconiano más que a mi propia persona”, acentuó Arístides Beaujon, en palabras dichas en la Cámara alta del Congreso en 1999.
Integró especialmente la Comisión de Defensa, de la que, en varias oportunidades, fue su presidente en el Senado, “siempre respetando lo establecido por la Constitución de 1961, que señalaba que ´el presidente de la república proponía los ascensos militares y el Senado los consideraba”, resalta como un gran legado de Beaujon el exdiputado y exgobernador de Barinas, Gehard Cartay Ramírez.
Desde el Congreso Nacional “cuidó como el tesoro más valioso la preminencia del poder civil para desarrollar la república de manera armónica y pacífica”, así lo resalta José Amalio Graterol Jatar en el artículo “A cien años del nacimiento de Arístides Beaujon”.
Al trabajo partidista nacional se dedicó con más énfasis en Caracas, La Guaira, Lara, Zulia, Guárico y, por supuesto, Falcón.
En1969 fue electo secretario general nacional de Copei nacional, cuando le ganó la convención al líder de Copei en Aragua, Godofredo González, funciones en las cuales lo sustituyó dos años después el afable Pedro Pablo Aguilar.
Durante su gestión hizo de la sede nacional de Copei una casa de puerta franca donde encontraban a un líder dispuesto a escuchar y resolver las necesidades de los militantes de todos los estados.
Corrió la carrera de la precandidatura presidencial en 1972 y 1977. En 1977 declinó a favor de Luis Herrera Campins. Siempre fue respetuoso de la institucionalidad y de las reglas del partido.
Fue un araguato a rajatabla. “Bueno y solidario porque era un verdadero demócrata cristiano, era un verdadero copeyano”, concluye Raúl Ochoa Cuenca, en memoria de Beaujon, cuando se cumplieron 10 años de su muerte.
No hacía distingo de colores partidistas a la hora de ayudar a sus coterráneos más allá de las fronteras de Falcón. Lo que denota que practicó la política bajo el principio y ejemplo de “estar con el pueblo”, “nunca jamás servirse del pueblo”. (Destaca la profesora Olga Elena Hidalgo de Curiel en su discurso en ocasión del 65 aniversario de Copei y homenaje a Arístides Beaujon, en enero de 2011), nueve meses previos al deceso del único senador copeyano por el estado Falcón durante los 40 años de democracia.
De él sus compañeros del Senado expresaron en 1999, meses antes del referéndum para liquidar el Congreso de la República: “fue un paladín de la honestidad, un hombre de decir sí y decir no. De cumplir con sus compromisos”.
Lo que le otorga asimismo una virtud invaluable en un ser humano y en un político auténtico: el recto proceder y alzar la bandera de la verdad, como norma de conducta.
Beaujon, senador. Beaujon, diputado. Beaujon, activista. Beaujon, el hombre. Beaujon, tenaz, veraz y perseverante. En fin, Arístides. Amigo de sus amigos. Estimado altamente inclusive por sus adversarios políticos.
De su convicción católica romana fue pública su devoción al Santo Sepulcro y a Santa Ana, patrona de su Coro natal, del que salió a comienzos de octubre de 2011 rumbo a Maracaibo, ciudad donde expiró pocos días después, el 16 de octubre de 2011.
Abandonó Arístides el plano terrenal, mas no su militancia copeyana.
Cita:
“Sigo aquí mientras el Senado continúe funcionando” .
Arístides Beaujon (1999).