Conte presenta un Gobierno de coalición repartido a partes iguales entre PD y M5S
El Ministerio de Economía recaerá en el eurodiputado del Partido Democrático, Roberto Gualtieri, y el de Exteriores será para Luigi Di Maio
El primer ministro en funciones de Italia, Giuseppe Conte, ha presentado la tarde de este miércoles el equipo de ministros que formarán su segundo Gobierno. Según el ritual constitucional, Conte se ha reunido con el presidente de la República, Sergio Mattarella, le ha adelantado los nombres que el Partido Democrático (PD) y el Movimiento 5 Estrellas (M5S) han acordado durante la última semana y este le ha dado su aprobación. El nuevo Consejo de Ministros, a diferencia del surgido de las negociaciones hace 14 meses con la Liga, ha sido aceptado sin ningún problema por el jefe del Estado y conformará una coalición casi simétrica.
Los dos socios de Gobierno se han repartido las carteras de una forma equilibrada (por la influencia política y por el peso electoral que tienen) y de manera casi paritaria (10 para M5S y 9 para PD). Conviene recordar que en las últimas elecciones los grillinos lograron un 33% de los votos y 235 diputados frente al 18,7% del PD y sus 107 diputados). Pero la tónica general, más allá de la simetría, ha sido la de intentar satisfacer al presidente de la República, crucial en este proceso, y calmar los ánimos en Europa (la prima de riesgo, de hecho, ha bajado hasta un mínimo de 149 puntos). Al frente del delicadísimo Ministerio de Economía, por ejemplo, estará Roberto Gualtieri, actual presidente de la comisión para Asuntos Económicos del Parlamento Europeo. Historiador y eurodiputado del PD desde 2009, es un hombre apreciado en Bruselas con un perfil marcadamente político —no es economista— que puede ayudar a reconstruir los puentes entre Italia y Europa.
El Ministerio del Interior, ocupado hasta ahora por Matteo Salvini, era otra de las carteras clave para entender el carácter que tendrá el nuevo Gobierno y las tensiones que pueden generarse con la UE. La nueva titular del área será Luciana Lamorgese, delegada del Gobierno en Milán hasta octubre del 2018. Fue también jefa de Gabinete de los predecesores de Salvini: Marco Minniti (PD) y Angelino Alfano (Alternativa Popolare). Apreciada por los cuerpos policiales italianos y con una larga experiencia en Interior, la idea que deberá ejecutar será la de descoser parte de la nueva normativa aprobada por su predecesor contra las ONG que rescatan a migrantes en el mar, pero manteniendo un perfil duro que contenga las críticas de la ultraderecha.
Una de las figuras que más incomodidad generaban en el nuevo organigrama era la del jefe político del Movimiento 5 Estrellas, Luigi Di Maio. Ministro de Desarrollo Económico y Trabajo y vice primer ministro en el anterior Ejecutivo, será ahora el ministro de Exteriores. Hasta el último momento, según fuentes de la negociación, no ha estado claro su nuevo papel. Pero finalmente será quien represente a Italia ante la comunidad internacional.
Una figura fundamental en el nuevo Ejecutivo será el subsecretario de Presidencia, que hasta ahora ocupaba un miembro de la Liga. PD y M5S han acordado entregarle esta función, algo así como la de jefe de Gabinete del presidente, al grillino Riccardo Fraccaro. En esta ocasión, además, no existirá el contrapeso de los vice primer ministros, que recayeron hace 14 meses sobre los jefes políticos de ambos partidos.
El Ministerio de Justicia seguirá estando dirigido por el miembro de M5S, Alfonso Bonafede. Militante grillino desde el primer minuto, fue quien introdujo al actual primer ministro, Giuseppe Conte, en los círculos de Cinco Estrellas. La reforma de la justicia que se propuso llevar a cabo en el anterior Ejecutivo no se produjo y Bonafede pasó sin especial brillo por el Ministerio, pero su gran sintonía con Di Maio y el peso que tiene en el partido le han ayudado a conservar el cargo. Repite también el ministro de Medioambiente, Sergio Costa, exgeneral de los Carabinieri altamente apreciado por su lucha contra la contaminación en la región de Campania provocada por los residuos tóxicos vertidos por la camorra.
El Ministerio de Trabajo, en manos hasta ahora de Di Maio y encargado de gestionar la renta ciudadana, la propuesta estrella del M5S en el anterior mandato, seguirá en manos de uno de sus miembros. En esta ocasión, de Nunzia Catalfo. Sucederá lo mismo con el área de Desarrollo Económico, que mantienen los grillinos y dirigirá Stefano Patuanelli.
El secretario general del PD no ha querido entrar en el nuevo Ejecutivo. Pero Paola De Micheli, su mano derecha, será la titular de Infraestructuras y Transportes. Un área complicada ya que, además de una parte de la competencia sobre los puertos, deberá afrontar temas como la concesión de las autopistas (los grillinos pretenden revocársela a Atlantia a quien acusan de la caída del puente de Morandi) y la línea de alta velocidad entre Turín y Lyon, caballo de batalla del M5S.