Día del libro: Ni Shakespeare ni Cervantes murieron el 23 de abril
El autor del Quijote no murió en esta fecha, atribuida a la celebración del Día del Libro, para honrar su memoria
Es la primera de muchas inexactitudes y bulos que circulan alrededor de dos de los escritores más importantes de la Europa del siglo XVII. El Día Internacional del Libro se celebra el 23 de abril ya que se atribuye a esa fecha de 1616 tanto la muerte de Miguel de Cervantes como la William Shakespeare. Sin embargo, ninguno de los dos murió ese día, sí lo hizo en cambio el Inca Garcilaso, nacido en Cuzco en 1539 y fallecido en Córdoba, a la edad de 77 años.
Las inexactitudes sobre la muerte de Cervantes y Shakespeare tienen su explicación en la lectura errónea de los documentos históricos. Cervantes falleció el 22 de abril de 1616 pero fue enterrado el 23, por lo cual tiende confundirse la conmemoración. La diferencia de fechas es aún mayor con William Shakespeare. Para ese momento, Inglaterra se regía todavía por el calendario juliano, desfasado con respecto al Gregorian, que se usaba en España, por lo que la muerte de Shakespeare habría tenido lugar durante los primeros días de mayo de 1616.
Hay muchas otros errores y bulos alrededor de las biografías de ambos autores. Miguel de Cervantes jamás oyó hablar de Shakespeare. En muchas ocasiones se ha dicho que Shakespeare leyó la primera parte de El Quijote. El dato que sustenta esta hipótesis es la Historia de Cardenio, compuesta posiblemente entre 1612 y 1613, y que suele atribuirse al británico. Cardenio forma parte de las aventuras de la Sierra Morena andaluza de la primera parte del Quijote, en la que relata a Don Quijote y Sancho una historia de amor y desventura con una joven llamada Lucinda.
Un vacío en la biografía de Shakespeare
Tampoco queda claro que llegaran a conocerse. Existe un vacío en la biografía de Shakespeare, lo que ha dado margen a algunos autores para fantasear con un posible encuentro entre ambos. Se especula que pudiese haber ocurrido en Valladolid, en 1605, cuando una delegación inglesa visitó España para firmar la paz. Alguna bibliografía sugiere que la Compañía de Shakespeare podría haber viajado, pero no hay ninguna prueba documental de que Shakespeare estuviera con ellos.
Muchos expertos han intentado encontrar e investigar las coincidencias entre ambos autores. La tentación de comparar a Hamlet con Don Quijote se ha repetido una y otra vez. No es de extrañar: son dos personajes esenciales de la literatura universal y que fueron creados apenas con unos años de diferencia. Los une una cierta idea de la locura como manifestación de la lucidez. Sin embargo, muchos de estos argumentos se desdibujan al leer el ensayo que el escritor ruso Ivan Turgueniev dedicó a Hamlet y Don Quijote: «Son personajes universales que representan polos opuestos de tendencias humanas, resaltando lo hamletiano y lo quijotesco».