Ecología y política en Qinghai
Una exhibición de doscientas fotografías en el Palacio Cultural de las Nacionalidades en Beijing rinde tributo estos días a la provincia de Qinghai, en la meseta del Tibet, de donde se desprenden los ríos más importantes de China, el Amarillo, el Yangtze y el Lancang.
El diario China Daily ha seleccionado algunas de las más hermosas y representativas fotos de esa remota región en los confines noroccidentales, que regularmente atrae la atención por sus pavorosos terremotos.
Es – dice Wikipedia- un lugar con fuertes tradiciones mongolas y tibetanas cuya cima Amne Machin, en las montañas Kunlun a 6,282 metros de altura, es un sitio sagrado para los peregrinos budistas y asiento de importantes monasterios, como Wutong, cuyos monjes son famosos por las thangka, pinturas religiosas en algodón o seda.
La región goza de una autonomía limitada, porque son tibetanos una importante minoría de los cinco millones de habitantes que pueblan 720 mil kilómetros cuadrados donde no cesan de aflorar problemas desde su anexión en 1928 como provincia de la China, que aprovecha cada ocasión, como esta hermosa muestra fotográfica, para ratificar sus derechos territoriales.