Una calle bloqueada por manifestantes que apoyan el paro en el departamento de Santa Cruz (Bolivia)EFE
¿Cómo se entiende que el gobierno boliviano envíe a sus militantes aguerridos al departamento de Santa Cruz en vez de dialogar y acordar una fecha para el censo? Es, sin duda, una peligrosa provocación. Esto demostraría que el gobierno masista estaría buscando enfrentamientos fratricidas.
Así de agresivo es el gobierno boliviano del presidente Luis Arce, militante del Movimiento al Socialismo (MAS).
El expresidente Carlos Mesa publicó en las redes: «Exijo a Luis Arce proteger la vida y la integridad de los bolivianos y le demando que retire a sus militantes que avanzan sembrando violencia, en su afán de tomar la ciudad de Santa Cruz que ya sufre un cerco criminal ¡Detenga su demencial propósito!».
El departamento de Santa Cruz, que es el más rico de Bolivia, está desde hace 12 días en paro cívico indefinido. Y, por desgracia, enfrentamientos entre masistas y cruceños, se cobraron un muerto y varios heridos.
Esto nos recuerda a «las pititas» que bloquearon las ciudades durante 21 días en 2019 y provocaron la renuncia y huida de Evo Morales a México.
Los cruceños –a costa de perder millones de dólares al día– se encuentran en un paro, porque el gobierno de Arce, postergó de forma arbitraria y por sus intereses políticos, la fecha del Censo Nacional de Población y Vivienda que debería realizarse cada diez años.
En principio, se definió que se haría en noviembre de este año, pero de la noche a la mañana, el gobierno lo postergó al 2024.
Para los cruceños es fundamental que se realice el censo a la brevedad posible así como para la oposición. Aquellos recibirían beneficios que les corresponden por derecho.
El censo fue postergado por el Gobierno ya que pretende seguir utilizando el padrón electoral viciado con el que hizo fraude en las elecciones generales del 2019.
Dicho fraude fue confirmado por la autoridades de la OEA y la UE. El MAS pretende usar dicho padrón para ganar las elecciones del 2025. De igual manera quiere que no se devele la información irregular.
Con un nuevo censo, Santa Cruz contaría con más curules (escaños) en el Parlamento, y ganaría más espacio en el escenario político nacional, lo que quitaría poder e influencia al MAS.
De igual manera, al ser el departamento con más habitantes del país – que llegarían a casi tres millones– recibiría más ingresos de los impuestos nacionales, por tanto crecería y desarrollaría aún más.
El departamento de Santa Cruz es el más boyante de Bolivia. Desarrolla y crece a pasos agigantados. El MAS lo califica de derechista. Recibe a la mayor cantidad de inmigrantes ya que ofrece más fuentes de trabajo y mejor calidad de vida.
El Gobierno cercó Santa Cruz, impide que entren y salgan alimentos y perjudica a todo Bolivia porque el departamento provee el 70 % de los alimentos al país
A los pocos días de iniciarse el paro indefinido – que es pacífico y legal– el Gobierno tomó medidas de presión extremas. Cercó el departamento impidiendo que entren y salgan alimentos. Esta medida perjudica a todo Bolivia porque Santa Cruz provee al 70 % de los alimentos al país.
Luego cortó el gas al parque industrial para impedir que sigan produciendo y después les prohibió dar curso a las exportaciones de azúcar, soya y carne que les da ingresos importantes. El Gobierno, entretanto, ha detenido y persigue dirigentes de forma arbitraria.
¿Cómo se puede negociar la fecha para el censo ante semejantes medidas impuestas por el Gobierno?
A pesar de esto, autoridades cruceñas se sentaron a conversar con el Gobierno en un encuentro organizado por éste que llamó «Censo por consenso».
Éste resultó ser un fiasco porque el Gobierno propuso dejar la fecha abierta arguyendo que el censo es un tema técnico, que sin duda, lo es.
La Comisión Interinstitucional de Santa Cruz, rechazó dicha propuesta y planteó que se realice en octubre del próximo año.
Entretanto el Gobierno, sigue enviando a sus grupos de choque a Santa Cruz a provocar enfrentamientos con el pueblo cruceño.
El hecho es que cada día que pasa hay más escasez de alimentos en Santa Cruz. Los supermercados abren día por medio y por horas. El pueblo cruceño, sin embargo, provee de comida a los que realizan el paro.
La situación es compleja porque ni el Gobierno ni los cruceños dan su brazo a torcer y siguen los enfrentamientos.
La violencia no es precisamente un arma conciliadora y no se observa voluntad política por parte del Gobierno para solucionar la situación.
Sin duda el mejor camino es el diálogo, ya que la falta de un acuerdo perjudica a todos los bolivianos. Se espera que próximamente se reanuden las conversaciones.
La realización del censo el año próximo es urgente para aplicarlo al nuevo padrón con el fin de que en los próximos comicios el MAS no se atornille en el poder como lo está hace 17 años.
- Verónica Ormachea es escritora y miembro de la Academia Boliviana de la Lengua, correspondiente de la Real Española