El caos comercial de Trump y el temor a una recesión sacuden los mercados
Las alarmas han saltado tras el desplome del 10% de la bolsa estadounidense tras las últimas decisiones del presidente
Un ciudadano camino frente al mercado de valores de Nueva York
Los mercados estadounidenses acumulan fuertes caídas por la incertidumbre que generan las políticas comerciales de Donald Trump, con Wall Street cerca de una corrección y los inversores refugiándose en bonos ante el temor a una recesión. Los críticos acusan al presidente de conducirse de forma caótica, pero sus aliados sostienen que hay un plan para forzar que el mercado se desinfle porque lo consideran sobrevalorado.
Improvisación o método, lo cierto es que Wall Street sufrió el lunes su peor jornada de 2025, con el índice S&P 500 cayendo un 2,7 % en medio de temores de recesión. El martes, el índice retrocedió otro 1,4 % después de que Trump anunciara un incremento en los aranceles al acero y aluminio provenientes de Canadá, duplicando la subida previamente planificada hasta el 50 %.
Estos aranceles entrarán en vigor, en principio, este 12 de marzo, lo que sin duda afectará a los mercados. Según el presidente, esta decisión responde a medidas tomadas por la provincia canadiense de Ontario tras sus amenazas comerciales.
El desplome de las bolsas continuó lunes y martes, tras la nueva escalada en la guerra comercial del presidente, llevando momentáneamente el martes al mercado bursátil de Estados Unidos a una caída del 10 % desde su récord alcanzado hace solo unas semanas. Ese mismo día, el Dow Jones Industrial Average cayó 678 puntos, o un 1,6 %, y el Nasdaq perdió un 1 %.
La volatilidad se ha convertido en una constante en los mercados financieros a 50 días del regreso de Trump a la Casa Blanca. Los vaivenes han llevado a la administración a desestimar las advertencias de los analistas. Sin embargo, las fluctuaciones responden a diversas decisiones del presidente que no parecen aleatorias: aranceles progresivos —algunos aplazados— a sus socios de libre comercio, despidos masivos en la administración federal y drásticos recortes en el gasto público.
En los últimos ocho días, el S&P 500 ha experimentado variaciones de al menos un 1 % en siete ocasiones, reflejando la incertidumbre sobre cuánto daño está dispuesto a tolerar Trump en la economía con su política comercial.
Empresas como Delta Air Lines y Southwest Airlines ya han advertido sobre un deterioro en la confianza del consumidor, lo que ha afectado las reservas de vuelos y reducido sus previsiones de ingresos.
Castigo a los gigantes tecnológicos
Mientras tanto, los gigantes tecnológicos han sufrido aún más. Tesla ha perdido más del 50 % de su valor desde su pico en diciembre, con una caída acumulada de 800.000 millones de dólares en capitalización de mercado. El lunes sufrió su peor desplome en cinco años, perdiendo un 15 % en un solo día, en medio de la incertidumbre por los aranceles de Trump y el desgaste de su imagen debido a las acciones de Elon Musk en la Casa Blanca.
El Nasdaq, que ya había entrado en corrección la semana pasada, cayó otro 4 % el lunes. Empresas clave como Tesla, Alphabet, Apple y Nvidia sufrieron grandes pérdidas. La magnitud de estas caídas golpeó al mercado en su conjunto, dado el peso que estas compañías tienen en los índices bursátiles.
El desplome bursátil se ha visto impulsado por el temor a una posible recesión, después de que Trump se negara a descartar esa posibilidad en una entrevista con Fox News. «Podría haber un periodo de transición», dijo el presidente al ser preguntado sobre el impacto de su agresiva política arancelaria, una afirmación que ha reiterado en semanas recientes.
En los últimos meses, ha impuesto, suspendido y retomado aranceles contra los principales socios comerciales de Estados Unidos: China, México y Canadá. Estos cambios de rumbo han desorientado a los inversores, que no encuentran señales claras sobre la dirección de la política comercial.
Esto podría afectar la política de tasas de la Reserva Federal. Los inversores apuestan por al menos tres recortes este año, en un intento del banco central por estimular la economía. Sin embargo, la expectativa de estas reducciones no ha sido suficiente para calmar a los mercados, ya que se interpretan como una respuesta a señales preocupantes sobre el crecimiento.
El gobierno de Trump ha insistido en que su política económica sigue generando empleo y crecimiento. Un portavoz de la Casa Blanca, Kush Desai, afirmó el lunes que «la agenda América Primero ha impulsado billones de dólares en inversión y la creación de miles de empleos». También argumentó que las oscilaciones en los mercados obedecen a la naturaleza especulativa de los espíritus animales (la reacción inmediata que provocan en los agentes económicos determinados estímulos hasta que se asimilan) y que lo realmente determinante para el futuro económico es el comportamiento de las empresas y sus decisiones estratégicas.
La Administración Trump no se preocupa
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, advirtió que los inversores podrían estar sobrerreaccionando y perdiendo de vista aspectos clave del debate sobre la economía. Aunque la inflación ha bajado desde su pico de 2022, ha repuntado en los últimos meses, lo que llevó a la Reserva Federal a pausar los recortes de tasas.
Por su parte, el senador Tommy Tuberville minimizó la fuerte caída de los mercados tras la imposición de nuevos aranceles por parte de Trump, argumentando que el mercado bursátil estaba «inflado» y que una corrección era inevitable.
Según Tuberville, el desplome del S&P 500 y del Nasdaq no se debe únicamente a las políticas comerciales de Trump, sino a una sobrevaloración previa de las acciones. Afirmó que la administración del expresidente cuenta con un equipo de expertos en economía y divisas extranjeras que lograrán que la situación termine beneficiando a Estados Unidos. Su postura sugiere que la volatilidad actual es parte de un reajuste natural del mercado y no una señal de deterioro económico.
Sin embargo, los datos recientes han mostrado un deterioro en la confianza empresarial y en el consumo. Economistas de Goldman Sachs elevaron al 20 % la probabilidad de que Estados Unidos entre en recesión en los próximos 12 meses, mientras que JP Morgan Chase situó el riesgo de una recesión global en un 40 %, atribuyéndolo a la incertidumbre generada por las políticas estadounidenses.
Trump no parece dar marcha atrás. Este miércoles entrarán en vigor los nuevos aranceles del 25 % sobre las importaciones de acero y aluminio, el 50 % para Canadá, y el presidente ha amenazado con ampliar las medidas a otros sectores. La volatilidad parece lejos de desaparecer y el mercado sigue sin mostrar señales de estabilidad.