El centro-derecha derrota a Bolsonaro en las municipales de Brasil
El Partido de los Trabajadores, de Lula da Silva, también salió mal parado en los comicios
El centro-derecha asestó una dura derrota al presidente brasileño Jair Bolsonaro en las elecciones municipales del país. La jornada también deparó un golpe al Partido de los Trabajadores (PT) de Lula da Silva. Los dos líderes más importantes del país perdieron en São Paulo y en Río de Janeiro, y en otras capitales clave, como Recife y Porto Alegre.
En São Paulo, la capital económica, fue reelegido el joven socialdemócrata Bruno Covas con 60% de los votos, que se abanderó como el contrapunto al «negacionismo» de Bolsonaro. «Restan pocos días para el negacionismo y el oscurantismo. São Paulo le dijo sí a la ciencia y a la moderación», anunció Covas en su discurso de victoria.
A sus 40 años y tras superar un cáncer de estómago del que se trató despachando la agenda de la alcaldía desde su habitación en el hospital, Covas se destacó en los comicios como una promesa del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), del expresidente Fernando Henrique Cardoso, un grupo que venía debilitado de los confrontos con el PT.
«Es posible hacer política sin odio», afirmó el joven economista, que es nieto de una de las figuras históricas de ese partido, el exgobernador de São Paulo, Bruno Covas. Bruno, que luce un aspecto debilitado tras ocho sesiones de quimioterapia, escondió en la campaña las fotos de hace dos años en las que apoyó a Bolsonaro en su candidatura a la presidencia.
«Es muy temprano para prever (la elección del 2022), pero si el gran derrotado de 2018 fue el centro, el gran derrotado del 2020 fue el radicalismo», dijo refiriéndose a Bolsonaro, pero también a su oponente en la disputa, el filósofo de izquierda, Guilherme Boulos, que es también el principal líder del Movimiento de Trabajadores Sin Techo (MTST).
La derrota de Boulos, sin embargo, tuvo cierto sabor a victoria, pues de un candidato desconocido en el comienzo de la campaña, fue creciendo hasta llegar al segundo puesto y terminar con el 40% de los votos. Tras estas elecciones, Boulos, de 38 años, ha ganado relevancia en la izquierda frente a la falta de nombres del desgastado PT. Su Partido Socialismo y Libertad (PSOL) nació de una disidencia del PT en el primer año de gobierno, tras descubrirse los primeros indicios de corrupción.
En Río de Janeiro, Eduardo Paes, también de centro derecha, derrotó con el 64% de los votos al actual alcalde de la ciudad, Marcelo Crivella, pastor evangélico de la conservadora Iglesia Universal, que contaba con el apoyo de Bolsonaro.
Un dato significativo de estas elecciones fue la abstención. De los 38,3 millones de votantes que fueron convocados para elegir alcaldes en segunda vuelta, el 29% decidió no acudir a las urnas, pese a que la ley brasileña prevé el voto obligatorio. Este alto índice es mayor que el anterior, que llegó al 21%, en parte por la pandemia y un rebrote en el número de casos de Covid-19 en el país, pero también por un desencanto con los políticos.