El día en el que Leopoldo López defendió a Gustavo Petro
En tiempos de crisis, el exalcalde de Chacao se mostró solidario con su homólogo colombiano. Algo que el hoy excandidato presidencial no paga con la misma moneda
Si hay algo que marca a un político es su humanismo, su manera de analizar una situación fuera del sesgo ideológico, respetando los principios básicos de hacer política. Por aquel entonces, en el año 2012, Gustavo Petro se hallaba en un bollo con la Procuraduría General de la Nación, que lo inhabilitó políticamente. Algo que resonó en organismos internacionales que vigilaban la libertad política del país.
Resulta indignante, por si fuera poco, que el senador Petro no se haya solidarizado aun con la causa venezolana, mostrándose por el contrario, “tibio”. Quienes hayan sido arduos espectadores de las campañas para la elección presidencial de Colombia en 2018 sabrán que, en algunos casos, ser tibio significa apoyar un lado indirectamente, ya sea a miedo a represalias de sus seguidores, o algo más. Inevitablemente, la falta de apoyo de Gustavo Petro a Guaidó solo lo hace cómplice de Maduro. Incluso, algunos cipayos del régimen chavista, evidentemente confundidos, ya lo llaman amigo o aliado, como es el caso del fiscal general chavista Tareck William Saab.
Si el senador mostrara indignación al menos por los arrollamientos de manifestantes venezolanos, posiblemente, en el eventual futuro de una Venezuela sin Maduro, este nuevo gobierno, en el que Leopoldo López será partícipe, podría solidarizarse con él ante una mala jugada contra sus derechos políticos, si se vieran afectados.
Los trinos de Leopoldo López: