El PSC gana las elecciones, pero el independentismo amplía su mayoría
Con una altísima abstención, la victoria de Illa resultará estéril en un nuevo Parlament que seguirá controlado por el secesionismo
Cataluña se debatía entre más ‘procés’ o comenzar a pasar página del mismo, y eligió lo primero. Pese a que el PSC ganó las elecciones con claridad (23% de los sufragios y 33 diputados), la suma de ERC, Junts y la CUP (74 actas) amplía la mayoría independentista en el Parlament, y los partidos de Oriol Junqueras y Carles Puigdemont podrán retener el gobierno de la Generalitat si llegan a un acuerdo.
No hay remedio aún para una comunidad que sigue instalada en la fractura, condenada a seguir transitando por el camino de la confrontación y del enfrentamiento, y con un nuevo Parlament incluso más polarizado que el presente con la irrupción de Vox, que irrumpe con estrépito con once diputados.
El desembarco del exministro Salvador Illa como candidato del PSC -el sorpresivo recambio de Miquel Iceta se producía hace apenas un mes y medio- se ha traducido en un innegable tirón hacia arriba del voto socialista. Como anticipaban parte de los sondeos, el PSC ganó, pero al igual que sucedió con Ciudadanos en 2017, su victoria será probablemente estéril.
A no ser que en los próximos días se produzca un giro de guión inesperado, como que Junts por ejemplo renuncie a integrarse como segundo en un gobierno presidido por ERC, Salvador Illa, como hizo Inés Arrimadas tras su victoria en los comicios convocados al amparo del artículo 155, se convertirá en flamante jefe de la oposición.
Con una campaña dirigida de manera clara a recuperar el voto que en 2017 se fugó a Ciudadanos, el PSC pasó de 16 a 33 diputados. Únicamente la infrarrepresentación del votante de la provincia de Barcelona frente a unas Gerona y Lérida primadas hicieron que la cosecha de escaños del PSC no fuese mayor. La fractura política en Cataluña sigue teniendo también una traslación territorial evidente, una división entre voto urbano y rural que en estos comicios se ha acentuado.
Control del Parlament
Pese a la victoria socialista, el independentismo seguirá controlando el Parlament, incluso de manera holgada frente a las estrecheces de su actual mayoría de 70 diputados. De manera muy ajustada, ERC le ganó la partida a Junts, o lo que es lo mismo, Junqueras rebasó finalmente a Puigdemont, logrando por fin, y aunque por los pelos, poco más de un punto de diferencia, el ansiado ‘sorpasso’ de ERC sobre su histórico rival.
Los candidatos vicarios Pere Aragonès y Laura Borràs deberán entenderse para formar gobierno, pero ahora con los republicanos ostentando la presidencia, una situación inédita, y nada cómoda, para los herederos de la antigua Convergència, siempre acostumbrados a tutelar a los republicanos.