El voto femenino, la asignatura pendiente de Podemos en su «revolución de las mujeres»
Podemos tiene ahora nombre de mujer. El cambio de liderazgo, con el mando en plaza de Irene Montero por la baja por paternidad de tres meses de Pablo Iglesias, acentúa el giro feminista en su estrategia. Una apuesta por movilizar electoralmente a las mujeres. El auge del movimiento feminista y las propuestas de partidos como Vox las han situado en el foco de los partidos, conscientes de sus votos son determinantes (representan ya el 51,7% del electorado). Sin embargo, el voto femenino se decanta por el PSOE (20,8%) y prefiere al PP (14,6%) y a Cs (13,3%) ante que a Podemos (6,2%).
La movilización del 8-M, fenómenos como #MeToo, la violencia machista, la irrupción de Vox… La realidad política y social gira en torno a las mujeres. En el imaginario colectivo se tiende a asociar el voto femenino a los partidos de izquierdas. Un pensamiento que los números derriban. PSOE y Podemos aúnan un 27% de éste; frente al 27,9% del bloque PP-Cs, según los datos del CIS de diciembre. Es más, Unidos Podemos figura como la opción menos preferida de las mujeres entre los cuatro grandes partidos. En la «revolución de las mujeres» que proclama Montero, el voto femenino es su asignatura pendiente.
Al margen está Vox. La formación de derecha radical presenta un perfil de votante claramente masculino: por cada mujer hay dos hombres. En concreto, según el CIS, de celebrarse mañana elecciones generales, un 3,6% de españoles se decantaría por la formación de Santiago Abascal, frente a un 1,8% de españolas.
Podemos ni siquiera sería la segunda opción de las mujeres en caso de no votar a su partido predilecto. Ante la pregunta de «¿a qué otro partido votaría?», el 15,2% de las mujeres opta por Cs; el 9,6% por el PSOE; un 9,2% por el PP; y Unidos Podemos se queda como alternativa para un 8,9% de mujeres.
Es más, uno de los datos más llamativos es el obtenido por el partido que lidera Irene Montero en cuanto a simpatía del electorado femenino. Apenas un 1,7% de las mujeres lo escoge cuando el CIS pregunta «¿por qué partido siente usted más simpatía?». Un dato pobre, comparado con el 9,7% de mujeres que elige al PSOE, o el 5,9% que se decanta por el PP. Un 5,5% apela a Cs.
«Los partidos emergentes están más masculinizados que PP y PSOE», resume Andrés Medina, analista de la consultora electoral Public. «Se explica porque tienen un electorado más joven -donde predominan los hombres-, que envejecido -con mayor peso femenino-. Y porque las mujeres tardan más en cambiar, son más conservadoras que los hombres, se lo piensan más».
«Viene un año muy difícil y vamos a tener que llenar las calles y las urnas. Es así. Ni una sola mujer puede quedarse en casa este 2019. Las madres, las abuelas con las nietas en la calle», clamó la semana pasada Irene Montero, en su regreso a la vida política. La formación morada apuesta por el voto femenino como palanca para tratar de frenar su caída electoral.
Como señalan los expertos demoscópicos consultados por este diario, Podemos siempre ha tenido un electorado más masculinizado, como le sucede a Ciudadanos. Eso sí, matizan que en el caso de la formación morada esa brecha se ha reducido en el último trimestre. «La clave es ver si esa dinámica se mantiene o es fruto de la irrupción de Vox».
Los consultores políticos señalan cómo en los últimos años existe una mayor sensibilización hacia la mujer. El feminismo cobra importancia. Sobre todo entre las más jóvenes. Un nicho, consideran, a por el que ha decidido lanzarse Podemos, para tratar de aumentar su masa electoral. Eso sí, Medina advierte del error de «tratar de colectivizar el voto de la mujer. Es un error, no es un colectivo homogéneo. No sería entender que es un movimiento transversal».
En España, según el CIS de octubre de 2018, el 8,5% de los españoles se define ideológicamente como feminista. En dos años, el porcentaje se ha duplicado: un 4,2% en octubre de 2016 frente al 8,5%. Y aumentando la lupa, los datos descifran que el 3,1% de los hombres se consideran feministas, frente al 13,6% de las mujeres.