Miguel Díaz-Canel inició un recorrido por la provincia de Ciego de Ávila con el objetivo de «evaluar las acciones para enfrentar la situación económica y social» y hacer un enésimo llamado a «sacudir la inercia, desterrar el burocratismo y un mayor involucramiento popular en los problemas», informa el diario estatal Granma.
En la reunión con funcionarios del Partido Comunista, Díaz-Canel dijo que en esa provincia había que agilizar la entrega de tierras ociosas a productores y organismos estatales. Estas tierras improductivas alcanzan las 26.000 hectáreas.
Ante ese cuestionamiento, el primer secretario del Partido Comunista en Ciego de Ávila, Liván Izquierdo, prometió que «los organismos del territorio tendrán disponibles sus correspondientes hectáreas de tierra entre los meses de febrero y marzo próximos».
En la reunión, presentaron sus proyecciones para este año las empresas estatales Ceballos y La Cuba, dedicadas a la producción de alimentos, pero el reporte no ofreció detalles de esos planes productivos.
Díaz-Canel, en una de sus recurrentes declaraciones triunfalistas, llamó a »asumir el reto de que sí se puede superar la crisis que vive el país. Tenemos que estar conscientes de que es posible hacerlo (…), porque todos tenemos capacidad para aportar más a la transformación revolucionaria».
El gobernante dijo que los funcionarios debían asumir »en cada decisión un enfoque anticapitalista, que prevalezca siempre la lógica de emancipación socialista», aunque no explicó a los presentes cómo podía asumirse en la práctica esa idea.
Por su parte, el secretario de organización del Comité Central del Partido Comunista, Roberto Morales Ojeda, dijo que «tenemos el compromiso de mejorar el bienestar y la calidad de vida del pueblo, y eliminar progresivamente todo lo que lo impide: inflación, desabastecimiento, calidad de los servicios, devaluación monetaria, corrupción, ilegalidades».
En la visita a Sancti Spíritus, segunda parada del recorrido, en la que la prensa oficialista no reseñó la presencia de Díaz-Canel; fue el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, y Morales Ojeda, quienes presidieron la reunión con los comunistas espirituanos.
En ella, aunque se abordaron cuestiones claves para el cubano común como la manera de aumentar la producción de alimentos, hacer más viviendas y dar mejores servicios; las respuestas de Morales Ojeda a esos problemas fue el «embargo de EE.UU como el principal obstáculo para el desarrollo».
Al tocar el tema de la producción de carne de cerdo, quese encuentra en los niveles más bajos en décadas, en la reunión se dijo que la meta es alcanzar la producción de 2019, con 20.000 toneladas de carne. Pero dicha cifra —si se alcanza— será debido a los créditos que piensa otorgar el Ministerio del Turismo para aumentar la producción, que presumiblemente irá a parar a los hoteles o tiendas en MLC.
Sobre la zafra azucarera en Sancti Spíritus, el panorama es desalentador: un solo central moliendo, del cual el reporte no señala la meta productiva que tiene para cuando termine la actual zafra.
«Tenemos hoy muchas decisiones de Gobierno aprobadas que son de transformaciones profundas, pero algunas demoran en su ejecución. Entonces, hay que revisar al detalle su implementación, impacto y resultado», concluyó Marrero Cruz, pero el reporte no detalló cuáles son esas decisiones, ni tampoco los posibles plazos previstos para cumplirlos.