Encuesta: cubanoamericanos en Miami se alejarían del Partido Republicano si Trump es nominado
Nueva encuesta muestra que muchos votantes cubanoamericanos le tienen aversión a Donald Trump
Donald Trump es un fuerza política que podría impulsar una ruptura decisiva entre los influyentes votantes cubanoamericanos en el condado Miami-Dade y el Partido Republicano, señala una nueva encuesta.
Los cubanoamericanos de Miami le tienen tanta aversión a Trump, y están empezando a aceptar la política de acercamiento hacia Cuba del presidente demócrata Barack Obama, que la probable nominación presidencial de Trump podría promover que este grupo se aleje políticamente del Partido Republicano, según una encuesta compartida con el Miami Herald y realizada por Dario Moreno, un encuestador de Coral Gables y profesor asociado de política en la Universidad Internacional de Florida (FIU).
“Hemos visto cambios demográficos en esta comunidad desde el 2004”, dijo Moreno, a medida que los votantes más jóvenes de origen cubano, y los últimos inmigrantes que han llegado de Cuba, se identifican cada vez más como demócratas o independientes. “El verdadero peligro con Trump, es que va a acelerar este realineamiento en Miami”.
Moreno es republicano y ha realizado sondeos de opinión sobre el senador Marco Rubio y el alcalde del Condado Miami-Dade, Carlos Giménez, aunque el presente estudio no se hizo a nombre de ningún político.
Moreno reconoció su propia opinión contra el candidato presidencial republicano: “No puedo votar por Trump”, dijo. “No voy a votar por Hillary, pero tampoco votaré por Trump”.
Aproximadamente 10% de los encuestados dijeron que no votarían por Trump si gana la nominación. Por lo general, los votantes se niegan a admitir que planean pasar por alto una elección.
“Si usted está en un distrito indeciso y el 10% de los republicanos no van a votar —10% de los cubanoamericanos no van a votar— eso es algo muy peligroso”, dijo Moreno.
De preocupación particular en noviembre para el Partido Republicano local es la contienda para sustituir a Rubio —un escaño importante para que los republicanos conserven su mayoría en el Senado— y también la pelea por el Distrito Congresional 26, que en la actualidad ocupa el representante de Miami Carlos Curbelo.
Moreno encuestó a 400 posibles votantes cubanoamericanos que viven en Miami-Dade entre el 21 y el 23 de abril, y condujo más de las tres cuartas partes de las entrevistas en español. Sus resultados son los mismos de un sondeo nacional que llevó a cabo el mes pasado Latino Decisions, una firma que ha trabajado para Clinton, a nombre de la organización defensora de los emigrantes America’s Voice. Entre otras cosas, la encuesta de Latino concluyó que el 73% de los votantes hispanos de la Florida tienen una opinión “muy desfavorable” de Trump.
El sondeo de opinión de Moreno, cuyo margen de error es de tres puntos porcentuales, llegó a la conclusión que una línea dura sobre la política entre Estados Unidos y Cuba ya no es un pensamiento que unifica a la comunidad cubanoamericana. En su lugar, los cubanoamericanos están divididos acerca del restablecimiento de relaciones diplomáticas, con el 41% a favor y el 52% en contra.
La diferencia está determinada por la edad y el año de llegada a EEUU, según la encuesta. Los cubanos cuyas edades están entre los 18 y los 35 años apoyan de forma abrumadora la política del gobierno de Obama, con el 61% a favor, y el 35% en contra, mientras los cubanos mayores de 75 años se oponen casi por las mismos números, con el 64% en contra y el 30% a favor.
De forma similar, el 59% de los cubanos que llegaron a EEUU después de 1992 apoyan la política, en tanto el 30% se opone. El 71% de los cubanos que llegaron al país antes de 1980 está en contra, y apenas un 21% está a favor. Los cubanoamericanos jóvenes que llevan menos tiempo en EEUU son los que tienen más posibilidades de abandonar el Partido Republicano en las elecciones presidenciales.
Una mayoría relativa de los encuestados —el 49%— respaldó a la demanda por discriminación del alcalde Giménez contra Carnival Corp. cuando la línea de cruceros planeaba viajar a Cuba aunque el gobierno de La Habana había declarado que le prohibiría desembarcar a los cubanoamericanos. (Después el gobierno cubano cambió sus reglamentos). Entre el 30% de las personas que se oponen a la crítica de Giménez son cubanoamericanos que están en contra de cualquier tipo de relación con la isla.
Los políticos locales cubanoamericanos continúan siendo enormemente populares a pesar de su postura de línea dura respecto a Cuba. El alcalde de Miami Tomás Regalado, la representante Ileana Ros-Lehtinen, el ex representante Lincoln Díaz-Balart y Rubio obtuvieron calificaciones de más de 70% entre los cubanoamericanos de Miami-Dade, el único condado de la Florida que Rubio ganó como candidato presidencial. Giménez logró un 59%, pero lo nombraron más personas de las que mencionaron a Regalado. Por su parte, Raquel Regalado, hija de Regalado y miembro de la Junta Escolar de Miami-Dade, se enfrentará a Giménez en las elecciones para la alcaldía condal que tendrán lugar en agosto.
Moreno también quiso conocer la popularidad de celebridades y líderes cívicos y empresariales cubanoamericanos. Los músicos Gloria y Emilio Estefan ocuparon los primeros lugares. Los empresarios —Joe Arriola, Paul Cejas, Armando Codina, Adolfo Henriques, Jorge Pérez y Carlos Saladrigas— terminaron en puestos mucho más bajos que los Estefan y los políticos, lo que sugiere que su influencia en la opinión pública podría ser limitada, aunque algunos están de acuerdo con la política de Obama sobre Cuba.
El público, dijo Moreno, “simplemente no sabe quiénes son”.
Eduardo Padrón, presidente del Miami Dade College (MDC) —mejor conocido entre los cubanoamericanos de más edad— ocupó un lugar más alto que los empresarios, y otro tanto ocurrió con el presidente emérito de la Universidad Internacional de la Florida (FIU) Modesto “Mitch” Maidique, mejor conocido entre los más jóvenes.