Esconder la cola, la nueva estrategia para tapar el desabastecimiento
"Dicen que es para que no se vea molote en la puerta de la tienda, que esa es la orientación que tienen"
Las colas siguen siendo el común denominador para la inmensa mayoría de los cubanos. Cola para el banco, para el mercado, para la farmacia, para todo. Ante cada tienda, una cola, y ahora, según pudo comprobar este diario, la nueva estrategia es disimularlas.
«Ahora la cola la están escondiendo, tres cuadras como mínimo. Pasas y no se ve por ningún lugar, ves la tienda vacía con dos o tres personas y resulta que la cola está al doblar, a 300 metros de distancia», dice a 14ymedio un joven que se encontraba en la línea de espera. «En todas he visto eso, dicen que es para que no se vea molote en la puerta de la tienda. Así están en todas las de la calle Galiano y también las de Reina. Dicen que esa es la orientación que tienen».
«Pasan las patrullas con los reflectores apuntando a los pasillos y las escaleras, buscando gente que hace listas desde la madrugada para organizar la cola»
También cuenta que lleva más de cuatro horas ahí parado «bajo el sol» y que ha perdido las esperanzas de comprar pollo o picadillo. «Llegué a las nueve y media de la mañana y cogí el 36 de la segunda vuelta, pero todo va muy lento. Los primeros 45 demoraron dos horas en entrar y ya es mediodía, no creo que alcance nada de lo que me interesa», lamenta.
Daynier Acosta, vecino de la calle 12 y 25, en El Vedado, contó a este diario que por su calle pasa la policía de noche persiguiendo a los que se dedican a formar colas. «Pasan las patrullas con los reflectores apuntando a los pasillos y las escaleras, buscando gente que hace listas desde la madrugada para organizar la cola».
Según aseguró el primer ministro, Manuel Marrero, se han creado 3.054 grupos integrados por 22.281 personas para perseguir a los coleros, acaparadores y vendedores ilegales de divisas. Puntualizó además que las Fuerzas Armadas Revolucionarias, la Policía y los Comités de Defensa de la Revolución estarán al mando de esta tarea que ya está en marcha pero que comenzó a prepararse desde finales de julio.
Miguel Díaz-Canel dijo que el Gobierno está actuando «contra las personas que hacen la cola para lucrar, promoviendo la actividad económica ilícita», una declaración centrada en convencer de que no se actúa contra ancianos o personas humildes, sino contra «los pillos, los que se aprovechan de los demás».
«Aquí en el pasillo de mi edificio se ponen de madrugada, lo veo desde hace meses», continúa Daynier Acosta. «Pero debo aclarar, hay de todo: veo gente que ciertamente marca para otros y luego les cobran dos o tres CUC y veo también personas que marcan para ellos y su familia y así garantizan poder comprar lo que necesitan. Si marcas normal, al momento de abrir la tienda es muy posible que no alcances nada y te vayas con las manos vacías. Nadie quiere perder su tiempo».