Evo Morales no es el padre de “el milagro boliviano”, dice ex presidente Quiroga

El desempeño económico de Bolivia es impresionante y el que haya ocurrido bajo el gobierno populista de Evo Morales ha llevado a más de un académico a rascarse la cabeza y a querer examinar qué es lo que el gobernante izquierdista ha estado haciendo en su país.

Pero las causas del denominado “Milagro Boliviano” fueron gestadas antes de que Morales llegara al poder, dijo el ex presidente Jorge Quiroga al advertir que lo único que ha hecho el gobierno socialista es cosechar lo que otros ya habían sembrado.

Hablando en una entrevista con el Nuevo Herald, Quiroga explicó que el auge económico por el que ha atravesado Bolivia en los últimos años se debe principalmente al hecho de que el país ha multiplicado por cinco los volúmenes de gas que exporta, en una era en que una voraz demanda china por materias primas también ha multiplicado por cinco el precio del combustible.

“Pero lo que el gobierno nunca te dice es que los proyectos y los desarrollos que permitieron a Bolivia estar en condiciones de aprovechar esa coyuntura, de vender esos volúmenes a mayor precio, vienen todos de gestiones anteriores a las de Evo Morales”, dijo Quiroga.

Y lo que es peor, Morales y sus seguidores se opusieron a los mismos proyectos que ahora les benefician, cuando ellos estaban en la oposición.

“Ese es el secreto mejor guardado de Bolivia, que Evo Morales y sus seguidores se opusieron a todo esto. Se opusieron al desarrollo de campos, se opusieron a construir el gasoducto con Brasil, se opusieron al contrato con Argentina, se opusieron al gasoducto interno”, comentó Quiroga.

También se opusieron a la aprobación de una ley que permitía incrementar el cobro de impuestos sobre las ventas de gas cuando el combustible subía de precio.

Quiroga, quien gobernó Bolivia entre agosto del 2001 y agosto del 2002, opinó que no es muy apropiado que el gobierno de Morales esté hoy en día divulgando por el mundo que es el autor del auge económico boliviano.

“Es como una persona que se opone a un matrimonio, que bloquea el acceso a la iglesia el día de las nupcias, que dinamita el hospital el día del parto, y que luego, cuando el bebe nace lindo y rebosante, sale a anunciar que a él le corresponde ser el padrino”, comentó.

En su opinión, al gobierno sólo se le puede atribuir haber “abierto las válvulas de la tubería por las que pasa el gas”.

Las palabras de Quiroga vienen en respuesta a una gira internacional emprendida por funcionarios de alto rango del gobierno de Morales para explicar el milagro boliviano, marcado por un crecimiento económico promedio entre el 2005 y el 2014 de 5.1 por ciento del PIB.

En declaraciones recientes brindadas a Radio France Internacional, el ministro de Economía Luis Alberto Arce Catacora aseguró que el fenómeno se debe a “la implementación del nuevo modelo económico social comunitario productivo”, en el que el Estado “participa activamente en la resolución de problemas económicos y sociales”.

Bajo ese esquema, el Estado se apropia del excedente económico proveniente de los recursos naturales y luego los redistribuye entre la sociedad, para fomentar un mayor consumo y estimular la actividad económica.

Ese modelo no solo ha permitido reducir los índices de pobreza y de desigualdad en el país, sino que también le está permitiendo a Bolivia construir las bases para la “producción industrializada de estos recursos naturales”, aseguró Arce en la entrevista.

Quiroga, no obstante, reiteró que el gobierno en realidad ha hecho muy poco más allá de beneficiarse de la enorme demanda mundial de commodities propiciada por China, que llevó a la mayoría de las economías sudamericanas a entrar en una década dorada.

Bolivia no fue la excepción. Antes de iniciarse el auge en el 2005, el país apenas exportaba $1,200 millones al año, monto que se había disparado a $12,000 millones en el 2014, gracias a las obras emprendidas antes de que Morales llegara al poder.

Los buenos resultados en la industria del gas, y también de la minería, terminaron multiplicando por ocho los ingresos fiscales, lo que le ha permitido a Morales aplicar medidas que estimulan el consumo.

No obstante, las cosas ya han comenzado a cambiar, y el país enfrenta pronósticos de que los precios del gas comenzarán a bajar, tal como ha sucedido con el petróleo.

Es una situación que no se va a producir de inmediato, porque los precios del gas suelen mostrar una demora de varios meses antes de comenzar a imitar los del crudo, pero ya han comenzado a descender, dijo.

Y eso terminará impactando significativamente a la economía de Bolivia.

“No va a ser la catástrofe de Venezuela, pero va a haber menos ingresos y van a comenzar a presentarse algunos problemas”, enfatizó.