Iván Duque advierte que podría expulsar a diplomáticos cubanos de Colombia por injerencia
'Seremos implacables con quienes pretenden tratar de interferir en el sano desarrollo del curso institucional colombiano', dice.
El presidente de Colombia, Iván Duque, amenazó con expulsar a diplomáticos cubanos que realizan tareas de interferencia en el país sudamericano.
Las declaraciones de Duque se produjeron a raíz de la publicación de un informe sobre la existencia de un plan de La Habana para interferir a favor de la izquierda en las elecciones presidenciales del próximo año.
El mandatario dijo que si su Gobierno detecta a diplomáticos que actúen contrario al espíritu de la Convención de Viena sobre las relaciones internacionales, procederá a solicitar su expulsión, en concordancia con esa misma convención, de acuerdo con el despacho de AP.
«Creo que esto es muy importante para que nosotros entendamos que en nuestro territorio: bienvenidos todos los diplomáticos que vengan a fortalecer los lazos, pero también seremos claros, seremos implacables y contundentes con quienes pretenden en el ejercicio de sus funciones diplomáticas, venir a nuestro país a tratar de interferir en el sano desarrollo del curso institucional colombiano», agregó Duque.
«Es un mensaje general para que no nos circunscribamos a casos puntuales. Con esto doy la línea y he dado claridad sobre cuál es la política de nuestro Gobierno», puntualizó.
«No permitiremos que en nuestro país tengan presencia funcionarios que salgan de sus competencias reguladas por la Convención de Viena sobre las relaciones entre los Estados. En virtud de eso mantendremos el ojo siempre avizor, de presentarse esas conductas las manejemos con claridad y contundencia con el Estado que corresponda», concluyó el presidente.
Según el informe publicado por la revista Semana, La Habana ejecuta una estrategia de injerencia en Colombia a través de la orientación de cubanos con cobertura diplomática en organizaciones sociales solidarias, la infiltración de programas de cooperación con autoridades locales y su financiamiento por medio del grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN), cuya cúpula está en La Habana.
La preocupación de fondo, según este documento, radica en la posibilidad de que la interferencia del eje Cuba-Rusia-Venezuela termine siendo determinante en los comicios que se celebrarán en Ecuador, Perú, Chile y Colombia para favorecer a la izquierda, que en los últimos años ha venido perdiendo terreno político en el continente.
Uno de los actores principales dentro de esa estrategia sería el embajador de Cuba en Bogotá, José Luis Ponce Caraballo, en el cargo desde el anterior Gobierno del presidente Juan Manuel Santos, aseguró el reporte de la revista colombiana.
En el informe se asegura que Ponce Caraballo fue expulsado de Estados Unidos por espionaje el 19 de agosto de 1996.
Duque insistió el domingo durante un acto en recordación de las víctimas del ataque a la Escuela de Cadetes de Policía en Santander, que hace dos años dejó 22 muertos, y cuya ejecución se adjudicó el ELN, que su Gobierno no dejará de exigir la extradición de los cabecillas del grupo, pedido al que La Habana se ha opuesto en reiteradas ocasiones.
«Qué cobardes fueron los que pretendieron doblegar al país con ese acto terrorista. Seguimos buscando a los responsables que faltan y no cesaremos en pedir extradiciones, porque en el espíritu internacional nadie puede dar protección a quienes comenten estos execrables hechos», escribió el presidente en su perfil de Twitter.
Semana destacó que mientras Bogotá está en alerta y empieza a sentir desconfianza en la diplomacia cubana presente en Colombia, en las últimas horas se conoció un comunicado de los exnegociadores Humberto de la Calle y Sergio Jaramillo en el que le agradecen al Gobierno de Cuba su papel en el proceso de paz con las FARC.
A raíz de un pedido realizado por el Centro Democrático para que el Gobierno colombiano revise las relaciones con La Habana, luego de la decisión de Trump de incluirlos en una lista de naciones que apoyan al terrorismo, de la Calle y Jaramillo señalaron: «Estamos obligados a reconocer y a agradecer el espíritu generoso y el profesionalismo que desplegó Cuba a favor de la paz de Colombia».
Ambos cuestionaron que Duque haya pedido en extradición a los líderes del ELN que están en la Isla y lo calificaron como un «despropósito».
