José Hernández: 4F 1992 – 25 años de traición, impunidad, abuso y crimen

Febrero en Venezuela tiene sus historias. En el segundo mes del año ocurrió el 12 de febrero de 1814 cuando se produce la batalla en la Victoria, donde José Félix Rivas junto a un ejército de jóvenes seminaristas, logra contener al ejército realista de José Tomás Boves, que lo superaba en hombres, armas, barbarie y experiencia. Desde 1947 se conmemora en Venezuela el Día de la Juventud por la actuación de aquellos patriotas.

En febrero de 1928 los estudiantes de la Universidad Central de Venezuela aprovechan el carnaval para hacer la protestas más fuertes contra la dictadura de Juan Vicente Gómez, encabezadas por la Unión Nacional de Estudiantes (UNE) de donde terminan surgiendo, Acción Democrática, la Unión Republicana Democrática, el Partido Comunista de Venezuela y COPEI. El movimiento estudiantil del 28 como se le conoce, es donde se inicia la que será la era democrática más larga, productiva y estable de la historia de Venezuela.

El 14 de febrero de 1936, después de días de protestas cívicas por mayores libertades públicas, tras la muerte de Gómez, se producen las mayores manifestaciones de protesta y el vil asesinato de inocentes, por lo que el gobierno de López Contreras tuvo que anunciar medidas de apertura, en el conocido programa de Febrero.

El 18 de febrero de 1983, (el viernes negro) se anuncian fuertes medidas económicas, como la devaluación del bolívar, por primera vez en 25 años, la divisa pasa de Bs 4,30 a 6 en el cambio controlado y a 10 en el cambio libre y se inicia el primer Régimen de Cambio Diferencial. Cosa que ha venido mutando a lo que es hoy cambio triple y una devaluación del bolívar de más del 100.000 % (cien mil por ciento).

El 27 de febrero de 1989, se produce un movimiento anárquico donde en algunas partes de Caracas y algunos puntos del interior, el pueblo en protesta se lanza a saquear movido por el alza de la gasolina y de los precios del transporte público.

El 4F de 1992 de la traición a la impunidad

El 4 de febrero, traicionando a su juramento como militares una logia de oficiales da un golpe de estado. Actuando con premeditación, alevosía y nocturnidad, el teniente coronel Hugo Chávez, asume el liderazgo del complot y se hace responsable de la situación que le falló ese día y terminó llevando lo a la presidencia en 1999.

Aquella madrugada, 36 venezolanos fueron asesinados en las escaramuzas y quien reconociera la autoría y responsabilidad de lo ocurrido siete años después era juramentado como presidente de Venezuela, habiendo tenido una breve y bien mantenida temporada de 25 meses en la cárcel, de donde salió sobreseído y sin pagar por ninguno de los crímenes reconocidos por él.

Higo Chávez y sus complotados terminaron demoliendo el período de mayor crecimiento de la historia de Venezuela; cuando más venezolanos accedieron a la clase media. Cuando más ciudadanos se educaron en las universidades públicas y privadas. Cuando más empresas se crearon en el país. Es verdad que faltaban muchas cosas y que la mitad de la población vivía en ranchos y no tenía acceso al agua potable, pero también hay que reconocer que la República Civil (1958-1998) ha sido el período más estable y de mayor crecimiento en Venezuela.

Se acabó la “paz”

El 4F se inicia un periodo histórico, donde se ponen de moda el abuso, la impunidad y las malas maneras iniciando la transformación del pensamiento y cultura política del venezolano.

En 1999 el petróleo a $ 7 por barril, no presagiaba un buen futuro. Parecía que iba a ser el fin de la dependencia de los venezolanos de la renta petrolera. Cosa que intentó y que iba en buen camino en el gobierno de Carlos Andrés Pérez que terminó siendo víctima del golpe de Estado.

Para 1978 Venezuela tenía un ingreso per cápita más alto que Canadá y por 50 años la economía había crecido a un promedio de 5,5% anual, un crecimiento mayor que el de la China de los últimos 20 años. Hoy Venezuela ocupa el último lugar del hemisferio junto con Haití, Honduras y Nicaragua.

El martes 4 de febrero de 1992, Venezuela amaneció con un golpe de Estado. Y el “comandante” Chávez, su traje de faena, su boina roja y un presidente Carlos Andrés Pérez con apenas dos puntos de popularidad, no presagiaban nada bueno. Desde aquel febrero el disfraz de militar de tela moteada pasó a ser el disfraz que se agotaba en el país. El ¡Viva Chávez! se volvió un mito.

La rebelión del 4F no fue fulminante pero fue letal, se fracturó la estructura del gobierno democrático y alternativo. Pero los alzados tuvieron que recurrir al voto para poder acceder al poder. Los alzamientos, los golpes y las escaramuzas no bastaron y en 1998 fueron a elecciones y las ganaron.

25 años de “robolución” una tiranía corrupta y perversa

Lo que arrancó aquella madrugada del 4F de 1992 ha terminado llegando a la culminación de lo que procuraba: la instalación final de una tiranía corrupta y perversa. La lucha contra la corrupción y los privilegios ha devenido en el atornillamiento de una banda dirigida desde Miraflores.

En este 25 aniversario de la revolución:

• Caracas es ejemplo de hambre, inflación, asesinatos a bala, corrupción en una ciudad anarquizada donde sus autoridades electas son puestas en la cárcel sin razón.
• El «Por Ahora» se convirtió en un “para siempre”, que ha procurado invadir a otras naciones en el mundo.
• Con la pomposa idea de “Democracia Participativa” se generó una CELAC y una UNASUR, donde los dictadores se revisan los ombligos, mientras sus pueblos mueren de hambre y enfermedades.
• Los militares venezolanos han sido cubanizados, pero no por los valiosos ritmos de Celia, La Sonora Matancera o Beny Moré, sino por la monarquía de los hermanos Castro que han llegado a la decadencia de retirarse como dictadores que mueren en sus camas.

• Aquel 4F de 1992 nos dio a Chávez, el farsante, eterno anfitrión de un reality show que nos redujo como nación; genial en la guerra mediática, pero insulso a la hora de administrar la hacienda pública. Incapaz de dar libertad, vida y posibilidades de ser feliz a nadie.

• El pueblo que hacía su destino con el voto, perdió el derecho a votar que fue secuestrado por una banda que se niega a perder sus canonjías.

• La destrucción de todo lo venezolano ha sido tan bestial que la nación no ha podido regenerarse.

• Estos 25 años han degenerado en una incapacidad manifiesta de todos a lo gregario, a la unidad. Venezuela es hoy un país segregado y en diáspora.

Extirpar el mal

En el marco de estos 25 años del 4F, los venezolanos demócratas deberíamos:

• Rechazar los honores a militares, que no han debido ir nunca en contra de Venezuela y van contra la constitución.

• Protestar contra la peor dictadura de América.

• Repudiar la esencia del 4F, la impunidad, la corrupción y el abuso.

• Abrir un debate nacional sobre las acciones necesarias para hacer la nueva Venezuela, democrática, pacífica, tolerante, respetuosa, inclusiva, compasiva, feliz y creciente.
• Cambiar.