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La campaña presidencial de Maduro tiene su American Idol

El show presenta cada domingo temas musicales en apoyo a Maduro, que busca un nuevo mandato que lo proyectaría a 18 años en el poder

campaña de Maduro
Foto: AFP

 

Un dúo canta y baila entre parpadeantes luces de colores y llamaradas de fuego en un reality show al estilo de American Idol en una televisora estatal en Venezuela. ¿El premio? Participar en la campaña de Nicolás Maduro por la reelección.

«Estamos del lado correcto de la historia / y juntos, con la verdad, vamos rumbo a la victoria», canta Osiys Aranzazu al ritmo de merengue. «Nicolás Maduro, nuestro presidente / Hombre solidario que marca los precedentes / Leal y valiente, social y consecuente, dando respuesta inmediata a toda la gente», contrapuntea, con versos de rap, José Rebolledo.

Concursan con la canción ‘Rumbo a la Victoria’ en el programa Factor M (la ‘M’ hace referencia a Maduro); lanzado el 28 de abril en la señal de la televisión estatal TVES, uno de los canales de la maquinaria de medios de comunicación públicos, puesta al servicio de la campaña del mandatario de cara a las elecciones presidenciales del 28 de julio.

El show presenta cada domingo temas musicales en apoyo a Maduro, que busca un nuevo mandato que lo proyectaría a 18 años en el poder. Seis de 35 canciones en competencia serán escogidas en una final, el 15 de junio, para ser ‘jingles’ de su campaña.

«Cada vez más y más artistas quieren demostrar su apoyo a nuestro presidente», clama el animador de Factor M, Winston Vallenilla.

La campaña presidencial de Maduro tiene su ‘American Idol’

 

La presentación de Osiys y José -activistas del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV)- es evaluada por un jurado integrado por artistas vinculados con Maduro y funcionarios.

«Los veo llegando al 28 de julio con el presidente Nicolás Maduro», les dice Antonio ‘El Potro’ Álvarez, exbeisbolista, cantante de reguetón y exministro del Deporte, uno de los miembros del jurado, en el que rotan invitados especiales como el cantante dominicano Bonny Cepeda.

No hay críticas: no hay en el jurado un Simon Cowell, el típico «villano» de reality show que suelta un comentario cargado de ironía por una mala actuación. Todo son elogios a los concursantes… y a Maduro.

Es la tónica del show, con canciones con títulos como ‘Maduro es el futuro’ y ritmos que abarcan desde géneros bailables caribeños. Tales como salsa o merengue hasta música folclórica venezolana.

«Monopolio»

 

La campaña empieza formalmente el 4 de julio, pero Maduro siempre está en modo electoral.

La estatal Venezolana de Televisión (VTV) transmite en vivo cada mitin del mandatario y en sus noticiarios lo anuncian con fanfarria, con un «¡vamos Nico!» -usado en viejas campañas- como música de fondo. En los cortes comerciales presenta además capítulos de Superbigote, dibujo animado de propaganda que muestra a Maduro como un superhéroe con capa a lo Superman que combate a monstruos enviados por Estados Unidos.

«Acá lo grave es que uno ya ni se extraña, por más disparatado que parezca», comenta a la AFP Ignacio Ávalos, director de la ONG Observatorio Electoral Venezolano, dedicada al monitoreo de elecciones en este país. «Hay un monopolio en el uso de los medios de comunicación públicos, con una programación donde no hay cabida para nada que no sea en favor del gobierno».

Más de 400 periódicos, radios y televisoras privadas han cerrado, en tanto, en más de dos décadas de gobiernos chavistas; incluida la emblemática televisora RCTV, cuya señal fue sustituida por TVES en 2007.

Esposa de Alex Saab produce Factor M

 

Gran parte de los medios nacionales sobrevivientes han sido comprados por empresarios próximos al chavismo u optado por la autocensura para evitar represalias; mientras cadenas extranjeras como CNN en Español o la Deutsche Welle (DW) salieron del aire en cableoperadoras.

El aparato estatal de propaganda muestra a un Maduro jovial, dicharachero, «protector del pueblo»; al tiempo que su administración es blanco de acusaciones de violaciones de derechos humanos. Así como de poner obstáculos a la oposición para participar en las elecciones.

Factor M es producido por la italiana Camila Fabri, esposa del empresario colombiano Alex Saab. Este es un contratista del gobierno liberado por Estados Unidos en un intercambio de prisioneros con Venezuela, cuando era enjuiciado en Florida por cargos de lavado de dinero.

Los concursantes, un día después del episodio en el que participan, se presentan en el programa de Maduro en VTV. «Buen artista, buen cantante, buen bailarín (…), te felicito», le dice el mandatario a uno de ellos. «¡No se pierdan Factor M!».

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