La popularidad del presidente Trump se desploma hasta el 33 por ciento
La mayoría de las empresas encuestadoras coinciden en señalar en que Trump tiene unos niveles de apoyo históricamente bajos si se tiene en cuenta que apenas acaba de empezar un mandato que debe durar cuatro años.
Solo un 33 por ciento de los votantes de Estados Unidos aprueban la labor de su presidente, Donald Trump, según un sondeo de la Universidad de Quinnipiac que marca niveles récord tanto en aprobación como en desaprobación del mandatario norteamericano.
Según el sondeo, elaborado a partir de 1.125 entrevistas, un 61 por ciento de las personas encuestadas desaprueban la gestión de Trump, que llegó al poder el 20 de enero. Un 55 por ciento ven de forma especialmente negativa su labor, salpicada durante estos meses por todo tipo de polémicas políticas y personales.
Las cifras esconden una evidente división en función de las simpatías por cada uno de los dos grandes partidos, si bien el nivel de republicanos que apoya a Trump ha pasado en un mes del 84 al 76 por ciento. Alrededor de un 17 por ciento de los seguidores del Partido Republicano critican al actual inquilino de la Casa Blanca.
Trump suspende en la mayoría de las cualidades analizadas aunque aprueba, con un 55 por ciento, en cuestión de inteligencia. Un 62 por ciento de los entrevistados consideran que el mandatario no es sincero, un 63 por ciento creen que no tiene capacidad de liderazgo y un 59 por ciento piensa que no se preocupa por el ciudadano medio.
Por materias políticos, Trump recibe su mejor valoración en cuestión de lucha contra el terrorismo, con un nivel de apoyo del 49 por ciento, dos puntos por encima del de desaprobación. Un 65 reprocha su gestión de la sanidad, un 59 por ciento sus políticas migratorias, un 52 por ciento su labor económica y un 59 por ciento su política exterior, según la encuesta.
La mayoría de las empresas encuestadoras coinciden en señalar en que Trump tiene unos niveles de apoyo históricamente bajos si se tiene en cuenta que apenas acaba de empezar un mandato que debe durar cuatro años.