Las dramáticas cifras que demuestran el declive del Frente Amplio
Desde el 2017 el Frente Amplio ha perdido 5 partidos políticos, 7 representantes en la Cámara de Diputados y más de 10 mil militantes, principalmente de las filas de Revolución Democrática. Hasta el momento no tienen candidato presidencial, ya que para inscribir a Gabriel Boric (CS) necesitarían 24 mil firmas de aquí a agosto. Además, el panorama electoral para las parlamentarias 2021 no es alentador. El diputado y experto electoral Pepe Auth proyecta que “podrían irse a la mitad de lo que eligieron el 2017”.
Esta semana se hizo oficial la entrada a la Cámara de Diputados de Marcela Sandoval (RD), quien juró ante el hemiciclo en reemplazo de Renato Garín, diputado que renunció a su puesto para competir por un cupo en la convención constitucional. Revolución Democrática, uno de los 3 partidos que componen el bloque del Frente Amplio, decidió realizar dos consultas internas entre sus militantes para priorizar la decisión del territorio, lo que finalmente no se cumplió porque, según dijeron, no eran vinculantes.
En la primera consulta, realizada en enero de este año, solo 20 personas votaron de un total de 100 habilitados en el distrito 14. Ninguno de ellos lo hizo por Sandoval, sino que fue el militante Renato Pizarro quien se impuso con 11 votos y Paz Gajardo obtuvo el segundo lugar con 6 preferencias. Sin embargo, el partido prohibió la participación de hombres y realizó una segunda consulta en febrero, donde los participantes fueron 37 de 100 habilitados. Gajardo obtuvo 21 votos y fue la ganadora, mientras que Marcela Sandoval, vicepresidenta del partido, tuvo 16. A pesar de ambas derrotas, el Consejo Político Nacional de RD optó por Sandoval para tomar la vacante, lo que fue criticado ampliamente, incluso por el mismo Garín.
Esc 1. Territorio prioriza a candidato hombre
Esc 2. RD prohíbe participación de hombres
Esc 3. Territorio prioriza a Paz Gajardo
Esc 4. Partido elige a Marcela Sandoval quien en la primera priorización tuvo cero votos y luego perdió contra Gajardo
¿Cómo se llama la película? pic.twitter.com/nnIr1gC7js
— Renato Garin a la #ConvenciónConstitucional (@RenatoGarinG) February 17, 2021
Así partió el año el Frente Amplio que buscaba superar el trago amargo que pasaron a fines del 2020 cuando el Partido Liberal oficializó su salida de la coalición, sumándose a la renuncia de los diputados Natalia Castillo, Pablo Vidal (ambos de RD) y Patricio Rosas ( de Unir). De hecho, el 2019 tampoco fue un año amable con el Frente Amplio y su declive se demuestra con hechos y cifras claras.
Cuando nacieron explosivamente el 2017 contaban con 14 colectividades: 7 partidos políticos legales y otros 7 movimientos. Fue un año que estuvo marcado por su éxito electoral tanto en la primera vuelta presidencial con Beatriz Sánchez, como en las elecciones parlamentarias donde lograron 20 diputados y 1 senador.
Los problemas internos partieron el 2019 para el conglomerado de izquierda cuando el Partido Liberal, Revolución Democrática (RD), el Partido Comunes y el diputado Gabriel Boric (CS) firmaron el Acuerdo por la Paz y una nueva Constitución del 15 de noviembre. Días después de la firma renunciaron del bloque 5 partidos: Ecologista Verde, Movimiento Democrático Popular, Partido Igualdad, Partido Pirata y el Partido Humanista.
Así la colectividad quedaba conformada por 3 partidos políticos -Revolución Democrática, Convergencia Social y Comunes- más 2 movimientos, Unir, de Lorena Fries, y Fuerza Común liderado por Fernando Atria. Esto se reflejó directamente en los parlamentarios del bloque, ya que pasaron de tener 20 representantes en la Cámara de Diputados a 13.
Me ha sorprendido la escasísima existencia real de RD reflejada en 3.500 personas votando a distancia en la elección interna, 700 personas votando a distancia la política de alianzas, 20 personas primero y 30 personas después votando para elegir candidatos a diputados”, señala el diputado y experto electoral Pepe Auth a El Líbero.
A la renuncia de dichos partidos se sumó la fuga de militantes. Desde el 18-O quien lidera las dimisiones es Revolución Democrática. Desde el 2018, cuando se posicionaba como la colectividad con más militantes inscritos, con un padrón de 42.369, ha perdido 10.893 y actualmente tiene poco menos de 31.500 inscritos. Al 31 de enero de 2021, según cifras del Servel, Convergencia Social tiene 9.243 inscritos y Comunes 13.668, sumando unos 54.387 militantes del Frente Amplio, versus los 80.800 del Partido Comunista o los 118.000 del Socialista.
El cientista político, Kenneth Bunker, señaló a El Líbero que la razón podría estar en que “muchos de los militantes de RD que han renunciado lo han hecho porque no están contentos con la directiva del partido, con este nuevo giro a la izquierda. Ellos se sumaron al partido para cumplir un objetivo que es bastante distinto al que se busca cumplir hoy día, un partido mucho más político que tiene pocas raíces en la ciudadanía”.
La baja de miembros en sus filas se ha visto reflejada en su poca capacidad de despliegue y de convocatoria territorial para las elecciones internas. En Revolución Democrática lo han vivido en carne propia. A la última consulta realizada en febrero donde participaron 37 de 100 habilitados, se suma la de diciembre del 2020 para definir sus alianzas electorales para la Convención Constitucional. Fueron 795 los militantes que votaron en esa consulta interna realizada de manera digital durante sábado y domingo. Hasta el 31 de octubre, RD contaba con 36.757 militantes, por lo que los 795 votos representan solo un 2% de su padrón total. De ellos, un 67% optó por pactar con Chile Digno (Partido Comunista y Federación Regionalista Verde Social), confirmando el giro del partido presidido por Catalina Pérez a la izquierda.
Las cifras de participación demuestran de cuerpo y alma la crisis que está el Frente Amplio”, comenta el director de Criteria Research, Cristián Valdivieso.
Antes, en enero de 2019, hicieron elecciones para definir a la directiva del partido. En esos comicios, donde Catalina Pérez se impuso sobre Javiera Parada, hubo 3.502 votos válidamente emitidos, representando un poco más del 8% del padrón total cercano a los 42 mil militantes de entonces.
Según el diputado y experto electoral, Pepe Auth, “uno habría esperado que en partidos nuevos como RD, donde la inscripción de militantes está fresca en el tiempo, hubiera una propensión mayor a votar”. “Me ha sorprendido la escasísima existencia real de RD reflejada en 3.500 personas votando a distancia en la elección interna, 700 personas votando a distancia la política de alianzas, 20 personas primero y 30 personas después votando para elegir candidatos a diputados”, agrega.
Por su parte, el director de Criteria Research, Cristián Valdivieso, señala: “Las cifras de participación demuestran de cuerpo y alma la crisis que está el Frente Amplio”. Agrega el experto: “La poca consistencia que ha tenido el FA en mantener una propuesta específica y particularmente lo que le ha pasado a RD donde finalmente se ha demostrado que en los hechos había poca densidad política, ideológica y poco compromiso militante”.
Y sostiene que “lo que partió como algo voluntarista, entusiasta y buena onda, con ganas de cambiar las cosas no terminó aglutinando o desarrollando un proyecto político que tuviera fuerza y contenido para proyectarse a largo plazo”.
Mientras, las elecciones internas de Convergencia Social han sido algo más auspiciosas. En la primera de ellas realizada el 2017 votaban para definir la directiva que encabezaría su proceso de constitución como partido. Se impuso Gael Yeomans con un 54% de los votos en unos comicios que participaron 2.088 personas de 2.580 habilitados.
En agosto del 2020 volvieron a convocar a una consulta interna para elegir a su líder. En la elección que dio por ganadora a Alondra Arellano con un 52% de las preferencias, participaron 2.400 militantes lo que representa sobre un 25% del padrón total de CS.
Las razones por las que el Frente Amplio está inserto en una crisis que podría repercutir en las siguientes discusiones importantes a nivel país, sobre todo en un año marcado por lo electoral, se dividen en 4 según los expertos.
Auth y Valdivieso concuerdan en que la posición del FA de noviembre de 2017 es completamente distinta a la que tienen ahora y apuntan principalmente a que ya no son la novedad.
“En 2017 eran la alternativa de recambio frente al descontento o al agotamiento de la coalición de centro izquierda. Ya no son algo nuevo y ese es el dato mayor. Hoy tienen varios años de presencia parlamentaria y ya se sabe qué piensan”, plantea Auth.
Valdivieso sostiene que “no ser novedad podría haber sido una fortaleza si es que hubieran tenido aplomo o buenas estructuras que les dieran experiencia”. De acuerdo al director de Criteria, “lo que ha habido no solo no es la novedad, sino que ha devenido en la sensación de que el FA fue una promesa que no terminó de concretarse y terminó siendo percibida más bien como una coalición eminentemente electoral y no muy distinta de la Nueva Mayoría o la ex Concertación”.
De hecho, asegura que la “energía social del cambio” de “hacer las cosas distinto o desafiar a las élites políticas se trasladó hoy día a un eje más de izquierda que tiene que ver con el PC, Daniel Jadue y Pamela Jiles”
Auth menciona que “el FA ya no es tan amplio como era en noviembre del 2017”, su principal característica. Indica que la salida de varios liderazgos importantes, como fue el de Pamela Jiles provocan que “el FA represente mucho menos”.
Ambos coinciden en un factor importante: la falta de candidato presidencial. Según el diputado, “el 2017 se beneficiaron de la fortaleza de su candidatura presidencial por ser simultáneas a la parlamentaria”. “Buena parte de los votantes de Beatriz Sánchez optó en lo parlamentario por algún candidato de su lista, por poco conocido que fuese”, dice Auth.
Advierte que al no tener candidatura presidencial, “si terminan plegándose a la candidatura de Jadue, buena parte de esa votación se la va a llevar el PC y no las candidaturas del FA”.
De ahí, la necesidad del Frente Amplio de tener una candidatura propia, levantar cabeza y dejar atrás las cifras negativas. Distintos miembros de la colectividad han apuntado al diputado Gabriel Boric (CS), de hecho, la presidenta de su partido, Alondra Arellano, se lo pidió directamente, pero el camino no sería fácil.
La ley establece que las declaraciones de candidaturas presidenciales solo podrán ser declaradas por los partidos constituidos en todas las regiones del país, lo que no es el caso de Convergencia Social, o acreditando una cantidad total de afiliados no inferior al 0,5% del total de sufragios emitidos en la elección anterior de diputados, equivalente a 34.000 afiliados. Según las cifras del Servel, CS tiene casi 10 mil afiliados, por lo que tendría que inscribir de aquí a mayo o agosto, en caso de ir directo a primera vuelta, cerca de 24 mil nuevos militantes para inscribir a Boric.
Valdivieso considera que “la figura de Gabriel Boric sale del sombrero producto de no haber encontrado alguien que sea más transversal al FA”. Asegura que “Boric no convoca tan ampliamente como Sánchez, pero en términos ideológicos es una figura más clara y nítida, capaz de expresar la propuesta política del FA con más capacidad”.
“Lo más probable es que no le vaya bien, pero quizás a través de la figura de Boric el Frente Amplio tiene buenas razones para perder, en el sentido de que puede ser capaz de instalar una nueva conversación y mirada política que figuras como Sánchez no fueron capaces de instalar”, agrega.
Panorama parlamentario poco alentador
Pepe Auth, quien se caracteriza por realizar proyecciones electorales, comenta: “El Frente Amplio no tiene ninguna posibilidad de repetir la performance que logró en noviembre del 2017”. Es más, señala que “va a obtener menos de la mitad del porcentaje de votos que obtuvo en la parlamentaria, por lo tanto, estimo que podrían irse a la mitad de lo que eligieron el 2017”.
Actualmente tienen 13 representantes en la Cámara, pero eligieron 20 el 2017, cuando todavía estaban integrados por el Partido Humanista que obtuvo 5 escaños. Para estas parlamentarias, donde además no tendrán a Giorgio Jackson en la reelección, el cálculo de Auth dejaría al FA con entre 7 y 10 escaños.
Cristián Valdivieso concuerda y señala que es “difícil que tengan la mismas victorias del 2017 porque están mucho más fragmentados, además de que ya no son novedosos. Lo que antes era un grupo más homogéneo y amplio hoy día está dividido, entonces evidentemente hoy día el FA es algo más pequeño de lo que era el 2017″.
Desde esa perspectiva, asegura que “pensar que van a tener un éxito similar es muy difícil, sino imposible”.
Y agrega que “si no tienen figura o la figura que tengan no prenda en las encuestas, va a pasar que los candidatos se van a empezar a alinear detrás de figuras más poderosas, llámese Daniel Jadue, Pamela Jiles o quien aparezca con más fuerza en la izquierda. Ese es el riesgo”.