Democracia y PolíticaElecciones

Le Pen consigue el apoyo del presidente del partido de la derecha tradicional, abriendo una crisis histórica del conservadurismo francés

La líder de Agrupación Nacional ha celebrado la «elección valiente» y el «sentido de responsabilidad» de Éric Ciotti

Marine Le Pen y Jordan Bardella, líderes de Agrupación Nacional, el pasado domingo, tras su éxito en las elecciones europeas REUTERS

 

Éric Ciotti, presidente de Los Republicanos (LR, derecha histórica), desea un pacto o alianza electoral con Agrupación Nacional (AN, extrema derecha), el partido de Marine Le Pen, abriendo la crisis más grave del conservadurismo que fundó la V República, entre 1958 y 1962.

Jean-Marie Le Pen, fundador del Frente Nacional (FN), que su hija, Marine Le Pen, transformó en Agrupación Nacional, fue un enemigo absoluto y radical del general Charles de Gaulle, el patriarca fundador del Régimen, Jacques Chirac, que lideró a la derecha francesa durante más de treinta años, y de Nicolas Sarkozy, el último presidente conservador. Le Pen fue simpatizante de partidos neonazis. De Gaulle encarna la resistencia nacional contra el nazismo. Tradición respetada por todos sus herederos, hasta hoy.

En su día, Chirac declaró, refiriéndose a la familia Le Pen: «No puedo aceptar la banalización de la intolerancia y del odio». Nicolas Sarkozy, por su parte, declaró en repetidas ocasiones: «No votaré jamás por Marine Le Pen». Gérald Darmanin, ex portavoz oficial de Sarkozy,  actual ministro del Interior de Emmanuel Macron, ha reaccionado de este modo al posible pacto o alianza de LR y AN: «Éric Ciotti hunde en el deshonor a la familia gaullista, que fundó nuestra República. Charles de Gaulle y Jacques Chirac lo repitieron en muchas ocasiones: debemos construir un futuro común rechazando los extremos de izquierda y derecha«.

La decisión de Ciotti divide profundamente a su propio partido. Personalidades como Valéry Pécresse, presidenta de la región Isla de Francia (la más importante de Francia), considera «indigno» el comportamiento del presidente de LR.

Gérard Larcher, conservador moderado, presidente del Senado, ha reaccionado al acuerdo anunciado de este modo: «Ciotti no es digno de presidir el partido de la derecha francesa. Debe dimitir inmediatamente».

No sin cierta ironía, Marine Le Pen, por el contrario, saluda agradecida la «decisión valiente» de Ciotti, afirmando que «asume su deber con mucha responsabilidad».

Ciotti justifica se decisión personal por estas razones: «Francia está amenazada por el inmobilismo de Emmanuel Macron y el crecimiento de las izquierdas. Ante esas amenazas, Francia necesita otra política. Podemos formar una nueva mayoría parlamentaria con el partido de Marine Le Pen. Se trata de un combate difícil pero indispensable«.

Antes de ser una realidad definitiva, Ciotti debe pedir a todas las instancias de LR que ratifiquen el acuerdo. Si el partido acepta plenamente la alianza electoral con AN, Ciotti y Le Pen deberán dar a conocer el alcance exacto de sus acuerdos.

 

 

Botón volver arriba