«Los enfrentamientos crecen y pareciera que asistimos a un resurgir artificial de ‘las dos Españas’ de tan dramático recuerdo». Es la alerta que lanzan los obispos españoles en el que va a ser su documento marco de trabajo para los próximo cinco años. Desvelado ayer por la tarde, estas «Orientaciones y líneas de trabajo» buscan ser una puesta a punto de la Iglesia española en relación a las reformas pastorales de Francisco, adaptadas a la realidad española.
Y es precisamente en ese análisis del contexto incluido en un documento que roza el centenar de páginas cuando los pastores advierten de que «asistimos a una profunda crisis institucional, en la que algunos grupos políticos quisieran abrir una segunda fase constituyente». El texto, aprobado en la Asamblea Plenaria de la pasada primavera, admite que «no se trata de sacralizar el régimen del 78, pero sí de afirmar que este marco político constitucional ha devuelto a España una estabilidad grande, no lograda durante siglos». Desde la Conferencia Episcopal se llega a afirmar que «la puesta en cuestión de la Constitución, la monarquía, el poder judicial, junto a las fuertes tensiones independentistas en medio de una inédita crisis económica, llenan de preocupación e incertidumbre a la sociedad española».