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¿Me da una monografía del presidente?

¿Cuáles serán los hechos del sexenio de AMLO que pasarán, en unos años, la prueba de la simplificación didáctica de las monografías?

 

 

Cuando estudié la primaria fui víctima de una malvada técnica pedagógica que consistía en obligarme a comprar unas hojas en la papelería que de un lado tenían rostros de mexicanos ilustres y del otro, coincidiendo con cada imagen, un párrafo que algún tarado, tarada o tarade discurrió para ahorrarle a los maestros la engorrosa tarea de explicar quién era Benito Juárez y qué había hecho. Más o menos decía así: Benito Juárez nació el 21 de marzo de 1806 en Oaxaca. Fue presidente de México y proclamó las leyes de reforma con las que se separó a la Iglesia del Estado.

En mi escuela, donde los profesores no se destacaban por su talento para educar en la historia mexicana, lo que había que hacer era copiar la parte de atrás de la imagen del benemérito para luego recortarla y pegarla en el cuaderno azul de ciencias sociales. Las hojas en cuestión eran conocidas como monografías o cromos y yo tardaba mucho más en ir a la papelería que en hacer la tarea y olvidar que en 1806 había nacido el tal señor. Aunque su representación sí que se imprimía en mi memoria: la de él engominado y trajeado, la de Porfirio Díaz y su bigotote, la de Hidalgo de cuerpo entero con el estandarte de la Virgen, la de Josefa Ortiz con su peinado de chongo.

Las monografías nacieron en los 60 y los pioneros fueron los dueños de Ediciones Bob, en la calle Justo Sierra del centro de la capital mexicana. Y resulta que no son cosa del pasado en sepia sino que, a pesar de Google y del acceso a bibliotecas digitales, estas hojas simplificadoras aún existen y se venden bien. Las usó mi madre, las usé yo y las usan los nuevos mexicanitos.  Se hicieron para ilustrar, pero sirven como material de investigación barato y concreto. Concretísimo y a tres pesos.

A mi sorpresa por su persistencia en el siglo XXI se sumó el asombro por encontrar una monografía titulada “Presidentes de México”, con 35 rostros, en el que ya se ven Andrés Manuel López Obrador ¡y hasta Claudia Sheinbaum! Que no se diga que no se actualizan.

No pude leer la parte de atrás, pero, siendo tantos, supongo que recortaron la información de quienes han dirigido los destinos de México hasta la ignominia de poner solo la fecha. ¿Quién fue Carlos Salinas de Gortari? El presidente de 1988 a 1994. Lo demás es lo de menos.

Es injusto. El priista destituyó a más de 16 gobernadores y nadie le contó a los niños. Enfrentó el levantamiento zapatista y ninguna niña lo escribirá en sus cuadernos. Estuvo durante seis años neoliberalizando el país (neologismo de la era populista) pero los alumnos de la nueva escuela mexicana recordarán sólo que era pelón.

Así es el mundo; así era y así será: simplificador y abaratador. Los historiadores hacen su tarea y los biógrafos rescatan matices, pero a las monografías no hay quien les gane en alcance, impacto y huella en la niñez.

¿Qué quedará del expresidente Andrés Manuel López Obrador para los niños que usen este material didáctico? Estoy segura de que no será su traición al movimiento de Ayotzinapa y dudo que se mencione la construcción del AIFA. La criminal gestión durante la pandemia caerá en el olvido y las medicinas faltantes también. Sus berrinches con los monarcas españoles no pasarán la prueba del tiempo ni la limitación de caracteres, lo mismo que el gasolinazo, la liberación de Ovidio Guzmán, las muertes violentas, las becas para todos o incluso su pelea con la Suprema Corte de Justicia de la Nación. No minimizo la importancia de estas acciones, pero no pasarán la prueba de la simplificación didáctica.

Pienso en un estudiante de tercero de primaria dentro de 20 años, aún recurriendo a las monografías de presidentes de Ediciones Bob. Lo imagino viendo el rostro de Andrés Manuel López Obrador como un señor de mata espesa y canosa, y creo que al reverso leerá algo así como: “Presidente de 2018 a 2024. Fue él quien creó al nuevo ejército mexicano”.

Ese legado pasará la prueba del tiempo y los límites de la monografía.

 

ENLACE A LA NOTA EN «LETRAS LIBRES«: https://letraslibres.com/politica/ivabelle-arroyo-me-da-una-monografia-del-presidente/

 

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