Miles de personas se suman a la huelga general en Argentina en desafío a Milei tras un mes y medio de Gobierno
El paro ha sido convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) para expresar su condena a las políticas de Milei
«La patria no se vende», cantaron este miércoles a las puertas del Congreso argentino miles de manifestantes que se dieron cita en una calurosa jornada estival para hacer frente a la Ley Ómnibus impulsada por el presidente argentino Javier Milei y que estaba previsto que se tratara este jueves en la Cámara de Diputados. Finalmente, se anunció que el debate se posterga al martes próximo, porque el Gobierno ha perdido apoyo en el Congreso. Los más de 27 grados y la humedad veraniega típica de Buenos Aires no impidieron que la protesta se llevara a cabo con total normalidad. Con pancartas alusivas al «rey Milei» –no faltaron las máscaras y muñecos con su rostro-, y mensajes en defensa de la democracia y la cultura, ciudadanos de todo el país se congregaron para intentar frenar el ajuste económico impulsado desde el oficialismo.
Además de la movilización, que se replicó a lo largo de todo el territorio argentino –desde la ciudad de Rosario hasta Bariloche, pasando por distintos los puntos geográficos-, tuvo lugar la primera huelga general contra el gobierno convocada por la Confederación General de Trabajo (CGT) y la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), y a la que se sumaron la Asociación de Trabajadores de Estado (ATE) y diferentes movimientos sociales. También adhirieron a la huelga los gremios de transporte, los bancos, gran parte del sector de la cultura y la empresa Aerolíneas Argentinas, que canceló todos sus vuelos para esta fecha, lo que produjo un parón de actividades en todo el país. La protesta también tuvo eco en capitales europeas tales como Roma, Berlín y París.
La huelga general –realizada a 45 días de la llegada de Milei a la Casa Rosada- tuvo lugar justamente un día después del debate en el Congreso en el que el oficialismo consiguió su anhelado dictamen para comenzar a tratar la Ley Ómnibus. El proyecto de ley habilita al Ejecutivo a tomar algunas decisiones sin tener que pasar por el Congreso, propone privatizaciones masivas de empresas que están en manos del Estado y recorta gastos en el ámbito de la cultura.
La respuesta del Gobierno
Si bien la movilización, que estaba convocada para las 12 horas en las inmediaciones del Congreso, comenzó a desarrollarse de manera pacífica y en orden, avanzadas las horas se produjo alguna que otra tensión entre los manifestantes y la Policía. En términos generales, la protesta fue pacífica. Además de las fuerzas policiales, el gobierno también había convocado a la gendarmería para reforzar la seguridad a lo largo de toda la jornada.
Horas antes de comenzar la manifestación, la CGT había solicitado a la Justicia un ordenamiento de las fuerzas de seguridad, que la protesta se llevara a cabo con tranquilidad y que se garantizara el derecho a manifestar. A primera hora del miércoles se dio a conocer que la Justicia ordenó a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que se abstuviera de filmar la movilización en el territorio bonaerense.
En plena jornada de manifestaciones en su contra en todo el país, el presidente Milei publicó en redes sociales un curioso mensaje. «Ya llegará el momento en que la vean», escribió, y acompañó la frase con un gráfico sobre la evolución de la base monetaria.
El acto
Si bien el acto en el Congreso argentino estaba anunciado para comenzar a las 14.30 horas, la masiva asistencia a la manifestación hizo que la célebre Plaza de los dos Congresos se llenara antes de lo previsto y obligó a anticipar el evento. La exposición de los oradores duró poco más de una hora.
El primero en tomar la palabra fue el titular del gremio de camioneros, Pablo Moyano, quien criticó las medidas de Milei y pidió «explicaciones» al ministro de Economía, Luis Caputo. Además, sostuvo: «No podemos traicionar al peronismo, no se pueden privatizar Aerolíneas ni Trenes Argentinos». A continuación, advirtió: «No se pueden privatizar las empresas del Estado como Aerolíneas Argentinas, Télam, Banco Nación, Radio Nacional. Van a dejar a millones de trabajadores en la calle y se las van a entregar a los amigos». A su vez, pronosticó una agudización de la crisis social y amenazó a Caputo: «Los trabajadores, si votan esta ley, lo van a llevar en andas y lo van a tirar al Riachuelo».
Luego, subió al escenario el titular del gremio de Sanidad, Héctor Daer, quien sostuvo: «Venimos con la Constitución en la mano, que dice claramente que los derechos son progresivos y que no pueden volver atrás» y acusó al Gobierno de querer «destruir los sindicatos». Para finalizar, lanzó un mensaje al presidente: «Una cosa es andar con una motosierra y la otra es gobernar».