Oswaldo Páez-Pumar: No soy solo yo
Días atrás en un artículo hice referencia al viejo refrán “en el pleito de los burros no se meten los pollinos” y fue precisamente para aventurar en mi condición de pollino algunas “ideas”, más bien opiniones al voleo, sobre la confrontación entre Rusia y Ucrania.
Ahora he leído el respaldo que ofrece el usurpador Maduro a Putin en relación con esa misma confrontación y no puedo menos que repetir el refrán, porque una cosa son mis disparates y los de cualquier otro venezolano, que los disparates de quien aunque para mí sea un usurpador, para otros muchos incluyendo por supuesto otros Estados, nuestro usurpador se exhibe y se le reconoce como jefe de Estado y en consecuencia sus decires, plantean una toma de posición no personal, sino de la nación, de Venezuela como estado miembro de la comunidad internacional.
Si la situación deviniera en un conflicto armado ¿ese respaldo es solo de boquillas? o es que las bravuconadas de Putin amenazando con establecer en Cuba y en Venezuela dispositivos bélicos para atacar a los Estados Unidos en caso de que éste colabore con Ucrania directamente o a través de la OTAN, son por decirlo en términos comerciales, el cuánto hay pa’eso que Putin exige de aquellos a quienes les da.
Sabemos que, a pesar de su paso por el Ministerio de Relaciones Exteriores, el usurpador no es diestro en el manejo de estos asuntos, como lo dejó evidenciado cuando en agosto de 2012 nuestra Embajada en Kenia, siendo él, Canciller, no pudo atender con sindéresis un asunto en el cual el embajador era acusado de acoso sexual a los empleados locales, se produjo un asesinato en la sede de la embajada y como si esto no fuera suficiente, además estaba el envío de drogas a través de la “valija diplomática”.
Pero claro, la mejor forma de echarle tierra que encontró el difunto Chávez, cuando todavía no lo era, fue sacarlo del Ministerio de Relaciones Exteriores para cuidar nuestra imagen en el exterior y entonces lo nombró Vice-presidente y desempeñando ese cargo lo encontró la muerte, no a él sino al propio Chávez; y allí está, con toda una tramoya usurpadora, cuya máxima hazaña sería superar a Chávez que solo gobernó por dos períodos y él planifica hacerlo al menos por tres. Parte de ese plan fue ejecutado por el cne al abortar el referendo revocatorio, con decisiones violatorias de la constitución y del derecho del pueblo soberano a revocar el mandato de aquellos funcionarios designados a través del voto.
Caracas, 18 de febrero de 2022
