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Ramón Peña / En pocas palabras: ¿Y nuestra respuesta? 

El miedo del régimen a confrontar la voluntad ciudadana en elecciones, no guarda límite. Sus últimos manotazos lo revelan. Para terminar de disuadir a la ciudadanía democrática de participar en la elección este año del Poder Legislativo, los togados cortesanos usurparon sumariamente la atribución constitucional y legal de la Asamblea Nacional de seleccionar e investir a los rectores del Consejo Nacional Electoral. Pero no era suficiente, le añadieron a la confabulación el toque gansteril: el robo de los signos, derechos y representación de importantes partidos de oposición.

Lo que realmente reafirma el uso de todo género de trampa para mantenerse en el poder, es el profundo desprecio del régimen por la suerte de los venezolanos. El país está al borde del abismo y la banda gobernante sabe que no tiene capacidad para resolver uno solo de los males graves que nos aquejan. Prolongar su poder es un crimen a conciencia porque entiende que su permanencia solo puede profundizar la tragedia: las arcas quebradas, sin crédito internacional, incompetentes, aislados, con solo el menguado apoyo de regímenes hienas como el de Cuba, que carcome de la arruinada economía del país, u otros, como la dictadura religiosa de Irán, que utiliza a nuestro gang gobernante en su aprieto geopolítico. Ni que decir del interés mercantilista puro y simple de China y Rusia.

Corresponde al liderazgo político del país, activarse unitariamente y convocarnos, con unidad de propósito y confianza en sí mismos, para reavivar la esperanza e idear con sentido de realidad el enfrentamiento eficaz a la dictadura. La responsabilidad de los venezolanos es indelegable. El apoyo internacional, que condena estos y todos los atropellos contra nuestros derechos, es valioso pero, sustancialmente, una solidaridad más retórica que práctica.

Descartemos esa quimera que rememora a la Madame Butterfly de Giacomo Puccini, aquella ilusionada geisha que fantaseaba ver en el horizonte el humo de los barcos americanos…

 

 

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