Sociedad civil nicaragüense emplaza a la OEA a que “actúe” frente al régimen

Más de 30 organizaciones de la sociedad civil nicaragüense emplazaron, a través de una carta abierta, al Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA) para que “de una vez por todas reconozca, denuncie y actúe” ante el rechazo del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, a todos los intentos de la OEA en favor de la protección de los derechos humanos y del sistema democrático.

“Basta de declaraciones y exhortaciones. Basta de gestiones inútiles. Basta, señores embajadores, de contemporizar con esta dinastía familiar y con un binomio ilegítimo señalado por crímenes de lesa humanidad. Los Estados suscriptores tienen el imperativo ético de actuar urgentemente conforme el artículo 21 y los principios consagrados en la Carta de la OEA y la Carta Democrática Interamericana”, dice la carta.

El reclamo de estas organizaciones, se produce dos meses después que la Asamblea General de la OEA declaró “ilegítimas” las elecciones realizadas el pasado 7 de noviembre en Nicaragua. Desde entonces, el plazo establecido por la organización para que el secretario general, Luis Almagro, realice gestiones con el régimen de Ortega y Murillo “ha vencido dos veces”, señala la misiva.

Pese a la urgencia del caso, Almagro “guarda silencio” sobre las gestiones realizadas  y, a pocos días de una nueva sesión del Consejo Permanente de la OEA, se desconoce el resultado de las gestiones diplomáticas que tienen como fin obtener anuencia del régimen a la visita de una misión de alto nivel, cuya finalidad sería lograr lo que reiteradamente ha rechazado la pareja en el poder.

Haydée Castillo, presidenta del movimiento Nicaragüense en el Mundo, señaló que tanto el Consejo Permanente como la Secretaría General de la OEA “tienen la responsabilidad de ser coherentes” con la resolución de la Asamblea General, del 12 de noviembre, que les dio la responsabilidad de hacer una valoración colectiva sobre Nicaragua y les dio un plazo específico para hacerlo.

Además de ser “coherentes”, la OEA debe “asumir, de una vez por todas, que Ortega no tiene voluntad de recibir una misión de alto nivel y buscar otras opciones más determinantes y pacíficas para proteger al pueblo de Nicaragua”, puntualizó Castillo.

Asimismo, indicó que Ortega tiene claro que “no va a entregar el poder bajo ninguna circunstancia”, por lo que, advirtió, solo “busca impunidad” para su régimen señalado de cometer crímenes de lesa humanidad contra el pueblo de Nicaragua.

Para las organizaciones que se encuentran dentro de Nicaragua, en el exilio y en la diáspora, “la dictadura continúa reprimiendo a la ciudadanía con ferocidad evidente, las personas encarceladas sin juicio y recluidas en condiciones inhumanas siguen presas, con grave deterioro de la salud en varios casos”.

Además, denuncian que la ciudadanía nicaragüense continúa con su derecho conculcado a la reunión pacífica y la prensa independiente sigue siendo acosada. Por lo que concluyen “el país todo es una gran cárcel”, en que la ciudadanía no puede salir sin permiso y no existen garantías para el retorno de los exiliados.

“Hoy Nicaragua no tiene Gobierno. No hay Poder Ejecutivo ni Poder Legislativo porque sus personeros son producto de elecciones ilegítimas”, subrayan las organizaciones.