DictaduraRelaciones internacionalesViolencia

Trump anuncia seis muertos en un nuevo ataque contra una narcolancha frente a Venezuela

El presidente de EE.UU. ha asegurado en Truth Social que la embarcación estaba relacionada con redes de «narcoterroristas»

Trump anuncia seis muertos en un nuevo ataque contra una narcolancha frente  a Venezuela

 

El presidente Donald Trump anunció un nuevo ataque en aguas internacionales frente a Venezuela, con seis muertos. La operación consistió en un bombardeo contra una embarcación que, según él, estaba vinculada a una organización terrorista dedicada al narcotráfico.

El Pentágono ha desplegado 10.000 soldados estadounidenses en el Caribe, la mayoría en bases de Puerto Rico, con 4.500 marineros e infantes de Marina a bordo de ocho buques de guerra y un submarino, como parte del refuerzo militar ordenado por Trump frente a Venezuela.

La Casa Blanca afirma que este último ataque forma parte de una serie de operaciones similares en el Caribe, en las que el Ejército de Estados Unidos ha destruido pequeñas embarcaciones que supuestamente traficaban drogas frente a la costa venezolana. Desde comienzos de octubre, al menos 27 personas han muerto en estos bombardeos.

Es el quinto ataque confirmado, aunque el presidente Trump ha hablado de otros que no se han hecho públicos. La Casa Blanca justifica las operaciones bajo el argumento de que los narcotraficantes son «combatientes ilegales».

Trump ha defendido públicamente que Estados Unidos se encuentra en «conflicto armado con los cárteles de la droga» y ha prometido «destruir a los terroristas venezolanos y a las redes de narcotráfico». En sus declaraciones, ha calificado las acciones militares como una respuesta directa a la amenaza del narcoterrorismo en el continente americano.

Según datos de la Agencia Antidroga, la mayoría de la cocaína con destino a Estados Unidos pasa por el Pacífico, a través de Colombia, Ecuador, Perú y México. Caracas no produce ni trafica, pero aun así, la fiscalía estadounidense acusa al régimen venezolano de contrabandear con cocaína producida en Colombia e introducirla en EE.UU. por medio de intermediarios en países como México.

Trump reveló la semana pasada a ABC que estudia una «fase dos» del despliegue militar en el Caribe, tras asegurar que Estados Unidos ya ha logrado el control marítimo en la región. «Vamos a acabar con el tráfico de drogas, y ya hemos hecho mucho. No hay nadie entrando por mar. El mar está vacío. No están entrando drogas por el agua, y vamos a estudiar qué es la fase dos», dijo el presidente. Aun así, se siguen dando ataques como el revelado este martes.

La «guerra prolongada»

El anuncio se produce en plena expansión de la operación lanzada a comienzos de septiembre, que el propio Trump describe como «la guerra prolongada» contra el narcoterrorismo. La estrategia combina ataques preventivos, patrullas de la Armada y cooperación con aliados regionales.

En las últimas semanas, buques estadounidenses han intensificado su presencia frente a las costas de Venezuela, Cuba y Centroamérica. La Casa Blanca evalúa ampliar el alcance de las operaciones a puertos y enclaves logísticos utilizados por las redes criminales, aunque la decisión aún no ha sido formalizada.

Trump ha advertido a Nicolás Maduro de que puede evitar nuevos bombardeos si detiene el envío de drogas y prisioneros hacia Estados Unidos. «Si dejan de enviar drogas y prisioneros a Estados Unidos, no habrá necesidad de más ataques», declaró el mes pasado. Acusó además a Caracas de excarcelar miembros del Tren de Aragua y de permitir su paso hacia territorio estadounidense.

La tensión con Venezuela se ha incrementado tras estos cinco bombardeos confirmados y otros incidentes en el Caribe, incluido el abordaje de una embarcación pesquera venezolana por parte del destructor USS Jason Dunham, denunciado por Caracas como «una provocación directa». Mientras tanto, Washington refuerza su despliegue con cazas F-35 en Puerto Rico y los ocho buques de guerra en la región, en lo que el presidente presenta como una operación de «defensa exterior» frente a la amenaza del narcotráfico.

Trump sigue de cerca la campaña desde la Casa Blanca, en coordinación directa con el Comando Sur y el nuevo Departamento de Guerra. Su objetivo declarado es mantener la iniciativa, impedir que las redes criminales reconstruyan sus rutas y proyectar una imagen de dominio total sobre el mar Caribe.

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Mira también
Cerrar
Botón volver arriba