Derechos humanosDictaduraEconomíaRelaciones internacionales

Una Bitácora cubana (LXVII)

 

UNA BITÁCORA CUBANA (LXVII)

 

Ha sido mucho lo ocurrido en estas semanas transcurridas desde la última Bitácora, eso sí, en temas que son imposibles de no mencionar, porque afectan tanto a la sociedad como un todo, como a los sectores claramente confrontados: una sociedad ahogada por el músculo autoritario, y un régimen que no sabe o no quiere ofrecer salidas y alternativas a una situación tan lamentable que ya es un tópico comparar estos tiempos de escasez económica, de pandemia que no cede, y de represión que aumenta, con el llamado “Periodo Especial”.

Hay, eso sí, una diferencia que no puede obviarse, al contrario, debemos estar alertas ante ella: cada día que pasa la tiranía es reconocida como tal por cada vez más sociedades y gobiernos en el mundo. Cada día son menos los que le creen sus mentiras al castrismo y sus herederos; cada día que pasa se reconoce la íntima vinculación de estos tiranos con las desgracias y las represiones que sufren, casi calcadas en su maldad, los hermanos venezolanos y nicaragüenses.

Otro dato que tenemos que mencionar es la creación del Consejo para la Transición Democrática en Cuba, con aportes plurales y valiosos de diversos sectores que apuestan más que nunca por la salida democrática en la Isla.

Una salida democrática que busca poner punto final a lo que Ariel Hidalgo, en 14ymedio, llama “El más grande fraude de todos los tiempos”. Y es muy cierto.  Lo que se llamó “Revolución cubana” ha sido uno de los engaños, una de las farsas más ignominiosas en la historia no solo de Cuba, sino de América y del mundo. Veamos sus argumentos esenciales…

 

  • 1) Ariel Hidalgo: El más grande fraude de todos los tiempos

La supuesta revolución «verde como las palmas», nacida del triunfo de una insurrección cuyos objetivos fundamentales fueron la restitución de la Constitución del 40 y la celebración de elecciones libres que el golpe militar del 10 de marzo del 52 había desconocido, traicionó ambos propósitos. La política del régimen que se instaló en el 59 fue una continuidad de la que ya se había iniciado en el 52, aunque con nuevos protagonistas. Una pregunta de Fidel Castro ante una multitud en 1959, la pudo haber hecho perfectamente Fulgencio Batista en 1952: «¿Elecciones para qué?».

Una tercera demanda en la que coincidían algunos de los grupos conspirativos era la reforma agraria, porque era una asignatura pendiente de la Constitución, la cual proscribía el latifundio y establecía el reparto de tierras. Pero este propósito fue un ejemplo de cómo el ideal originario de la Revolución fue modificándose bajo la manipulación del nuevo caudillo. (…)

Los bienes explotados por capitalistas y terratenientes fueron expropiados y dejaron de ser privados para pertenecer al Estado, pero la verdadera finalidad no era que pasaran a manos de los trabajadores. Si así hubiera sido, nunca se habría producido la llamada «ofensiva revolucionaria» del 68, en que hasta los trabajadores independientes fueron expropiados, por lo que el fin era favorecer a la dirigencia de ese Estado y a la nueva clase burocrática engendrada en su seno, y no a la clase trabajadora. (…)

 En Cuba dejó de haber revolución desde fines de los 60, hace más de 50 años. Desde entonces, sólo ha habido reformas, o sea, cambios de forma de lo que ya existe sin alterar su esencia, un recurso que hoy ya no va a ser suficiente para apaciguar los ánimos de la población. (…)

¿Qué viene después de esto? Nada más, no sólo porque ya no es posible otro cambio cualitativo superior en el nivel de acaparamiento y desarrollo de la centralización en los marcos de un país, sino porque ya lleva en sus entrañas el germen de su propia destrucción debido a la ausencia tanto de la competencia como del incentivo productivo. (…)

Ante un modelo que no tiene futuro, la dirigencia cubana se encuentra que el camino por donde avanza, cada vez más estrecho, se ha convertido en un callejón sin salida, en medio de la crisis más profunda de toda su historia, y tiene ante sí una disyuntiva: olvidarse de las reformas y decidirse a realizar otra revolución desde arriba, esta vez a favor de los de abajo -algo que, por supuesto, nadie vislumbra-, o seguir resistiendo hasta que desde abajo estalle una explosión social que desplace a los de arriba.

 

=======

 

No hay Bitácora que no toque la grave situación económica, la cual se complica más por las mentiras -ya son casi un tic nervioso- de los responsables de turno; unos llegan, luego vienen otros ante la incompetencia de los primeros, y así sucesivamente. Elías Amor, en Diario de Cuba, se pregunta:

 

Madre con su hijo, La Habana. DIARIO DE CUBA

 

2) ¿Podrá crecer un 6% la economía de Cuba en 2021?

El ministro Alejandro Gil pone cara de optimista, pero como dice el destacado economista en la nota, “hay cifras que calla”. Y mentiras que repiten todos los castristas hasta el cansancio, como echarle la culpa al “bloqueo”. Y una excusa más reciente: “el coronavirus”.

Un crecimiento del 6%. La contracción del 2020 fue del 11%. Y encima el 2019 también fue negativo. ¿Cómo lograrán la meta señalada??? Elías Amor da una respuesta inicial: “Voluntarismo”.

¿En qué confía el ministro su previsión del 6% de la economía en 2021? Veamos. En primer lugar, en el turismo, cuya recuperación debería llevar a una cifra de unos 2,2 millones. Aun suponiendo que la pandemia quede atrás, lo que parece necesario para que el turismo reaccione, la temporada alta en Cuba comienza en noviembre, de modo que solo afectaría a dos meses de este año (…)

Además del turismo, el ministro hizo referencia a las exportaciones de níquel, muy beneficiadas por el precio del mineral en los mercados mundiales, y de los servicios de telecomunicaciones, una cuestión que merece especial atención. El ministro debería explicar cómo influyen las telecomunicaciones en el crecimiento económico. ¿Tal vez en la venta de teléfonos a los cubanos? ¿Quizás en las elevadas tarifas por el servicio que cobra el monopolio ETECSA? ¿O se refiere al aumento de internet y algunas aplicaciones, como la venta online?

Según el ministro, si la economía no crece más es por culpa del «bloqueo», que ha afectado a la economía en unos 5.500 millones de dólares, una cuantía que a lo largo de un lustro llega a 17.000 millones, con especial incidencia en ámbitos como la salud, el transporte público, la infraestructura hidráulica y la inversión extranjera.

Es difícil entender esta obsesión con el «bloqueo» cuando Cuba realmente comercia y realiza inversiones con absoluta libertad con todos los países del mundo, e incluso con el país que supuestamente la bloquea realiza intercambios de alimentación y productos médicos, como revelan las estadísticas. Algo no sale correcto en las cuentas del supuesto bloqueo. ¿No será que, al no pagar las deudas, los mercados financieros internacionales dan la espalda al régimen?

También el ministro aludió al esfuerzo presupuestario realizado por el país para hacer frente al Covid-19. Tampoco nada extraño, porque todos los países han tenido que aumentar el gasto público para el mismo problema (…).

Hizo referencia a los problemas de diseño e implementación de la Tarea Ordenamiento, y que se «había escuchado al pueblo, rectificado decisiones». (¡!!!)

En la eterna obsesión ideológica, el ministro acabó diciendo que, a pesar de la situación, el Gobierno cubano no había recurrido a medidas neoliberales, ni de choque, y en su lugar había desplegado una serie de actuaciones dirigidas a incrementar la producción de alimentos, aumentar la eficiencia y fortalecer la empresa estatal, así como el encadenamiento de esta con todos los actores económicos. Justo lo que no debe hacerse.

 

Euro y dólar en un cachumbambé. YOUTUBE/CALENTANDO MOTORES

 

3) Asimismo, también en Diario de Cuba, Elías Amor afirma que no hay espacio para dos monedas compitiendo en la economía cubana, como está sucediendo ahora, con “el dólar en las calles cubanas y el euro en los despachos oficiales”.

A partir del 21 de junio se prohíben los depósitos en dólares en la banca estatal. Una medida poca oportuna, en medio de la grave crisis económica, además de generadora de gran incertidumbre. Para Amor, solo explicable por el enfrentamiento contra EEUU. El liderazgo castrista se las prometía felices con la victoria de Joe Biden, supuesto socialista (para algunos incluso comunista), y que levantaría todas las sanciones del Gobierno Trump. Pues resulta que hasta ahora en gran medida las ha ratificado.

Al parecer, quieren abrirle la puerta al euro en la economía cubana, como divisa alterna al dólar.

 Para el destacado economista semejante artilugio no puede funcionar por motivos varios.  Asimismo ofrece algunos consejos prácticos. Veamos:

 

“En cierto modo, la geopolítica ha sido un factor determinante de la hegemonía del dólar en la economía cubana que la revolución comunista no consiguió eliminar.

De hecho, a pesar de las graves sanciones penales que se imponían por la tenencia de dólares, la población cubana siempre funcionó en los mercados informales con la divisa verde, y en el llamado Periodo Especial se estuvo a un paso de la dolarización espontánea de la economía, al perder el peso cubano todas las funciones que se asignan al dinero. Incluso con el CUC en circulación, el dólar tenía su espacio en las preferencias de los cubanos. Por lo tanto, hacer desaparecer esta moneda de la vida de los cubanos es imposible, pero es que, además, promover su sustitución por el euro, es mucho más torpe, si cabe aún.

En el mercado informal de la economía cubana, donde se pueden encontrar muchos más bienes y servicios que en el sistema de distribución normado, la moneda de curso (no legal, pero aceptada por todos) es el dólar. (…)

De modo que lo recomendable en este caso es no deshacerse de los dólares, salvo que sea necesario, porque el valor de la moneda aumentará. Y seguirá haciéndolo mientras que el Gobierno no adopte medidas de política fiscal y monetaria adecuadas para la situación actual, que nada tienen que ver con los ensayos de la Tarea Ordenamiento que están siendo funestos para la economía.

Los familiares en EEUU que envían dinero a los suyos en la Isla tampoco deben entrar en pánico e ir a cambiar dólares por euros, en un momento en que, además, la divisa de EEUU está débil con relación a la europea. Las remesas se podrán seguir realizando por medio de la vía «informal», lo mismo que ha ocurrido después de las sanciones de Washington a las intermediarias financieras dependientes del Ejército y la Seguridad del Estado en la Isla, como Fincimex.

El dólar en las calles cubanas, el euro en los despachos oficiales y de los magnates de la economía cubana. ¿Quién ganará ese pulso? Está claro.

Las dos monedas, dólar y euro, son fuertes, estables y responden a políticas económicas coherentes que guardan estrecha relación entre sí. No es lo mismo que el yuan o el rublo, que van por otros derroteros y que en Cuba son insignificantes en términos de su participación. El euro tiene una supuesta ventaja con respecto al dólar, que permite al Gobierno comunista saltarse las disposiciones del embargo/»bloqueo», y de ese modo, conseguir el objetivo de que el sistema bancario cubano pueda depositar en el exterior el efectivo en dólares estadounidenses que se recauda en el país.

Puede existir alguna preocupación en la comunidad cubana residente en EEUU, pero lo más probable es que el curso de las remesas seguirá fluyendo a la Isla, e incluso, el valor del dólar recibido, al ser más elevado y no estar bajo control bancario comunista, tendrá una mayor facilidad de uso y poder de compra que en la actualidad.

Además, nos esperan buenas noticias. Cabe esperar dentro de la Isla un desarrollo acelerado de los mercados informales para atender las demandas de la población. Cuando el régimen se venga a dar cuenta de todo esto, y decida poner fin a la resolución que entra en vigor el día 21, que en todo caso parece que tendrá naturaleza temporal, el sistema que gira alrededor del dólar será más fuerte, y los cubanos no tendrán el menor interés en adquirir euros en los mercados cambiarios. La euroización de la economía ni es probable ni sería conveniente”.

 

 

Imagen de archivo. Un hombre habla por celular en uno de los corredores del Parlamento Europeo en Bruselas, Bélgica, el 2 de mayo de 2018. Francois Lenoir / Reuters

 

 

4)  Lo decíamos al comienzo: Cada día que pasa son menos los que le creen sus mentiras al castrismo y sus herederos.

Ahora ha sido el Parlamento Europeo quien condena «la falta de voluntad» del Gobierno cubano para el cambio, lamentando asimismo que el régimen haya «intensificado su represión y las violaciones de los derechos humanos».

Fue una votación con mayoría absoluta a favor de una resolución impulsada por el Partido Popular Europeo que condena la violación de los derechos humanos y la situación política en Cuba. Entre otras denuncias, el documento expone «las prácticas de esclavitud moderna» que el régimen de la Isla desarrolla a través de las brigadas médicas en el exterior, y destacando que desde la aplicación del primer acuerdo bilateral entre La Habana y el bloque comunitario en noviembre de 2017«no se han registrado avances concretos en Cuba en relación con los principios y objetivos generales que persigue el acuerdo». Informa 14ymedio:

 

Por el contrario, lamenta que el régimen cubano haya «intensificado su represión y las violaciones de los derechos humanos» y que la situación haya «seguido deteriorándose para toda la sociedad cubana».

La resolución, que fue aprobada con 386 votos a favor, 236 en contra y 59 abstenciones, señala «la falta de compromiso y voluntad» del Gobierno por realizar avances, aunque «sean mínimos», hacia un cambio que permita reformar el sistema político cubano para mejorar «la participación social y política, además de las condiciones de vida de los ciudadanos».

Asimismo, los eurodiputados critican la existencia de presos políticos, la persecución «persistente y permanente, los actos de acoso y las detenciones arbitrarias de disidentes», y en especial condenan los ataques cometidos en los últimos meses contra artistas del Movimiento San Isidro, opositores pacíficos, periodistas independientes y defensores de los derechos humanos. (…)

El Parlamento de la Unión Europea (UE) pide también que el régimen cubano «aplique reformas jurídicas» para garantizar las libertades de asociación y manifestación, y que se «reconozca el periodismo independiente como una práctica legítima y respete los derechos de los periodistas».

En el documento se aboga por «elecciones libres, justas y democráticas que tengan en cuenta la voluntad soberana y libremente expresada del pueblo cubano».

Los eurodiputados condenan además «las violaciones sistémicas de los derechos humanos y laborales cometidas por el Estado cubano contra su personal sanitario enviado a prestar servicios en el extranjero en misiones médicas, que vulneran los convenios fundamentales de la OIT (Organización Internacional del Trabajo) ratificados por Cuba».

Para ello, recomienda a que la UE «supervise y haga un seguimiento estrecho» del respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales en Cuba a la hora de aplicar el acuerdo y que informe periódicamente al Parlamento al respecto. (…)

Un día antes de la votación, Josep Borrell defendió en una sesión de la Eurocámara el acuerdo de asociación política y cooperación con Cuba y desmintió que fondos comunitarios financien organizaciones afines al Gobierno de la Isla. Pocas horas después, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos denunció que la UE financió la universidad «más represiva de Cuba», la Central de Las Villas, con tres millones de euros en 2019.

 

 

Y hablando de derechos humanos, merecen destacarse la declaraciones de Marta Beatriz Roque, de que “Estamos ante una nueva versión de la Primavera Negra”. Y de que la cifra de 13 nuevos presos políticos que registró el Centro Cubano de Derechos Humanos (CCDH) en mayo, es la mayor desde marzo de 2003. Obviamente, la hospitalización forzada durante un mes del artista Luis Manuel Otero Alcántara fue lo que más repercusión tuvo.

 

 

Los miembros de la Seguridad del Estado patrullan el centro hospitalario donde está ingresado Luis Manuel Otero Alcántara. (14ymedio)

 

 

5) Queremos concluir esta nueva Bitácora con una nota muy auspiciosa: el anuncio de la creación del Consejo para la Transición Democrática en Cuba (CTDC). Veamos lo esencial de la nota de Camila Acosta en Cubanet.

“En el Consejo deben converger diferentes grupos o actores, (…) este es un germen democrático, es un ente abierto que anhela que todos quieran ser parte de él”.

 

LA HABANA, Cuba.- En conferencia de prensa desarrollada este lunes, varias organizaciones opositoras y de la sociedad civil independiente anunciaron y presentaron al Consejo para la Transición Democrática en Cuba (CTDC) una plataforma que pretende servir de base estructural organizada para viabilizar la transición a la democracia en la Isla.

Enix Berrio, representante del Partido Demócrata Cristiano en el CTDC, explicó que no pretenden convertirse en un gobierno de transición sino en un espacio donde converjan diferentes actores y organizaciones que desean un cambio democrático en la Isla: “Nos hacía falta unirnos, compartir nuestros objetivos, (…) esta es una plataforma abierta, inclusiva, que todavía se está pensando a sí misma. Nuestro objetivo es cambiar a Cuba desde la unidad y la diversidad. Nos hacía falta un mecanismo que dijera ´vamos a respetarnos, pero como lo que queremos es un cambio, pues vamos a aunarnos´”.

 

En este enlace puede leerse la nota publicada aquí en América 2.1, sobre la creación del Consejo:

 

Anuncian creación del Consejo para la Transición Democrática en Cuba

 

Siempre he sido un defensor constante de la unidad opositora frente al régimen; por ello, me congratulo y los felicito, la unidad de los defensores de la libertad es y siempre será el camino…

Marcelino Miyares, 23 de junio 2021.

 

 

 

Botón volver arriba