Una juez próxima a Maduro entrega ‘El Nacional’ a Cabello
Los ataques contra el periódico comenzaron después de que se hiciera eco de una información sobre los vínculos del vicepresidente chavista con el narcotráfico
De robo judicial, confiscación y un zarpazo contra la propiedad privada. Así ha calificado Miguel Henrique Otero, director de ‘El Nacional’, el último atropello del régimen chavista, que le ha despojado injustamente de la sede de su diario porque una juez chavista se la ha adjudicado a Diosdado Cabello, vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv).
En declaraciones a ABC, Otero ha lamentado la pérdida de la sede y anunciado que va a recurrir el fallo judicial, pues el edificio del diario ha sido entregado a Cabello mediante un «irregular y clandestino remate judicial». Un gesto que sorprende por el momento delicado que atraviesa el régimen, que lavarse la cara ante el Tribunal Internacional Penal (TPI) mediante el arresto de narcotraficantes y corruptos chavistas.
El fallo judicial fue acordado de manera secreta el 27 de enero de 2022, sin que la juez chavista Lisbeth del Carmen Amoroso Hidrobo, hermana del Contralor General del régimen Elvis Amoroso Hidrobo, lo hiciera público. Su objetivo era que los interesados no pudieran presentar de manera regular sus ofertas. Así se consumó el remate y la adjudicación a Cabello de la sede y los terrenos de ‘El Nacional’.
Los ataques contra el periódico comenzaron con la demanda presentada por el vicepresidente chavista en 2015, después de que el diario se hiciera eco de una información que lo vinculaba con el narcotráfico. Una noticia que publicó el diario ABC y ‘The Wall Street Journal’, y que luego replicó ‘El Nacional’ junto a otros dos medios digitales, ‘Tal Cual’ y ‘La Patilla’. Desde entonces, se han sucedido siete años de acoso y asedio judicial. «Aquí no hay justicia ni separación de poderes. Los jueces son irrelevantes porque hacen lo que les ordenan desde arriba [Cabello y Maduro]», afirma Otero a ABC.
El caso empezó con la denuncia Leamsy Salazar, el ex jefe de seguridad de Chávez y luego de Cabello, para los que trabajó un total de diez años. Salazar fue el primer militar de alto rango que rompió con el chavismo, cuando acusó formalmente de prácticas delictivas a las altas jerarquías del chavismo en Venezuela, en especial en relación con el tráfico de droga.
Sin independencia judicial
«En Venezuela no hay separación de poderes, porque la cúpula chavista controla el poder judicial y todos», denuncia Otero. «No hay manera de justificar que el precio del edificio de ‘El Nacional’, valorado en 20 millones de dólares, se haya rematado en 10 millones. Para colmo, se lo han adjudicado a Cabello por esa cantidad, igual al importe de su demanda. Es decir, la sede le ha salido gratis. Se cobran y se dan la vuelta», se lamenta el director.
Publicado solo en formato digital, el diario no tiene ni sede ni oficinas. Con 50 redactores, los periodistas tienen que redactar las noticias desde sus casas. «La solución es salir del régimen de Maduro porque no respeta las leyes, no hay justicia y los jueces solo aplican lo que les ordenan sus superiores», concluye Otero.
Miguel Henrique es el hijo del escritor Miguel Otero Silva y nieto de los fundadores del diario, que el 3 de agosto de 1943 sacaron la primera edición, hoy hace 78 años.