Gaitán, ¿pudo ganar?
La semana entrante se cumplen 70 años del asesinato de Jorge Eliécer Gaitán. ¿Habría llegado a la Presidencia? En 1946 fue candidato y quedó de tercero, luego de Mariano Ospina Pérez, quien fue elegido por 565.939 votos, Gabriel Turbay logró 441.199 y Gaitán, 358.957. Dos años después, en las elecciones de corporaciones públicas, el liberalismo obtuvo casi 900.000 votos contra 725.000 de los conservadores. El jefe del liberalismo, Eduardo Santos, ante el triunfo arrollador de Gaitán, renunció a esa dignidad y le envió las llaves de la sede del partido a quien ya se perfilaba como un gran líder. Vuelvo y pregunto: ¿habría ganado? El presidente era Ospina Pérez y tras el asesinato de Gaitán el enfrentamiento de los partidos históricos, con violencia hasta en el propio Congreso, era incontenible. El liberalismo escogió como su candidato a Darío Echandía y el conservatismo a Laureano Gómez. Este le envió un mensaje a Ospina pidiéndole “imprimir un acento fuerte a su gobierno” y que, de no hacerlo, “renuncio a la candidatura y me ausento del país”. A pesar de que el mandatario dijo no aceptar presión política de nadie, dos días después puso la artillería, que era la mermelada de entonces.
Por su parte los liberales, ingenuamente, pretendieron hacerle un juicio político a Ospina por los hechos del 9 de abril. Cuando se preparaban a realizarlo el 9 de noviembre de 1949, el gobierno cerró el Congreso y se cumplieron las elecciones con la candidatura única de Laureano Gómez. Echandía se retiró, luego de que apareció muerto un hermano suyo que tenía un gran parecido con él.
Claro, los anteriores hechos sucedieron como consecuencia del “Bogotazo”. Entonces no había encuestas, ni politólogos, ni Yarumo que pudieran predecir el evento de si no hubieran asesinado a Gaitán, ¿él habría ganado?
Todo son suposiciones que se pueden hacer 70 años después, cuando la historia del país cambió, y el liberalismo está de funeraria… Gaviria.