¡Traición a la patria y liquidación de la República!
La incorporación del embajador cubano Dagoberto Rodríguez Barrera al Consejo de Ministros del gobierno usurpador constituye un nuevo acto de vergonzosa sumisión a la dictadura cubana por parte de la tiranía que secuestra al país y destruye a la nación. La condición de república irrevocablemente libre e independiente así como la autodeterminación y la soberanía nacional, principios fundamentales consagrados en la Constitución han sido impúdicamente desconocidos por quienes hoy detentan ilegítimamente el poder.
Luego de imponernos mediante el terror un régimen que viola los derechos humanos y saquea nuestras riquezas materiales, se entrega oficialmente la conducción del país a una dictadura extranjera traicionando a la patria y desconociendo el derecho irrenunciable de la república a su independencia, a su integridad y a su soberanía. Nicolás Maduro informa que tal medida la asume en consulta con el Primer Secretario del Partido Comunista Cubano (PCC) Raúl Castro a quien califica como hermano protector del proceso revolucionario. Y ordena, de acuerdo con esas consultas, que al nuevo ministro-embajador se le abran las puertas de cada ministerio con el fin de implementar los planes trazados desde la isla en la profundización del proceso de dominación de Venezuela.
Con esa declaración el régimen reconoce de manera oficial que nuestro país se ha convertido en protectorado de la dictadura castrista, y el presidente usurpador actúa en su condición de egresado de la escuela de cuadros del Partido Comunista de Cuba obedeciendo a la rígida disciplina de corte estalinista que impone directrices internacionales a los países satélites bajo su control.
Es evidente que la decisión de manejar directamente al gobierno usurpador emana del Comité Central del comunismo fidelista dirigido férreamente por “el hermano mayor” Raúl Castro.
Consciente de su débil respaldo popular y de su creciente aislamiento internacional el gobierno ilegítimo profundiza la represión interna y cierra filas con los grupos violentos que desestabilizan las democracias del continente.
Y para controlar ese complejo proceso Cuba centraliza las decisiones estratégicas fundamentales frente el escenario posible de un conflicto mayor que puede extenderse a toda la región.
Ante tal situación el Consejo Superior de la Democracia Cristiana Venezolana expone las siguientes consideraciones:
1-El país se ha convertido en cuartel general de la subversión continental. Los principales jerarcas del régimen lo han reconocido en declaraciones y proclamas oficiales. La presencia en nuestro territorio de grupos vinculados al terrorismo internacional es innegable. La disidencia de las FARC y el ELN hacen vida y ejercen soberanía en los estados fronterizos junto a otros grupos armados que con frecuencia hostilizan y desplazan a los pobladores de esas regiones. En Caracas se realizan reuniones del Foro de Sao Paulo y se financian las principales actividades de las organizaciones que lo integran. Esas actividades y muchas otras que forman parte del proyecto hegemónico totalitario en el continente son planificadas y dirigidas por los agentes fidelistas.
2– Conscientes de esta realidad exhortamos a la Asamblea Nacional, a la Fiscal General Luisa Ortega Díaz, y al legítimo Tribunal Supremo de Justicia a iniciar una investigación y a asumir posiciones sobre las medidas anunciadas por el gobierno usurpador que liquidan la soberanía de la república y la convierten en sumisa colonia del régimen cubano. Así mismo proponemos que nuestro gobierno legítimo, a través del embajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA) Gustavo Tarre Briceño, informe a los países de América sobre los graves acontecimientos que aquí señalamos.
3- El Consejo Superior de la Democracia Cristiana en Venezuela, promoverá la activación de los procedimientos políticos y jurídicos disponibles, para dar a conocer al mundo estos hechos que amenazan la paz del continente y la independencia de Venezuela. Y se dispone a actuar al lado de la resistencia popular democrática encabezada por el Presidente Juan Guaidó en las luchas que haya que librar para defender nuestro derecho a ser libres.
Por el Consejo Superior de la Democracia Cristiana de Venezuela Caracas 25 de Enero 2020