Periscopio Cono Sur /Chile – Pandemia : La visualización de una gran brecha social

Esta pandemia en Chile, el Covid 19, no hizo otra cosa que visualizar lo que se negaba durante el estallido social, el pasado 18 de octubre, cuando Chile despertó con protestas masivas por los miles de abusos por más de treinta años, tras una dictadura de 17 años.

En tiempos de pandemia y cuando el gobierno instruye educar a distancia, on line, se dan cuenta que el 40% de los niños y jóvenes no tiene Internet en sus casas. Cuando el gobierno realiza el anuncio para los trabajadores que perdieron su trabajo por el Covid-19 para que usen el seguro de cesantía, se dan cuenta que 2 millones de chilenos y chilenas trabajan informalmente, y los fondos tienen un promedio de 500 mil pesos por persona para usar sólo un mes.

Cuando el gobierno realiza un tibio anuncio para que las empresas hagan el esfuerzo de no despedir a nadie, se dan cuenta que 80% de las Pymes (Pequeñas y Medianas Empresas) están endeudadas y deben ayudarlas. Las Pymes en Chile son el 98%, y generan más de 5 millones de puestos de trabajo a lo largo y ancho del país.

Cuando el gobierno pide no usar transporte público por el posible contagio del Coronavirus, se dan cuenta que el 70% de las familias chilenas no pueden dejar de trabajar y se desplazan sin auto a su trabajo.

El fin de semana santo el gobierno realizó un llamado a no viajar a la segunda vivienda, (en la playa), e instaló controles en las carreteras, pero entonces el gobierno se da cuenta de que hay gente que tiene helicópteros y avionetas, y que llegó perfectamente a pasar un fin de semana largo en la comodidad de su segundo hogar.

Cuando el gobierno pide que la población use mascarillas como medida de prevención, se da cuenta que no las compraron a tiempo, y nuevamente la gente solidaria las elabora y diseña lindos modelos. Cuando llaman al aislamiento sanitario, a cuarentena o confinamiento en casa, se dan cuenta que hay muchas familias que viven en menos de 40 metros cuadrados y con un solo baño.

Cuando el gobierno pide lavarse las manos varias veces al día, se da cuenta que hay sectores del país sin agua potable. Cuando piden ser solidarios, empáticos y cuidar a los adultos mayores, se dan cuenta que el 90% de ellos está solo, vive aislado y no les alcanza la pensión para vivir.

Cuando el gobierno pide no salir, solo para lo necesario, se dan cuenta que los trámites están disponibles solo en forma presencial; la gente debe salir y hacer largas filas para realizar trámites como el permiso de circulación. En resumen, se dieron cuenta que deben gobernar para la pobreza y mala calidad de vida, y se dieron cuenta que Chile NO es el país soñado ad portas del desarrollo económico, ese que no querían escuchar entre cantos y marchas cuando millones de chilenos y chilenas protestaron un 18 de octubre del 2019.

Hoy más que nunca el gobierno debe corregir el rumbo. Hoy más que nunca el país exige escuchar y resolver la demanda social y cambiar la Constitución del dictador Pinochet por una democrática. Sobre todo aplicar todas las medidas preventivas contra la pandemia que dejó al descubierto la terrible brecha de la pobreza y la justicia Social que todavía clama y reclama en las calles. Dignidad en nombre de los pobres. El Bien Común es el Norte…

No se puede esperar que ocurra de otra forma porque ninguno de los otros problemas que teníamos antes de la crisis sanitaria ha tenido la gentileza de desaparecer por falta de atención. Es más, posiblemente se estén agravando.

Retiro de fondos de pensiones

A través de una carta, senadores de oposición (Guido Girardi, Ximena Rincón, Alfonso de Urresti, Ximena Ordenes y Pedro Araya) insisten a Piñera en permitir el retiro de fondos de pensiones para enfrentar la crisis del Covid-19

Texto de la carta:

“No podemos permitir que la ciudadanía enfrente este período con carencias tales como la cesantía, el hambre y razonables cuidados médicos, especialmente si dispone de ahorros propios para enfrentar el resto de su vida. Acceder hoy a una parte de dichos fondos hará la diferencia en el caso de la actual urgencia sanitaria, tal y como ha sido decretado por su Gobierno”.

La posibilidad de retirar hasta un 10% de los fondos de pensiones, señalando que “equivale a incrementar la demanda interna entre 6 y 8% el PIB, en un período en el que necesitamos apoyar la economía”.

Para la población más vulnerable, proponemos la creación de un “Bono de Reconocimiento”, el que no exceda los $2 millones, que “se sustenta en el hecho de la incapacidad del Estado de entregar, hoy, la solvencia económica necesaria a las familias de nuestro país para enfrentar este duro y difícil período”.

Planteamos como alternativa a la reposición de los fondos retirados, la creación de un “Autopréstamo” de los Fondos de Pensiones, que no exceda el 10% del saldo de la Cuenta de Capitalización Individual.

“Este “Autopréstamo” será financiado durante el período restante para el cumplimiento de la edad legal y tendrá una tasa de UF+4%. Es en la línea de la propuesta de Gobierno de incentivar la postergación de la edad de jubilación, que proponemos el beneficio de, año prorrogado, punto de interés descontado. Es decir, si el trabajador al momento de hacer retiro de una parte de sus Fondos de Pensiones, informa la postergación de su edad de jubilación a los 69 en el caso de los hombres o 64 años las mujeres, este “Autopréstamo” tendrá una tasa de interés del 0%, y sólo sujeto a la variación de la UF”.