Las recomendaciones para el levantamiento de cuarentenas que el consejo asesor Covid-19 entregó al Presidente Piñera

El consejo asesor de expertos Covid-19 del Minsal, conformado por médicos y especialistas en epidemiología, hicieron llegar al Presidente Sebastián Piñera un documento en el que se detallan los lineamientos y las recomendaciones de cara al proceso de desconfinamiento en la Región Metropolitana y en el resto del país. Esto, en un escenario en que en los últimos siete días hubo una baja de un 25% de casos nuevos y un 21% en los últimos 14 días. Sumado a que el concepto de «leve mejoría» se ha instalado en los balances realizados por el ministro de Salud, Enrique Paris, y las diferentes autoridades sanitarias.

De acuerdo a lo planteado en el documento por el consejo de expertos, «frente a las señales recientes de descenso en las cifras en la Región Metropolitana es necesario advertir de la debida cautela en la toma de decisiones sobre la aplicación y eventual levantamiento de las medidas de confinamiento». En ese sentido, aseguran que «una vez levantado el desconfinamiento no significa de modo alguno volver a las rutinas habituales de vida, sino que a una situación de menor restricción a la movilidad de las personas, manteniendo la distancia social, una actitud vigilante y con capacidad de respuesta inmediata al menor indicio de un eventual rebrote».

A modo de antecedente, el consejo señala que «durante la pandemia de Covid-19 se han implementado una serie de medidas de distancia física y social y de restricción del movimiento de los ciudadanos. La medida más extrema es la cuarentena total y a pesar de no ser una intervención recomendada por la Organización Mundial de la Salud, por sus negativos efectos en la población, ha sido utilizada por un gran número de países. Los modelos matemáticos demuestran que esta medida enlentece la transmisión y puede retrasar el momento de mayor transmisión de casos. También puede contribuir a la contención de los brotes, es decir a cortar la cadena de transmisión».

En la misma línea, afirman que «la experiencia acumulada durante esta pandemia apunta a que el confinamiento, bien implementado, ha sido una herramienta clave para reducir la transmisión en contextos donde no se ha logrado tener un buen desempeño de las estrategias de testeo trazabilidad y aislamiento, que siempre será una opción de impacto sanitario y social óptima aplicada oportunamente».

Es por eso que abogan por un desconfinamiento gradual, argumentando que «la experiencia reciente en Chile y en otros países también demuestra que el levantamiento brusco de la cuarentena total puede llevar al rebrote de casos, razón por la cual debe considerarse esta medida inserta necesariamente en el contexto de un abanico de otras medidas complementarias para reducir este riesgo».

Los 4 criterios sanitarios

Según se indica en la minuta entregada al Presidente Piñera, el levantamiento de las cuarentenas debe ser gradual y con criteros sanitarios claros. Se recomienda, por ejemplo, que se fijen fases de desconfinamiento gradual tomando como modelo las experiencias de países como Nueva Zelandia, Australia, Alemania, y «se validen fases de desconfinamiento, criterios, indicadores y umbrales de decisión con los otros sectores del gobierno, la comunidad científica (mesa de datos) y la mesa social».

Criterios sanitarios a considerar: 

-Situación Epidemiológica, casos nuevos por día, con el mayor nivel de desagregación geográfica posible y su tendencia . Señalan que en Chile está disponible el número efectivo de reproducción de cada comuna. Entre los parámetros epidemiológicos a considerar, dicen que se debe incluir la caracterización de la transmisión, es decir, los escenarios de transmisión que ha definido la OMS (0 casos; casos esporádicos; conglomerados o transmisión comunitaria).

–Capacidad de detección: exámenes de laboratorio, número realizado, oferta disponible, porcentaje de positividad y tiempo promedio para la entrega efectiva de resultados.

–Vigilancia epidemiológica: Seguimiento completo y oportuno de los casos y de sus contactos (con indicadores y metas objetivas de cumplimento de trazabilidad).

–Recursos asistenciales, disponibilidad y utilización de camas hospitalarias, camas de cuidado intensivo y ventiladores suficientes para responder a la demanda asistencial, además de elementos de protección personal en cantidad y stock adecuados.

Condiciones para terminar cuarentenas

–Demanda asistencial: Señalan que «el o los hospitales del sector (comuna, ciudad o región) son capaces de tratar a todos los pacientes que requieran atención en sus diferentes niveles o complejidad que disponen, con sus recursos habituales. Índice ocupación de camas críticas menor o igual a 85% (bajo el modelo actual de gestión centralizadas de camas)».

–Incidencia de casos: Plantean que haya una «disminución objetiva y sostenida de los casos nuevos durante los últimos 21 días, lo que se traduce en un número de reproducción efectivo menor a 1 por al menos 3 semanas. Se definirá operacionalmente como área libre de coronavirus aquella con 0 casos nuevos en los últimos 28 días».

–Oferta de test diagnósticos: «La localidad deberá ofrecer condiciones de examinar rápidamente a todos quienes presentan síntomas. Se sugiere adoptar el indicador de OMS de al menos una muestra por cada 1.000 habitantes por semana en cada localidad (municipio) y un porcentaje positividad menor del 10%.

–Trazabilidad de contactos: «Se debe disponer de capacidad operativa para aislar y dar seguimiento al 90% de los casos confirmados en menos de 48 horas y de identificar y dar seguimiento en ese plazo al 75% de los contactos durante 14 días. El 60% de casos nuevos debe provenir de los contactos en seguimiento.

Cómo preparar el retorno

El texto de los expertos desarrolla en detalle indicaciones hacia un eventual retorno a las actividades cotidianas. «El levantamiento de la cuarentena, al igual que la reapertura de los establecimientos educacionales, debe ser realizada en forma gradual», subrayan.  Y luego recomiendan:

-Elaboración de una planificación especial para la reapertura de lugares propicios para generar aglomeración de personas relacionado con la reapertura «en fases»: restaurantes, bares, gimnasios, teatros, centros comerciales cerrados, tipo «malls».

–Educación permanente a la comunidad para reforzar las medidas de higiene a nivel comunitario y facilitar los medios necesarios para su aplicación.

-Reforzar las medidas de aseo y desinfección de los espacios cerrados donde circulan personas.

En base a esto, se guiaron por el siguiente ejemplo, de menor a mayor riesgo de reapertura: comenzar por establecimientos pequeños con menos de 20 personas; seguir con establecimientos con más de 20 personas, pero con bajo flujo; para finalizar con establecimientos que congregan un alto flujo de personas, reuniones que agrupan personas en un espacio común por tiempos prolongados de  más de 50 personas, reuniones/eventos de más de 50 personas.

Y esto debiera incluir:

-Separación de al menos un metro entre las personas en todo tipo de actividad donde haya flujo de personas: filas, transporte, supermercados, servicios públicos, casinos de alimentación.

-Optimización de espacios cerrados (salas, oficinas, etc): número máximo de personas por metro cuadrado, uso de mascarillas, sistemas de lavado de manos y de aseo y desinfección frecuente de superficies cada vez que sea posible.

-Limitación de flujo de personas: restricción vehicular, alternancia de horarios de establecimientos, alternancia de horario de ingreso a trabajo, horarios designados y sectorización para actividades determinadas (plazas, malls).