Alexis Ortiz: La democracia busca el centro
Dos venezolanos entre los más útiles que nacieron en el siglo XX, Gustavo Coronel y Moisés Naim, me inspiraron con sus artículos sobre la moderación política, este que me atrevo a escribir aquí.
Y es que la democracia, como sistema de convivencia, entendimiento y equilibrio, rechaza los extremismos, intolerancias y maniqueismos. Busca el centro, el justo punto medio de las cosas, el clásico “aurea mediocritas” del romano antiguo Horacio.
Hoy asistimos en el planeta al desenfreno de los extremos, al reino de la crispación y la rabia. Al dominio de los caudillos de derecha e izquierda, providenciales, excluyentes y delirantes. Ávidos de poder absoluto para el abuso y el continuismo.
Mandamases de patética vocación imperial como el Jinping chino y el Putin ruso. Fanáticos musulmanes como los gobernantes de Irán, Turquía, Gaza y Arabia Saudita. Opresores corruptos como los de Cuba, Venezuela, Corea del Norte, Nicaragua y los defenestrados Lula Da Silva, Evo Morales, Mel Zelaya y Rafael Correa. Calenturientos jurásicos como el español Pablo Iglesias…
La democracia reclama diálogo, negociaciones, acuerdos, destierro de las imposiciones, equilibrio e independencia de los poderes, imperio de la ley, derecho a la defensa y otras garantías correspondientes a la dignidad de la persona humana.
Hemos visto como presidentes con ropaje democrático, frente al asunto del Covid-19, han actuado con tal arrogancia, que han engrosado la calamidad al no respetar las recomendaciones de los médicos expertos. Su soberbia mesiánica ha favorecido los contagios, las muertes y los traumas económicos.
Frente a tal torrente de intolerancia y virulencia, debemos reaccionar con una contundente campaña a favor de los acuerdos y la armonía, sin menoscabo del derecho a la crítica y la disidencia.
Nosotros los venezolanos recordamos que más de una vez el libertador Bolívar, se pronunció contra los políticos, partidos y posturas exageradas.